Speranza [BruDick]

IV

Capitulo 2: Idiota.

Mansión Wayne.

En la cueva un auto llego a toda velocidad, Bruce salió rápidamente, sin el traje de Batman, ante esto Alfred se sorprendió aún que no lo expresó, solo se acerco a él.

—¿Maestro?, ¿no saldría con la señorita Selina?.

—Ese fue el plan, pero olvide que hoy era la exposición de Damián y discutí con Dick sobre ello, creo que esta vez no dije las palabras adecuadas.

—dijo Bruce mientras se pasaba las manos por la cara con exasperación.

—¿Solo esta vez?, si me permite decirlo, fue muy tonto de su parte, el maestro Dick se retiro hace una hora de la mansión, me pidió que le dijera que no intentará contactarlo. — Ante esto el multimillonario rápidamente salió de la cueva para ver a su hijo menor. Al llegar a la habitación, la encontró vacía, por un momento entro en pánico, estaba a punto de salir de la habitación hasta que sintió un peso sobre su espalda.

—finalmente llegas padre, espero que tu reunión con Selina fuese agradable.

A pesas de haber pasado poco tiempo con Damián, sabía que eso era una fachada y eso hizo que me sintiera aun peor, sabía lo mucho que se a esforzado Dick para que Damián tenga una niñez como cualquier niño normal a pesar de todo lo que paso.

-Hijo, se que lo que hice estuvo mal, en serio lo siento. Mi reunión tomó más tiempo de lo planeado, ¿Podrías perdonarme?— el pareció verme como si me saliera un tercer ojo.

—Acepto tu disculpa padre, pero realmente no creo que sea solo conmigo con quien debes disculparte, aunque disfrutó de la parecencia de Grayson, el tiene muchas ocupaciones patrullando su ciudad y su trabajo en el gimnasio, a pesar de eso el decidió venir a ver mi exposición. —lo sabia, tenía que buscar a Dick lo ante posible.— te sugiero que esperes unos días para hablar con el, en este momento realmente esta muy disgustado. Suspire mientras asentía.

—Tienes razón, mira hay algo que he querido hablar contigo desde hace tiempo y creo que mereces una explicación, sobre todo por estar tan ausente estos días. -lo baje de su espalda a su hijo menor y lo llevo a la cama, para después arropar lo.

—¿Tiene que ver con tus reuniones con Selina?. —me vio con curiosidad y no pude evitar pensar en que parecía aún más pequeño de lo que pretendía ser.

—si, es sobre ello.