02; ¿Quién se cree?

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6:50 de la mañana y ya me encontraba dentro de la escuela. Supuse qué a está hora estaría únicamente yo y uno que otro profesor, pero me equivoqué. Aproximadamente si mi vista no me falla, estába todo el club de escritura, de artes escénicas, algunos reporteros, personal de limpieza y casi todas las personas que acuden normalmente a la biblioteca de la escuela. Incluso habían estudiantes de otras escuelas.

Era de esperarse. No todos los días una de las novelistas mas famosas del momento, ofrece la oportunidad de participar en la redacción de una de sus novelas a un simple estudiante de universidad.

Las posibilidades de ser quién trabaje con Park Jihyo ahora se reducen a un 2%. Dos porciento únicamente porque la mayoría de maestros apuntarán a mí si tienen la posibilidad de sugerir a un estudiante. Aunque lo veo poco posible, porque por lo visto en las entrevistas, Park Jihyo no se deja influenciar por las demás opiniones, y siempre es ella quien da la última palabra.

- Alumnos y docentes, se le pide de parte del equipo de administración que se retiren hacía donde se encuentra la cancha de basquetbol, dónde sera realizada la conferencia. Personas que no sean alumnos y docentes de esta institución no pueden pasar. - Se comunicó el director mediante uno de parlantes que se encontraban allí. Los reporteros y demás personas que no pertenecían a el instituto comenzaron a retirarse entré quejas. Desde un principio se había anunciado que únicamente los alumnos de la institución podrían participar. ¿O es que acaso no escucharon? Fueron demasiado ingenuos en pensar que podrían pasar así como si nada importará.

Me coloque en la fila para ingresar, y cuando llegó mi turno me pidieron mi tarjeta de identificación para corroborar que si pertenezco al instituto. Pensé que nunca me sería útil pará algo, incluso estába a punto de tirarla a la basura. Pero menos mal que no lo hice, o podría perder la mayor oportunidad que se me presenté en toda mi vida.

- ¡Tzuyu, ven pará acá! ¡Aquí estamos! - escuché un grito a lo lejos, no hacía falta voltear para saber quién era. Sooyoung se encontraba junto con Irene y Seulgi en la primera fila de asientos. Me dirigí a paso rápido antes de que alguien intentará ocupar mi lugar. Saludé a cada una con un abrazo y me senté al lado de mi profesora.

- ¿Tzuyu-ssi, estás emocionada? - preguntó Seulgi mirándome con una sonrisa.

- Lo estoy, pero al parecer Sooyoung Unnie lo está aún mas que yo - dije mirandola, su pierna no dejaba de subir y bajar. Siempre que se encuentra nerviosa tiene ese tick en la pierna.

- Es que no puedo esperar a verla, traje uno de sus libros por si tengo la oportunidad de que lo firme - hablo emocianada. Rebuscó entre su bolso y sacó uno de los últimos libros de Jihyo, uno de los mejores en mi opinión. Aunque más que un libro, era como una saga. Esa versión era la última de la cadena de novelas policiales que tenía, o eso supongo yo. Nunca se puede saber cuándo termina uno de sus libros, porque la mayoría de finales siempre quedan con algo que resolver, o simplemente nunca se resuelven. Siempre terminan en esos característicos puntos suspensivos.

Eso es lo que me gusta de su escritura, aunque a veces algunos de los finales son irritantes porque te dejan todo a tu imaginación. Pero al fin y al cabo es parte de la experiencia de la lectura.

Cada uno de sus libros son únicos.

Su estiló de escritura es muy complicado de entender, pero en el momento en el que logras comprender todo, se convierte en algo que te atrae, no puedes dejar de leer hasta terminar el libro. Creó que eso mismo es lo que los hacé tan populares.

El alumno qué logré ser el elegido para trabajar con ella sera la persona mas afortunada del mundo.

Imaginar el simple hecho de poder estar parado al lado de ella ya es ser afortunado. Pero poder pedirle consejos, compartír ideas, y crear una novela en su compañía, eso es mas que ser afortunado.

Erotismo / Jitzu Donde viven las historias. Descúbrelo ahora