Renjun había comenzado a sentir un malestar después de 30 minutos de acomodar los libros. Le había pedido a Jaemin que lo dejara acomodar los de esta biblioteca en específico, ya que aquí es donde Jeno viene a leer después de clases. Al pasar cerca de él, notó el olor de su perfume, era bastante fuerte. Tal vez a Jeno le gustaba mucho usar perfume, era un aroma fuerte, parecido a un champán de alta calidad. Pasó cerca de él varias veces, pero aún sin el coraje para poder hablarle.
Jeno había notado al chico y le parecía linda la forma en la que lo miraba a la distancia, pero su olor lo atraía bastante. Era suave, un olor a rosas con un pequeño toque de madera. Tenía entendido que el chico era beta, así que seguramente su perfume tenía feromonas. Después de unos cuantos minutos, se logró escuchar un golpe fuerte proveniente de la parte trasera de la biblioteca y Jeno no dudó en ir a ver si todo estaba bien. Al llegar, se encontró a Renjun tirado, sonrojado y jadeante. Se dio la vuelta al darse cuenta del peligro en el que se encontraba: un omega en celo con unas feromonas bastante fuertes. Pero Renjun fue más rápido y jaló de su pantalón, mirándolo con esa gran necesidad en los ojos. Jeno intentó safarse de su agarre, pero no lo logró.
— Jeno, ayúdame, por favor... — Renjun suplicó, alcanzando a tomar la mano del ajeno y lamiendo sus dedos de forma explícita. Jeno no sabía qué hacer, las feromonas de Renjun definitivamente eran fuertes, lo suficiente para hacerlo querer tomar al delgado omega ahí mismo.
— No puedo hacer esto... Ren... ¿tienes supresores en tu mochila? — Jeno intentó volver a safarse del agarre, pero esta vez Renjun se lanzó sobre él y terminó encima de su regazo, moviendo su trasero sobre él. Jeno aún dudaba, pero por la hora y el lugar tan escondido en el que estaban, terminó accediendo al deseo del delgado chico.
— Está bien... pero tiene que ser rápido. — Jeno comenzó a bajar sus pantalones, notando lo mojado que ya estaba el chico, y en un abrir y cerrar de ojos, ya se encontraba dentro de él. El chico cerró los ojos y emitió sonidos leves pero tiernos. Jeno movía su cadera ferozmente, alcanzando lugares que no sabía que podía alcanzar.Así siguieron, cambiaron de posición, y debía admitir que la adrenalina de estar haciendo esto en un lugar público era tan satisfactoria. Pero no tanto como el pequeño y redondo trasero del omega, que estaba absorbiendo su miembro como si fuera parte de él. Después de unos cuantos minutos, logró que Ren se corriera y sacó su miembro para venirse fuera y evitar algún accidente. Le ayudó a Ren a limpiarse y a limpiar sus lágrimas. Estaba sorprendido, no sabía que Renjun era un omega y mucho menos que fuera uno con feromonas tan potentes. Decidió ir por su celular para pedirle su número al chico, pero cuando regresó, Renjun ya se había ido.
Renjun corrió hasta la entrada y subió al primer taxi que pasó. Estaba nervioso, sus piernas temblaban y no sabía exactamente cómo había terminado así con Jeno y menos qué había pasado en su cuerpo. Cubrió sus ojos, llenos de pesadas lágrimas, y llegó a su casa, subiendo directamente a su habitación, evitando a su madre Nayeon, quien se notaba realmente preocupada por cómo había llegado su hijo a casa.
— Junnie, ¿todo bien? Abre la puerta, cariño. — Nayeon tocó la puerta suavemente y Renjun la abrió lentamente. Al verlo, Nayeon lo abrazó y comenzó a acariciar su cabello. — ¿Qué pasó, cariño? — Renjun la miró después de limpiar sus lágrimas. — Yo... recuerdas al chico que te mencioné... bueno... él y yo... tuvimos relaciones. Ni siquiera sé cómo pasó, sentí mi cuerpo raro y de repente ya estaba él ahí conmigo... mamá... ¿y si le di asco? — Nayeon estaba sorprendida, saber que su único hijo había perdido su virginidad era toda una sorpresa, pero no sintió molestia. Después de todo, era normal en la vida de cualquier ser humano. — Yo creo que él tuvo suerte de que un beta tan hermoso como tú le haya dado el privilegio de ser el primero — acarició su cabello, sintiendo cómo su pequeño comenzaba a tranquilizarse. — No le digas a tu mami Jeongyeon... no aún, porque ella querrá conocer a Jeno para matarlo. — Nayeon rió y Renjun le siguió, ya más tranquilo.
Ya no estaba seguro de ser un beta, no después de que su cuerpo reaccionara de esa forma y que todo se saliera de control en su mente. Pero tampoco estaba seguro de ser un omega. Ya había pasado mucho tiempo para que se manifestara como uno. Renjun solo se limitó a dejar de hacer preguntas en su mente, pero no podía. Si dejaba de hacerlas, no podría sacar de su mente al chico que acaba de tomar su virginidad sin problema alguno.
Burn it to the point you burn your hands
Crossing the unknown boundaries and spread it out to the end
It's quite beautiful on a free day
As long as it burns, I can't stop my desire
— LESSERAFIM BLUE FLAME
YOU ARE READING
Blue Flame
Teen FictionJaemin, Renjun y Jeno se ven envueltos en un enredado triángulo amoroso. Jaemin es el presidente del consejo estudiantil, Renjun es su mejor amigo, y Jeno es el chico malo de la escuela. A medida que los sentimientos florecen y las relaciones se com...