-Susurros del corazón-

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4 DIAS RESTANTES
-Jueves-

Me desperté con la tonta esperanza de encontrarme con Amelié al abrir los ojos pero no fue así, supongo que se fue cuando conseguí dormirme. Cómo todas las mañanas me levanté velozmente de la cama, me vestí, me peiné, recogí mis cosas y bajé a desayunar.

Como todas las mañanas, Evan me esperaba puntualmente en la puerta de mi casa.

–¡Buenos días!

Le saludé dándole una palmadita en la espalda. Llegamos a clase como todos los días y esperé ansiosa a la hora del patio para vernos con Amelié. Justo cuando estaba saliendo, después de que tocara el timbre, noté como me estiraban de la muñeca.

–¿Eva-

No era Evan.

"¿Tú eres Raine, no?"

–Efectivamente, aquí la pregunta es quién coño eres tú

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–Efectivamente, aquí la pregunta es quién coño eres tú.

Era un chico de cabello claro y bastante alto con el pelo rizado, uno de mis compañeros de este curso, su presencia se hacía notar poco durante las clases.

"Te recomendaría guardarme respeto."

–El respeto se gana y con esa actitud de niñato no lo estás logrando. Dime qué cojones quieres o me iré, tengo cosas mejores con las que perder el tiempo.

"Relaja un poco, ¿no? Estás muy violenta."

–Violento tú que me has cogido del brazo como si nada, ¿piensas soltarme?

Avergonzado me soltó rápidamente al darse cuenta.

–¿Y bien? Tengo prisa.

"Bueno, uhm, quería pedirte un favor un poco personal..."

–Prosigue.

"Eres amiga de Evan, ¿No? Es que hasta ahora eres la única que veo que se junta con él..."

–Ajám, somos amigos de la infancia, ¿Y?

El chico comenzó a sonrojarse y ponerse nervioso.

–No me digas que te gusta...

Se convirtió en un tomate cuando mencioné eso. De repente aparecieron Amelié y la bibliotecaria por detrás.

"¿Estás molestándola, chavalin?"

"¿¡Q-Qué!? ¡¡No es eso!! ¡¡Raine, eres tonta!!"

Y de este modo salió por la puerta corriendo sin tan si quiera despedirse.

–¿Pero qué le pasa a ese chaval?

Ambas levantaron los hombros expresando confusión.

–Ahora que lo pienso, Amelié, no deberías deambular por el instituto como si nada, tú transparencia te delata como fantasma.

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