¿Muy pronto nos veremos?

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Otro día de clase, otro día que Jungkook sufría con las clases.

Y la cosa no era que no entendía la clase, para nada dominaba el tema muy bien, el problema era que él tenia una muy mala imagen con los profesores viéndolo como "el alumno pandillero" y es que él sabia que no tenia una imagen muy suave, pero que lo consideren de esa manera no le gustaba.

Hora tras hora pasaba, esperando a que llegue la hora del receso para darle todos los mimos que podía a su noviecito, porque en esos momentos lo único que podía era agarrar su mano libre, mientras el rubio anotaba todos los apuntes que podía en su cuaderno, muy concentrado.

En el caso del rubio, no le gustaba las clases pero no se quejaba de nada, porque con los profesores tenia la imagen del típico "Alumno responsable, aplicado y tranquilo", era bueno en todas las materias, y se llevaba bien con cada docente.

Sin dudas la parejita de la clase eran polos apuestos, pero como muchos dicen polos apuestos se atraen ¿No?

    ~🌱~

Cuatro eternas horas de estudio pasaron, para que llegue la hora del receso, no había persona más feliz en ese momento como Jungkook, porque no esperaba ni un segundo más para llenar de besos a su noviecito por todo su rostro.

—C-Cariño déjame g-guardar m-mis lapiceros! Mmmhhh!— Decía el rubio como podía entre risas por los besitos que su novio le proporcionaba en sus mejillas, mientras lo abrazaba como si fuera un pequeño peluche.

—Bueno bueno, es que no podía vivir más sin darte un besito mi principito hermoso— Hablo el pelinegro que al final de sus palabras le dio un piquito cariñoso a su novio, para luego soltarlo dejando que guarde sus cosas.

El rubio solo se limito reír enternecido por lo cariñoso que era su novio, sin dudas lo amaba.

El pelinegro solo se dedico a acariciar el cabello de su pareja con delicadeza mientras dejaba que guardase y acomodase todo en su pupitre; todo era tranquilidad para su burbujita de amor si no fuera que el grito ensordecedor que podía jurar, se escucho a tres metros de distancia.

—¡¡Ya llego, no puede seeeer!!—Gritaba la castaña de ojitos tiernos con nombre Wonyoung, mientras salía corriendo de la clase seguida de su grupito de dos más.

—¡¡Espérame Wonyy!!—Casi gritaba con voz chillona cabello rubio claro y perfil tierno de nombre Rose, mientras seguía lo más rápido que podía a la castaña.

—¡Ridículas no me dejen!— Regañaba fuerte un castaño, con cara perfilada y labios algo abultados, llamado SeokJin; mientras intentaba seguir a las dos chicas.

Y así como los gritos se escuchaban más lejos, más lejos estaba el grupito del aula de estudio.

—¿Qué acaba de pasar?...— Pregunto el pelinegro mirando con el ceño fruncido, algo desconcertado, la puerta donde se fue corriendo el grupito.

—Mmh supongo que Tae acaba de llegar— Dijo sin importancia alguna con el tema en ese momento, y terminando de dejar todo ordenado a su alrededor.

—¿Acaba de llegar?— El pelinegro no pude evitar quitar su ceño fruncido por un rostro de curiosidad

—Ujum, bueno cuchurrumin ya termine, ahora si mimos mimos— Dijo el rubio con la voz más tierna que le salía mientras estiraba sus bracitos en dirección al castaño.

El pelinegro movió su cabecita de un lado a otro intentando quitar cualquier pensamiento que tenia sobre el tema de la llegada de Taehyung, para así prestarle toda su atención a su pareja.

—Ven aquí mi bebé prechiosho—De un momento a otro tenia al rubio atrapado entre sus brazos mientras le daba besitos en su cabecita y uno que otro piquito en sus labios

Y así pasaron el receso, juntos en todo momento, conversando de cualquier tema y dándose atención y mimos de sobra. Aunque en la mente de Jungkook pasaba otra cosa nada relacionada con su novio.

    ~🌻~

Después del receso, nada cambio; todo siguió normal transcurriendo las 4 horas más de clase que faltaban para que el día de clases acabada.

Jungkook a las justas y sobrevivió hasta la salida, aun sin entender el porque no estaba la presencia nueva que tanta curiosidad le causo desde que lo mencionaron.

A la hora de salida como era lo habitual, Jungkook esperaba que su noviecito terminase de copiar los apuntes de la pizarra para que luego guardar sus cosas.

Mientras lo esperaba, miro como el grupito de "las creídas" conversaban algo alto como si el chisme fuera para los que aun no salían del aula.

Aunque Jungkook no se consideraba chismoso, no pudo evitar curiosear un poco en la conversación cuando escucho un tema que le llamo la atención.

—¿En serio te aseguro que mañana vendrá a estudiar un día completo en nuestra clase?—Pregunto con asombro en su tono, la castaña con mirada tierna.

—Sip, yo se que mi cabeza de fosforo nunca me mentiría, por eso hoy vino a pedir permiso a la dirección para eso— Dijo el castaño de labios algo abultados mientras tomaba su mochila y salía del aula junto a su grupito.

Jungkook se perdió entre sus pensamientos y preguntas ¿Acaso se referían al mencionado Taehyung? Tanto fue su viaje en sus pensamientos que no se dio cuenta cuando su novio lo andaba moviendo de un lado al otro con su poca fuerza.

—¡¡Jungkookie despierta!!—Grito algo fuerte el rubio con el ceño fruncido y un puchero, sin dudas notablemente molesto por como su novio lo había ignorado cuando le dijo que ya estaba listo.

—A-Ah lo siento bebé, me perdí en mis pensamientos— Dijo el pelinegro volteando rápidamente para mirar al rubio, y sonreírle nervioso ya que había notado el enojo del contrario.

—¡Vuelves a hacerme eso Jeon, y sin besitos por un día entero!—Lo señalo con un dedo aun con su ceño fruncido y puchero, al parecer lo que menos le gustaba era ser ignorado.

—Ayyy no cariño, lo siento bebé, lo siento muchísimo, ¡no me dejes sin tus besos!—Decía el pelinegro con tono de sufrimiento mientras seguía a su novio que ya estaba saliendo del aula.


Continuara...

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Teoría "Astronomy"... (Vkook/Taekook)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora