Capítulo 4

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Capítulo con contenido +18

Lucía estaba atrapada entre los cuerpos de Amelia y Hunter, Hunter besaba el cuello a de la omega y le acariciaba los pechos, mientras Amelia, la contemplaba mientras, le besaba en los labios y empezaba a desatar el nudo de la bata de la morena.

La de cabello color menta, contemplaba sin perderse ningún detalle de sus acciones, una vez en nudo desatado, abrió la bata de la omega.

Ambos alfas al ver que la omega no tenía más que una braga puesta por debajo de la bata, se relamieron los labios, pensando la mio y una perversiones que le harían a Lucía.

Debían aceptarlo, esperaban ansiosos que a Lucía le llegase su periodo de celo, ver esa piel expuesta de la omega, los tentaba, querían degustarla, besarla, lamerla, morderla, marcarla. Estaban ansiosos de probarla.

-ah... Lucía huele tan bien... -habló Hunter intensificando sus caricias en el cuerpo de la chica.

-mgh...! -jadeo la de piel morena.

-y lo mejor que solo nosotros podemos disfrutarla. -habló Amelia entre besos que aún le daba a Lucía

Entre los dos, le quitaron la bata de baño, fue entonces que Lucía ahogada en lujuria dijo:

-háganme suya!

Hunter y Amelia se miraron cómplices, el sexo de ambos se excitaba, el calor era abrazador para los tres, la alfa de cabello menta, comenzó a meter su mano por dentro de la braga, sobresaltando a la omega.

-solo relájate, Lucía... -dijo Hunter

El libido, tanto de los alfas como de la omega, estaba a tope. Y desbordaría al momento que le hagan sentir el verdadero placer.

Cambiaron de posición, bueno, la omega lo hizo, esta vez beneficiando a Hunter, Amelia por su parte seguía estimulando a Lucía, mientras que con su otra mano, empezó a tocarse a sí misma.

Lucía le acariciaba el torso al Hunter mientras los besaba de manera apasionada, el de cabello rubio cenizo correspondía con intensidad. Lo excitaba sentir las manos pequeñas de Lucía acariciar su torso.

Dejaron de besarse para que ella pudiera gemir, debido a las constantes estimulaciones que recibía por parte de Amelia.

-ah~ no pares Amelia, no pares... ~ -decía entre tímidos y súplicas Lucía

-te haré venir las veces necesarias -dijo la peli menta.

-me siento excluido. -dijo el rubio cenizo

-el que no trabaja no come, Hunter. -dijo Amelia

El se molestó un poco, pero no quiso quedarse atrás, ahora él hizo cambiar de posición, Lucía recostada en la cama, mirando excitada como, mientras Hunter empezaba a tocarla, Amelia se quitaba su ropa, pero Hunter fue aún más allá, le abrió las piernas a Lucía, posicionándose entre ellas, acercó su rostro a la vagina de la omega y empezó a lamer con gula.

Mientras lo hacía, y oía los fuertes gemidos que ella daba, empezó a desabotonarse la camisa, para luego quitársela y lanzarla por algún lugar de la habitación.

Amelia se posicionó aún lado de Lucía y le empezó a besar el cuello y parte del hombro derecho, hubo un instante que dirigió su boca al oído de la omega y le dijo de manera coqueta:

-te gusta?

La omega le miró y sonrió suplicante, y contestó:

-me encanta.

Haciendo sonreír, no solo a Amelia si no también a Hunter, quien seguía p, chupando, lamiendo y besando cada parte de la entrada de Lucía. Comenzó a desabrochar su cinturón y pantalón, la alfa de cabello color menta, empezó a succionar uno de los pechos de la morena.

Descargas gratificantes eléctricas recorrían el cuerpo de Lucía.

Cambiaron de posición, los tres ya completamente desnudos, se pusieron en alguna posición adecuada, que les permitiese a ambos alfas, poder penetrar a la omega, al mismo tiempo, no querían acérele mucho daño, quería al menos penetrarla de a uno, sin embargo ella les decía:

-voy a estar bien... sin miedo al excito.

Aquella frase, tan simple, hizo arder en lujuria a los alfas, ambos entraron en ella con delicadeza, ella gimió por el dolor que sintió, sin embargo quería seguir, pero ambos alfas la aprisionaron entre ellos para inmovilizarla, Lucía estando en su celo, no era capaz de pensar con claridad, si se movía sin acostumbrarse se lastimaría, por eso la inmovilizaron.

Fueron tortuosos 8 minutos en los cuales Lucía empezó a gemir lujuriosamente agonizante, pasado el tiempo necesario, la liberaron, y las embestidas empezaron, lentas y suaves.

-más! -dijo Lucía

Hicieron caso omiso, siguieron embistiendo con suavidad por lo menos por 3 minutos. Luego de las embestidas se hicieron más profundas y rápidas.

La omega seguía gimiendo, el sudor recorría el cuerpo de la omega, y se asomaba por las pieles de los alfas.

Una hora estuvieron allí sin parar, hasta que los alfas iban a eyacular, pero antes de acerolo, salieron del interior de la omega, y fue entonces que liberaron su semilla.

Lucía se sentía complacida, a pesar de no seguir estando penetrada, la sensación de placer seguía en su cuerpo, por lo tanto, ella gemía.

Los tres tenían la respiración errática y cansancio ante tan intenso momento.

-Amelia... Hunter... los amo. -dijo Lucía

-y nosotros a ti. -dijo Amelia

-no solo te amamos, te adoramos. -dijo Hunter

La omega, primero besó a la alfa peli menta y luego al alfa rubio cenizo. Ambos alfas abrazaron a Lucía, y ella debido al cansancio, se durmió.

Amelia y Hunter sonrieron al ver a su omega que descansaba totalmente complacida. Y al poco rato después ellos se durmieron.

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Continuará.

Poliamor (Hunter x Lucía x Amelia) [Omegaverse]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora