QHPS si Izuku podía ver Auras.

Capítulo 1: El Inicio de Todo.

"Todos los hombres son creados iguales, a menos que decidamos que no eres un hombre."

Colson Whitehead.

Cuando el mundo cambia también lo hacen las personas, pero por más cambios que se hagan hay cosas que nunca cambian, la discriminación, el odio y la desigualdad son cosas que parecen estar intrincadamente unidas a la humanidad.

A la edad de cuatro años la mayoría de los niños despiertan su quirk, su particularidad, ese algo que los hace especial y distintos a los demás, un ejemplo de eso fue lo que paso con Katsuki Bakugou.

<Kínder de la Prefectura de Musutafu>

En medio de un grupo de niños que apenas llegaban a los 4 años, uno de ellos destacó de los demás al extender sus palmas y generar una especie de pequeños fuegos artificiales de las mismas.

—¡Wow qué increíble!

—¡Esa es tu peculiaridad!

—Esa es una peculiaridad maravillosa, perfecta para un héroe —dijo uno de los maestros a cargo del grupo de niños.

Una sonrisa como ninguna otra estaba dibujada en la cara de Katsuki Bakugou, el niño que, en este momento, solo podía sentir una enorme dicha por ser el centro de atención.

—Todos mírenme, con mi quirk me convertiré en el héroe número uno. —Entre los innumerables niños que lo alababan, uno se destacó más de lo normal, rizos verdes y ojos que le hacían juego, era Izuku Midoriya, el mejor amigo de Katsuki Bakugou.

Ninguna alabanza o felicitación fue tan sincera como la suya, él incluso estaba llorando un poco de la felicidad, pero que podría hacerse, esa era su empática forma de ser.

—¿Eh? ¡Midoriya, deja de llorar! —dijo Bakugou una vez que todo se calmó.

—¿Quién está llorando? —respondió él mientras usaba su camisa para limpiarse los ojos. —Fue algo que me entro en los ojos.

—Más te vale, los héroes nunca lloran.

—¿Héroe? ¿Crees que puedo ser un héroe?

—Claro que sí, pero no uno mejor que yo —dijo con una recién adquirida arrogancia.

—Ya lo veremos, cuando despierte mi quirk veremos cuál de los dos será el mejor héroe...

Grandes palabras para un niño que no sabía lo que la vida le tenía planeado, fueron unos meses más tarde que la noticia se dio a conocer a todos, Izuku Midoriya no poseía ningún quirk.

Perteneciente al 20% de los quirkless por una articulación extra en su dedo pequeño del pie, fue lo que dijo el médico de grandes lentes.

<Casa de los Midoriya (Noche)>