🐞 Alma 🐞

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Al mismo tiempo de la platica

—Lamento que ya no puedas salir como antes Kagami— le hablaba a Kagami a través del teléfono.

Cómo los secretos del señor Agreste fueron revelados sus amistades fueron demasiado afectadas por eso que ya ni Kagami podía salir de su casa, sin contar que ya no podíamos reunirnos como antes al tener a su madre culpandome por deshonrar a su familia.

—No lo hiciste con mala intención, era tu deber como heroína de París el derrotar a Shadow Moth— me animo Kagami al otro lado del teléfono.

—Igual me gustaría poder ayudarte a limpiar su apellido, pero con mi tobillo roto...— dije volteando a ver mi tobillo vendado por lo del día anterior.

Mis padres tuvieron que hacerme una cama temporal para evitar que suba las escaleras de mi habitación que daban a la de arriba, me ayudaban a subir a las escaleras pero me sentía culpable por lo que tenían que hacer hasta que mejorará. Kagami me dio unas palabras de apoyo antes de colgar ya que estaría en problemas con su madre por hablar conmigo.

—¡Marinette! ¡Sabrina está aquí con la tarea!— grito mi madre luego de la llamada y escuche la puerta de mi habitación abrirse por Sabrina.

—¿Te enviaron para dejarme la tarea? Creí que...— dije pero no pude continuar ya que Sabrina se puso a llorar.

—¡Lo siento Marinette! ¡Si hubiera evitado que Lila hablará con Chloé no estarías lastimada ni expulsarian a Chloé de la escuela!— confesó Sabrina sin dejar de llorar.

Debí suponer que era idea de Lila que eso pasará por que ya nadie le creía sobre su vida de lujos y viajes, aprovecharse de la ira de Chloé para que se vengara de mí, es increíble que llegará a caer tan bajo.

Cuando Sabrina me dio la tarea, sin hacer obviamente, se sentó en el sofá de mi habitación para recibir la tarea hecha para entregarla, estaba por hacerlo hasta que escuche levemente una melodía que me llamó la atención, y cómo no podía ir al balcón le pedí a Sabrina que fuera, haciendo que la melodía no sólo inundará mi habitación, sino también mi alma.

📖 Al mismo tiempo 📖

Alone había llegado al parque después de clases con su equipo de pintura tal y cómo le dijo aquella chica de aura seria y dominante, aún no podía creer que fue capaz de encarar a la hija del alcalde el día anterior, pero aún a pesar de la actitud de la chica no podía sacar de su mente la cara de aquella chica fría.

—Creí que no aparecerías— dijo Eléonore parándose frente a Alone teniendo un atuendo diferente mientras sostenía el estuche donde guardaba su instrumento.

—Creí que no aparecerías— dijo Eléonore parándose frente a Alone teniendo un atuendo diferente mientras sostenía el estuche donde guardaba su instrumento

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—Sé... sé que no dije que si, pero tampoco me negué, además que... quería pintar aquella parte del parque— dijo Alone un poco nervioso ante la presencia de la chica.

—Y no pudiste por culpa de Bourgeois— afirmó la chica y Alone sólo asintió—. Tendrá que ser otro día porque te pediré algo más.

—¿Que es lo que...?— sin dejarlo continuar Eléonore empezó a caminar a otra parte y el rubio no tuvo de otras más que seguirla.

—Mi padre era un compositor famoso y mi madre es psicóloga, con influencia de mi padre puedo ir a concierto de orquestas.

—¿En serio?

—Si, en uno de ellos me encontré a Bourgeois dormida ya que no le interesaba el arte, la desperté de mala gana y le dije que si seguía molestando al público con sus ronquidos mejor que se largara, se molesto hasta que seguridad la sacó aún siendo la hija del alcalde.

—E... entiendo.

Luego de unos pasos la chica se detuvo ante un banco para luego sentarse y sacar el violonchelo del estuche, fue que luego de acomodarselo en el hombro fue que Alone preparo su equipo de pintura aún confundido por lo que la chica quería.

—Si quieres ser un gran pintor necesitas inspiración necesaria, y yo te la daré— dijo la chica luego de darle los ajustes necesarios al instrumento.

—¿Que?— pregunto confundido Alone luego de dejar el lienzo en el caballete.

—Yo te la daré, ahora— dijo Eléonore sin chistar y empezó a tocar.

Alone sentía una calidez en su interior al escuchar la melodía que salía de aquel instrumento que no dudo en empezar a pintar en aquel lienzo dejándose llevar por la música, sin tener nada en mente aún, sólo contaba con la música para inspirarse.

Mientras eso pasaba Marinette estaba por empezar a hacer su tarea hasta que fue interrumpida por la melodía que se escuchaba desde el parque, misma que se escuchaba un poco más fuerte cuando Sabrina fue al balcón para ver, haciendo que la oji-azul se dejara llevar por la música.

Théodore caminaba hacia la panadería Dupain-Cheng para dejar un ramo de rosas blancas a Marinette hasta que se detuvo frente al parque al escuchar a la chica tocar su instrumento mientras Alone pintaba. Sin evitarlo el peli-negro sonrió al imaginarse así mismo bailando con la chica que ocupaba su corazón.

Todos escuchaban con una sonrisa aquella música que tocaba la joven en aquel lugar, todos menos Lila, quien veía desde la ventana cómo Alone convivía con aquella chica de pelo extravagante y ropa oscura, para luego bajar las persianas de su ventana y volver al castigo que la maestra le había dado.

Siempre se decía que la música es el alimento para el alma, y para muchos lo es en este día.

NocturneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora