"Eres la chica más extraordinaria, clara como una nota musical y sincera como melodía, eres la música que suena en mi cabeza desde que nos conocimos"
¿Que pasa si después de haber derrotado aquel mal decides revelar tu identidad no solo a tu compañe...
—¿Volverás a pintar en el parque?— me preguntó Rose al verme salir de la escuela con mi equipo de pintura.
—Bueno eso...— estaba por responder pero Lila me interrumpió.
—Por favor, el pintar no es la gran cosa— dijo Lila con una notoria molestia en su voz.
—Rose le estaba preguntando a Alone, no a ti, mentirosa— dijo Alya tratando de defenderme.
—Si Lila, si nadie te pregunto no hables— dijo Kim cruzado de brazos y Lila soltó un bufido como respuesta.
Ha estado así desde el castigo que la maestra Benoit le dio por haber manipulado a Chloé para que lastimara a Marinette, aún recuerdo cuando ella se frotaba la muñeca luego de escribir aquellas líneas cuando regresé a casa después de pintar en el parque.
Mi tía me contó que la hizo hacer esas líneas hasta que el reloj diera la media noche para ver si aprendía la lección, trate de abogar por ella pero mi tía dijo que eso le enseñaría a ya no hacer de las suyas, solo espero que haya aprendido la lección con eso.
—¿Listo para pintar Alone?— me preguntó una voz femenina que estaba cerca mío y al voltear para saber de donde vino vi a Eléonore.
—Eléonore, bueno... ya estaba por...— traté de explicarle pero de nuevo fui interrumpido por Lila.
—Oh vamos, no debes de juntarte con él, en cambio yo te puedo...— dijo Lila pero Eléonore la interrumpió.
—Es Alone con quien estoy hablando, no contigo, mentirosa nariz larga— dijo Eléonore de forma seria haciendo que Lila se molestara y se iba a casa.
—Perdona a mi prima, no ha tenido un buen día— dije un poco triste al ver así a Lila.
—No siempre vas a poder defenderla, ella debe aprender que todo lo malo se regresa— dijo Eléonore casi de forma seria.
Sin más ella empezó a caminar y yo por instinto la seguí mientras sostenía mi equipo de pintura, pero me extraño un poco que no fuéramos al parque sino a otro lugar al punto incluso de que tomáramos el autobús para llegar a nuestro destino.
—Emm Eléonore, ¿a... a donde vamos?— pregunté un poco nervioso al estar en el autobús.
—Mi padre logró hacer que ocuparamos un salón para que puedas pintar conforme a la música— me dijo viendo por la ventana para que no perdiéramos el camino.
—¿No... no se enojaran tus maestros si hacemos eso?— pregunté aún más nervioso por meternos en problemas.
—Ellos están al tanto, así que no te preocupes— dijo sin apartar la mirada y ante esa declaración pude respirar hondo.
Pasamos unos minutos en el transporte por lo que decidí contarle un poco de mi vida en el orfanato y luego de haber sido adoptado en Italia, ella solo escuchaba pero igual con una mirada rápida se notaba que me veía con algo de pena. Ya para cuando estaba por decirle el porqué me había enviado aquí ella oprimio el botón de parada.
—Llegamos, no te separes de mi— me dijo y bajamos del autobús al mismo tiempo para caminar unos segundos y me asombre al ver el lugar.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.