La platica no fue mucha, pero si fue amena y para Foolish era aún mayor, poder hablar como si nada hubiera sucedido lo tenía tranquilo. El constante agobio por saber si Vegetta lo seguía odiando se esfumó en el momento en que el peli-café le mostró una de sus sonrisas sinceras y acogedoras que relucía en sus momentos de mayor calma, que si podía reconocer, eran pocos
La charla continuó con respecto a su hija, Foolish fue quien más habló del tema pues era quien cumplía sus tareas con frecuencia mientras Vegetta escuchaba atento a cada detalle, saboreando los postres que reconocía fueron hechos por Missa
Al casi terminar de comer, Foolish arrancó unas cuantas uchuvas del arbusto a los bordes del cerro para dárselas a Vegetta y compartir un fruto entre ambos, pues se sentía algo mal al escuchar a Vegetta alagar los postres de Missa, aunque sabía que no había razón para entristecer
Foolish comió el fruto con un rostro satisfecho, pero al contrario, Vegetta se le quedó mirando con los ojos bien abiertos y maravillado, con un leve tono rosa brotando en sus mejillas y la boca un poco entreabierta
F: No- te gusta? — su cuerpo se balanceó hacia adelante esperando su respuesta con un rostro a punto de lagrimear
V: Am- No, I like it.. — siguió sin consumir el fruto acariciando levemente la dócil capa que cubría la fruta naranja en su interior — Es sólo que..
Quedó en un leve trance antes de sacudir la cabeza, desvestió el fruto y se lo comió de igual manera, con una sonrisa en su rostro y pequeños bultos en sus mejillas que destacaban su enrojecido rostro
Foolish siguió sacando uno que otro fruto hasta que Vegetta se negó entre risas. En un principio el híbrido se sintió apenado, pensó que el elfo estaba comiendo algo que no le gustaba sólo por complacerlo, pero al tiempo en que pensaba eso, su cuerpo empezó a elevar su temperatura, algo extraño pues era una noche fresca
Veía con lentitud cómo su acompañante tomaba una cereza amarilla cambiando su color a roja acelerando su proceso de maduración con su magia para luego consumirla
Al tener la mirada de Foolish encima, Vegetta pensó que quizá también quería probar el fruto, a lo que, en un impulso travieso, se inclinó hacia adelante y besó al híbrido, mas no esperó ser sujetado y pegado a su cuerpo pasando por en medio de toda la comida
El beso duró unos segundos que querían conservar, pero los restos de cereza en los labios de ambos impedían la entrada del otro en su interior, aunque eso fue un pequeño alivio para el elfo
Al separarse dejaron un pequeño hilo de saliva entre ambos que fue alcanzado en un último beso dado por Foolish mientras Vegetta se reía por lo bajo
V: No vuelvas a dejarme sin caminar que te reviento — sonaba a amenaza, pero su rostro tenía ese gesto travieso que formaba durante el sexo
F: Yes my lord [Si mi señor] — sus branquias se movían en desesperación volviendo a acercar su rostro al ajeno por otro de sus apacibles besos
Vegetta se hizo para atrás queriendo evitar que lo besara, pero no importaba donde, lo único que quería Foolish era sentirlo
Las manos firmes de Foolish sostenían la columna del ojiamatista mientras le besaba la mejilla hasta llegar a la oreja y morder su lóbulo con finura dejando suaves marcas de sus filudos dientes. Siguió lamiendo su cuello bajando hasta sus hombros cubiertos por la camisa beige que usaban para trabajar
V: P-para para chaval — dio ligeros golpes sobre el pecho del híbrido llamando su atención — Pensé que íbamos a comer, no que me irías a comer a mi — se burló tratando de aminorar la calentura que el híbrido parecía presentar
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Mi Hogar Entre Tus Brazos
FanficEn un mundo de caos y escándalo, existen dioses que los rigen, entre estos también hay semidioses quienes son mandados por los supremos a supervisar la estadía de los humanos. Uno de estos semidioses fue enviado a cuidar de una isla, la cual reboza...