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Al día siguiente, Jennie y Lisa se dirigían a los comedores, Rosé se adelantó para ir al baño, pues en la celda no hay.

Se encontraban caminando por uno de esos enormes pasillos para poder llegar.

- ¿Y cuánto tiempo llevas aquí? - preguntó Jennie

- No mucho, ¿tú cuánto tiempo estarás aquí?

- Aún no lo sé, todavía no me dan mi sentencia

- ¿Puedo preguntarte algo? - habló Lisa mientras rascaba su nuca, Jennie asintió

-Si eres la hija de Namjoon... porque robaste nueve millones de dólares si no tenías la necesidad

Jennie suspiro - Bueno en realidad lo hice por diversión y necesidad a la vez; yo y mi papá no tenemos una buena relación, él ha engañado a mi mamá con muchas mujeres, jamás estuvo con nosotras. A tratado de arreglar las cosas conmigo para ser un mejor padre, pero ya de qué sirve si toda su vida fue un padre ausente; así que con la parte que me iba a corresponder me iba a ir del país, pensaba en irme a Francia ya que ahí tengo unos amigos y me iban a recibir en su casa, además también ayude a robar ese dinero a mis amigos por ellos si lo necesitaban - Jennie agachó la cabeza- ellos ya... - Jennie negó con la cabeza - ni siquiera se porque te cuento mi vida si apenas te conozco

- Bueno pues algo en ti hizo que confiaras en mí... además si no te sientes cómoda hablar sobre esto lo entiendo y perdón por preguntar, además no te preocupes yo no pienso contarle a nadie - Jennie solo le sonrió

Jennie ni siquiera sabía el porqué le contó casi toda su vida a Lisa, pero algo en ella hizo que sintiera una confianza enorme en Lisa.

- ¿Y tú, qué hay de tu vida?

- Bueno... mi vida siempre ha sido un desastre, mi papá es un hombre alcohólico y casi nunca estaba en casa y cuando llegaba a casa siempre estaba borracho, nos golpeaba a mi y a mi mamá, mi mamá me encerraba en mi habitación para que no me fuera hacer nada. Yo solo escuchaba como este golpeaba a mi mamá, siempre trataba de cubrirme con la almohada para no escuchar nada pero era inevitable no oír a mi mamá llorando y gritando - Jennie se acercó a Lisa para darle un abrazo -. A los 18 años decidí irme de Tailandia para mudarme a Corea le prometí a mi mamá que trabajaría duro para mandarle dinero y que pudiera separarse de mi papá, pero no conseguí trabajo, un día por la noche en una estación de tren conocí a un chico su nombre Seunghoon, el ese día me vio muy triste pues yo venía de una entrevista de trabajo y como era de esperarse no me aceptaron. Él se acercó a mí y después de una charla él me ofreció trabajo vendiendo drogas cosa que me negué, hasta llegó a insinuar si no quería trabajar de prostituta, pero después de unos días acepté - Jennie miró a Lisa sorprendida y Lisa habló enseguida - obvio no acepte ser prostituta pero sí a vender drogas pues no tenía que comer y quería enviarle dinero a mi mamá, ya después de ahí me hice más unida a Seunghoon y nos hicimos amigos y junto con él comencé a robar pues quería más dinero para enviarle a mi mamá y pues después de unos años ahora estoy aquí

- Lo siento mucho, enserio has llevado una vida muy difícil y... ¿tu mamá cómo se encuentra?

- Tengo tiempo que no hablo con ella, con el dinero que le enviaba pudo rentar una departamento solo para ella; la última vez que hablamos por teléfono me dijo que consiguió un trabajo

- ¿Tu mamá sabe que estás aquí? - Lisa negó - y porque no le has dicho

- Intente comunicarme con ella pero fue imposible, no se nada de ella desde hace semanas y me preocupa, además de quisiera hablar con mi mamá pues tengo desde que me vine aquí a Corea hace ya tres años que no la veo y la extraño

Reclusas | Jenchaelisa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora