Me levanté muy temprano por la emoción de saber si natita fue aceptado en la disquera y firmaron contrato. No tuve tiempo ni de despedirme de mis papás.
Cuando llegué a la prepa subí silenciosamente al salón para felicitar a nata, estaba segura de que si lo aceptaron porque el es demasiado talentoso, le traje unas rosas preciosas.
Al ir entrando al salón escucho a nata hablando con Dan.
- Deberías decirle ya wey, ella se va a poner muy feliz, es la indicada. Y si se enoja entonces ahí no era, pero sé que ella no es así.- Dice Dan susurrando.
- Es que no la quiero dejar, me ha apoyado demasiado y es mi todo, la única que ha confiado en mí y en mi talento. Ni mis jefes han hecho eso wey.- Contesta nata rascándose la nuca.
- ¿Cómo estánn?, ¿me tienes que decir algo nata?- Dije entrando al salón con el ramo escondido.
- Aquí andamos.- Contestó Dan.
- Bien preciosa, ¿y tuu?- Dijo nata nervioso.
- Bienn, pero, ¿si te aceptaron o no?- Dije con ansias.
- Si amor, si me aceptaron.- Dijo sonriendo mientras yo corría a abrazarlo y besarlo, para luego darle su ramo.
- Que precioso ramo, nunca pensé en que alguien me daría uno, te amo.- Mencionó nata mientras me abrazaba y me daba muchos besos.
- No quiero que la única vez que te den ramos sea en tu funeral.
- Ay, que lindoss, ¿y si les hecho agua?- Mencionó Dan bromeando.
- Ya parele pinche envidioso.- Contestó nata abrazándome aún.
- Oye rey, dime lo que me tenías que decir antes que se te olvide.- Dije poniendo atención.- Sea lo que sea yo siempre te apoyaré en todo.- agregué mientras tomaba su mano ya que estaba nervioso.
- Bueno, es que si me dieron mi contrato pero... mi carrera no sería aquí, sería en Los Ángeles.- Dijo triste.
- No importa, puedes ir a mudarte allá.- Respondí con felicidad.
- Pero ya no te vería, ni a mí familia en mucho tiempo.- Me contestó con los ojos cristalinos y la voz quebrada.
- No importa amor, siempre te apoyaremos desde aquí, mientras tu seas feliz yo lo soy y no hay manera de que cambie, mi sueño es verte cumplir tus metas y lograr todo aquello que siempre has querido tener. Lo que te mereces está allá y no quiero que pierdas el tiempo aquí solo por mí.- Dije con la voz quebrada mientras corría una lagrima por mi mejilla.
- No sabes cuánto te amo, y sé que nunca dejaré de hacerlo porque eres lo que más quiero.- Susurró mientras unía nuestros labios y limpiaba con su pulgar mi lagrima.Todas las clases nos la pasábamos hablando que haríamos en el tiempo que nos queda juntos.
- Amor, quiero que hoy me acompañes a mí casa a cenar.- Dijo mientras caminábamos a la salida agarrados de la mano.
- Algo así como... ¿presentarme a tu familia?- Dije nerviosa.
- Si preciosa, eso es lo que quiero hacer, para que estés junto a mí mientras les cuento mi firma y todos mis planes. Quiero que seas parte de todos mis momentos especiales.- Mencionó para luego abrazarme.
- Te amo tanto, prometo que en uno de estos días también te presentaré, quiero que vean mi razón de estudiar.- Dije sonriendo con gracia.
- Tuu de como quiera estudiarías, te mueres si repruebas, me encanta que te esfuerces tanto, quiero verte graduándote tan preciosa como siempre.- Dijo ilusionado.
- Eres tan molesto. Todo lo que dices me encanta.- Le contesté robándole un beso.
- Yo sé que te mamo.- argumentó con egocentrismo de broma, por lo cual lo golpee jugando.
- Ya vámonos, me tengo que arreglar para ver a mi suegra hermosa, y a mí suegro querido, y a mí cuñada tan linda, y a mi cuñado y al perro de mi cuñado.- Dije pensando.
- Ay, por eso me encantas.- Dijo nata riéndose.Después de eso cada quien se fue para su casa, yo llegué bañándome y arreglándome, nata me dijo que fuera casual, que con cualquier cosa me veía bien. Amo todo de nata.
Al terminar de arreglarme me maquille natural y le heché unas mentirillas a mí mamá con que iba a la casa de mi amiga la que vende pan.
No me dejaba irme, hasta que mi amiga me hizo paro y le marcó para convencerla.Le avisé a nata que ya había llegado a su casa, la verdad estaba muy nerviosa.
- Hola amor.- Dijo nata abriendo la puerta, para luego besarme rápidamente.- ven, entra.- Mencionó agarrándome de la mano para meterme a la casa.
- Te extrañé mucho.- Dije recargándome en el.
- Yo a ti hermosa.- respondió para luego darme un tierno beso en la cabeza.- ¿estás nerviosa?.
- Si, mucho.- Dije ansiosa.
- Te aseguro que te van a amar, eres mi mujer ideal.- Contestó seguro.
- Te adoro tanto mi natita.- Dije mientras caminábamos a la cocina.
- Jefa, ella es ____, mi novia.- Dijo sonriendo, a lo cuál su mamá me abrazó tiernamente.
- Un gusto señora, tenía muchas ganas de conocerla.- Dije mientras correspondía su abrazo.
- El gusto es mío, pasen a la sala, ahorita les hablo para que vengan a comer.- Dijo apurada por hacer la cena.
- ¿No quiere que le ayude en algo?- Dije acomediéndome.
- Nono, así está bien.- Dijo mientras cortaba la lechuga y preparaba la salsa.
- Si gusta yo le ayudo a cortar la lechuga.- contesto acercándome a la tabla.
- Bueno, ya que insistes.- respondió con una sonrisa, por lo cuál sonreí.
- Bueno ma, voy a ayudarte con el agua porque ya saben que a mí me queda al chingazo.- Dijo agarrando la jarra y los limones.
- ¿Y eso que andas ayudando en vez de agarrar la guitarra?.- cuestionó la señora, por lo cual reímos.
- Esta es una ocasión especial jefecita.Luego de tener la cena lista, nata y yo acomodamos la mesa y su mamá trajo lo que faltaba. Llegaron sus hermanos y su papá.
- Ella es ___, mi novia.- Dijo nata presentándome a sus hermanos y su papá.
- Un gusto conocerlos.- agregué sonriendo y dándoles la mano.
- El gusto es mío.- Dijo Daneiry sonriendo.
- Soy el papá de Natanahel, un placer.- contestó amablemente.
- Un gusto, soy su hermano.- respondió.
- Ya vamos a cenar, les va a encantar.- Dijo la mamá de nata, para luego todos sentarnos en nuestro lugar.Todos empezamos a cenar con platicas de nata que nos hacían reír a todos.
- Quedó muy buena la cena y el agua, muchas gracias.- mencioné deleitando todo.
- Que bueno que te gustó, me encanta cocinarles esta comida desde que eran niños, Natanahel siempre me lo pedía el día de su cumpleaños, y como hoy es un día especial, lo hice con mucho cariño.
- Muchas gracias jefa, les tengo que decir algo muy importante sobre mi carrera musical.
- Ay nata, no salgas con eso otra vez.- Dijo su papá, por lo cual nata se sintió nervioso, a lo cual yo tomé su mano por debajo de la mesa y la acaricié.
- Dinos hijo.- mencionó su mamá.
- Me iré a Los Ángeles por mi contrato recién firmado, lo cuál es un gran avance y logro para mí.- respondió nervioso.
- Felicidades perro, te lo mereces cabrón.- contestó su hermano abrazándolo.
- ¿Cuándo?- Dijo su mamá.
- En un mes aproximadamente.
- Pues estoy muy feliz por ti pero preocupada por lo que te pasará.- mencionó su mamá con lagrimas, para luego ir a abrazar a nata.
- Y tú apa, dí algo por favor.- murmuró nata llorando en el hombro de su mamá mientras la abrazaba.
- Pues qué te puedo decir. Si no llegara a funcionar, ¿qué harás?.- Dijo serio.
- Luchar por mi sueño y lo que me hace feliz.- contestó firme.
- Bueno, estoy feliz por ese niño soñador pero enojado con nata. Felicidades hijo.- agregó para ir a abrazar a nata.
- Te extrañaré hermano.- Dijo Daneiry.Después de que nata platicara los planes con sus padres, el me acompañó a dejarme en mi casa.
- Amor, me encantó conocer a tu familia y que te apoyaran con tu carrera. Muchas gracias por dejarme entrar a tu vida.- Dije besándolo.
- Gracias a tí preciosa por siempre apoyarme y sacarme sonrisas en cualquier momento.- respondió para luego besar mi mejilla.
- Vamos a conocer a mi suegra.- Murmuró feliz.
- Oh, eso... piensa que fui con mi amiga la de las tortillas.
- Ah... ¿aún no sabe?
- No... planeo hacerlo pero no me dejará salir contigo y te querrá conocer.
- No te preocupes amor, te entiendo.
- ¿Si?... ¿me perdonas?.- Susurré culpablemente.
- Si amor, ven.- contestó para luego acercarme y abrazarme.
- Gracias hermoso.- Correspondí su abrazo. - Mañana mismo le digo y vienes a comer para presentarte que la verdad ya quiero que vean al hombre de mis sueños.
- Me encantaría
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PLATICAME DE TI - Natanael Cano
FanfictionNatanael Cano desde sus inicios encontrando el sentido de la vida en su juventud, que lo ayuda a seguir sus sueños y tratar de seguir adelante lejos de su amor.