07

592 85 2
                                    

Yeonjun iba saliendo del supermercado con todas las bolsas pesadas de sus compras, a pesar de que siempre se ejercitaba y estaba en forma el peso hacía que fuera mucha presión en los dedos de sus manos, causando un pequeño hormigueo, Beomgyu lo miraba batallar con las bolsas mientras se acercaba a él con su pequeño equipaje.

-Te ayudo hyung- tomó parte de las compras-
-Ah sí, gracias, Beom. Acompáñame al estacionamiento
-¿Estacionamiento? -cuestiono el chico oso-
-Vamos a dejar las compras en el auto-ordenó Yeonjun, eso sorprendió un poco al menor acto que el pelinegro noto- seguramente debes estar pensando que no lo viste la última vez y honestamente no tenías porqué, porque estaba en el estacionamiento del edificio-sonrió- Ahora regresemos al apartamento.
-Ah sí, claro-llevo una mano a su nuca y sonrió antes de subir al asiento del copiloto-

Al llegar al edificio, ambos se dieron la tarea de llevar las compras hasta el apartamento del más alto y una vez hecho lo anterior tomaron un descanso en la pequeña sala, después de unos minutos Yeonjun se levantó y fue a la cocina por unas bebidas para ambos.

-Toma-le acercó una botella de soda al castaño-
-Gracias y gracias por dejar que me quedé
-Ah, eso me recuerda... ¿Te encuentras bien? Me tomaste por sorpresa durante la llamada
-Ahh-soltó un suspiro y después sorbió de la lata de soda para luego comenzar a hablar-Qué más quisiera que todo esté bien, al llegar a casa solo me espero un problema tras otro, primero Taehyun frente a la puerta de mi casa, luego mi madre haciendo comentarios inoportunos y golpeándome por responderle de la misma manera. Simplemente no han sido mis mejores días-expresó mirando fijamente hacia un punto y con cierto tono de vació-
-Lo siento-se sentó al lado de el chico oso y colocó su mano en su hombro mostrándole apoyo sin querer ser invasivo con él, pero de nuevo y de manera inesperado Beomgyu lo abrazo, derribándolo en el sofá-
-No te disculpes, me has ayudado tanto en estos días cómo no tienes idea-su ojos estaban empezando a humedecerse-que no sé cómo agradecerte de manera adecuada-no podía seguir reteniendo sus emociones hasta ese punto, así que su lagrimas comenzaron a rodar por su rostro, Yeonjun en ese momento correspondió el abrazo y comenzó a darle palmaditas en la espalda como a los niños pequeños cuando lloran, aunque también le preocupaba que Beomgyu pudiera escuchar a su acelerado corazón-

Aquellos gestos continuaron hasta que Beomgyu estuviera un poco más tranquilo y después de que Yeonjun quedara dormido y luego de unos minutos Beomgyu lo acompañó, no se explicaba por qué era tan cómodo y cálido para él estar cerca del mayor a pesar de no haber cruzado palabra con él en la universidad y haber tenido mínimas conversaciones con él.

A la mañana siguiente el primero en despertar fue Yeonjun, al escuchar el sonido de los botones de la puerta al insertar la contraseña para entrar al apartamento, no quería despertar a Beomgyu, así que se movió con suficiente cuidado para tomar su celular de la mesa de centro y revisar la hora, pero al presionar el botón de "encendido" se encontró con un mensaje en la pantalla de su madre diciéndole que lo visitara, "Eso explica el sonido de la puerta" pensó aun somnoliento. Volvió a repetirlo y cayó en cuenta de que su madre estaba en el apartamento, causando que se le fuera el sueño. Afortunadamente su madre fue directamente a la cocina a dejar algo de comida preparada en el refrigerador, pero eso no le impidió gritar el nombre de su hijo para hacerle saber que ya había llegado.

-¡¡Yeonjun!! -gritó mientras seguía guardando la comida-

Para la sorpresa de Yeonjun el castaño se despertó fácilmente

-¿Quién está gritando? -hablo con voz adormilada, aun sin abrir los ojos y continuar abrazando al mayor-
-Es mi mamá-susurro el pelinegro-
-¿Tú mamá?

---🐢🩵---

Nos vemos en la siguiente actualización... Por favor no olviden votar 🙏🏻✨

NECIO | YeonGyuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora