Ep 14🗡🌓

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Finalmente domingo, el único día en el que Vegetta tenía el privilegio de descansar sin preocupaciones

Los pájaros trinaban a través de su ventana indicando que la mañana llegó. La luz del sol era tenue entrando por las persianas entreabiertas manteniendo ese ambiente tranquilo en la habitación que parecia tornarse de un color rosa ante el contraste de tonalidades

El calor de su cuerpo relajaba sus músculos haciendo sus párpados pesar, no es que fuera un flojo, nadie podría describirlo con esa palabra, pero esta vez quería quedarse en cama todo el día.

Era como en las noches de invierno, el frío provoca que disfrutes del calor bajo tus frazadas generando en uno ese deseo de no levantarse nunca. Sin embargo no estaban en invierno, era apenas primavera, una época del año en que el sol daba el suficiente calor para elevar tu temperatura pero no quemar tu piel.

Le restó importancia, después de todo, lo único que quería hacer en ese momento era descansar, era lo que más necesitaba para curar sus heridas en menos tiempo

Un jalón lo sacó de su ensoñación siendo su torso oprimido contra algo detrás de él seguido de un gruñido ronco que parecía una queja

Con desconcierto intentó abrir sus cansados ojos quedando entrecerrados mirando a su alrededor encontrando ese lazo entre su mano y la de su acompañante en la noche anterior

Soltó un leve chillido de sorpresa al verse rodeado por un brazo mientras su espalda chocaba contra el pecho del híbrido, parecía estar sujeto con la suficiente presión como para que no escapara

Se avergonzó un poco por la situación en la que se encontraban, una de sus piernas desnudas parecía estar entrelazada con la del castaño quien por suerte usaba pantalón, tan cerca de su cuerpo que cada respiración la podía sentir en su nuca como un aire cálido que lo refrescaba

Había sido cubierto casi por completo por el cuerpo del joven novato, no podía negar que alguna vez al verlo pensó estar en una situación así, pues el hecho de que fuera guapo no ayudaba a que obviara su presencia, pero el hacerlo en la realidad lo tenía con una tonalidad de colores rojizos en su rostro que cualquiera pensaría que tenía una grave fiebre

Hubiera seguido sobrepensando la situación si no fuera por sentir otra vez esa fuerza que parecía querer mantenerlo ahí cada vez que se movía, como si temiese que se fuera

Esta actitud intrigó al peli café obligándolo a girarse para ver al híbrido

Soltó el entrelazamiento de sus manos viendo cómo el cuerpo contrario se estremecía para luego volver a tomarlo ya habiéndose dado vuelta

El rostro del chico tenía el entrecejo fruncido mostrando con levedad sus filosos dientes entre sus dóciles labios. Estaba teniendo algún tipo de pesadilla? No estaba seguro, pero sin dudar un segundo Vegetta lo intentó reconfortar posando su brazo izquierdo sobre su cuello acariciando sus cabellos castaños mientras susurraba palabras bonitas

No vio el momento en que el híbrido había despertado buscando el calor del lazo entre sus manos encontrándose con las gazas del antebrazo del ojiamatista sujetándolo con algo de fuerza haciéndolo soltar un quejido


V: Ouch — gruñó bajo pensando que el chico aún seguía dormido

F: I-I'm sorry Vegitta — se disculpó con un tono débil en su voz susurrando


El escucharlo le dio un escalofrío en su cuerpo, había despertado y él estaba tocándolo como si nada, aunque sabía que no lo hacía con mala intención, la vergüenza de ser descubierto lo envolvió de nuevo, pero esta bajó su intensidad al recordar la cercanía que el híbrido parecía tenerle, por lo que optó por tomar confianza


V: It's ok, don't worry, and good morning Foolish — su voz era igual de baja que el día anterior y esta vez el nombrado no pensaba cometer el mismo error de hacerlo saltar de la cama

Mi Hogar Entre Tus BrazosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora