<«Reto»>

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Un reto:

[ Escuela preparatoria de South park,un día antes de la apuesta. ]

El joven Kenneth McCormick parecía vagar sin rumbo alguno entre los pasillos solitarios de la preparatoria. El frío no era un problema y,sin embargo,podía verse tembloroso mientras murmuraba frases que sólo él entendía.

No eran las calificaciones,los estudiantes,o el clima mismo quién le traía un sentir de confusión.

No.

"Si tan sólo fuera capaz de tener más autocontrol sobre esta boca que habla sin cesar,seguro ya no estaría enrrollado en un reto ridículo que va más allá de lo acostumbrado" Pensaba para sí,a la vez que se abría paso entre la maleza de su acostumbrado atajo.

La situación se presentó durante el tiempo de estudio en la solitaria biblioteca. Dos estudiantes de último grado reían en alto mientras cuchicheaban sabrá Dios que temas.
No había duda de que ya era costumbre.

Barbara Stevens y Kenneth McCormick no eran del tipo que aguardaban para la hora de los descansos a los chismes más jugosos. Para ellos,siempre había tiempo de sobra en cualquier momento o lugar.

No importaba ni siquiera si se trataba de un lugar público donde no hablar en alto estaba estrictamente prohibido,mucho menos tomar en cuenta que no eran exactamente temas de "niños".

Bah~ ¿Acaso a alguien le interesaba?

La anciana pecosa de rulos casi plateados ni siquiera parecía interesada en reprenderlos,especialmente cuando llegaba la parte más interesante de su novela de la tarde.

Salía antes de su turno acordado y encargaba ambos jóvenes a guardar su turno mientras estuvieran allí.

¿Irresponsabilidad? No era nada nuevo.

¿Poco profesionalismo? La verdad,no podía importarles menos.

Ellos simplemente fingían oírla con una sonrisa y luego volvían a lo suyo una vez desaparecía del lugar.
Una vez más,aquella zona era toda suya.

Chismes,vivencias,experiencias cotidianas y un sin fin de consejos en torno a sus placeres secretos (o no tan secretos) eran apenas una ligera probadita de todo lo que este par compartía. Eran amigos sin duda,una amistad poco común e incluso,llámese "extraña" en vista del resto.
Para ellos eso estaba bien,en especial cuando podían jugar al verdad o reto mientras fingían estudiar sobre la historia universal.

Se hallaban ocultos en un pequeño escondite improvisado,el cual consistía en sentarse tras alguna de las repisas más escondidas de la biblioteca,mientras se sentaban en el suelo o sobre algún libro cualquiera. Por lo menos el rubio hacia esto,la chica siempre se negó a sentarse en un lugar incómodo,de modo que siempre llevaba consigo un diminuto cojín donde descansar sus asentaderas.

A vista del mundo podrían ser unas zorras...
Pero también,por su parte,poseían estilo y una aura de gracia por naturaleza. Incluso en dicha posición,vergonzosa o poco estilosa,eran sumamente atractivos.

La brillante botella verde transparente brillaba a través de los rayos dorados que la ventana ofrecía,colándose entre el vacío de cada repisa en fila. Giraba y giraba velozmente,reduciendo la velocidad hasta hasta parar frente a frente entre ambos muchachos.

Era el turno de Bebe de elegir algo para Kenneth.

Se miraron durante algunos segundos mientras la rubia pensaba detenidamente. Fue entonces que la palabra "Reto" salió de los labios del rubio de parca naranja. La chica de grandes atributos sonrió con una leve pizca de malicia.

Era una oportunidad muy conveniente ¿No? Ken ya la debía algunas desde hacía varios meses,y se encargaría de hacer las cosas más justas. Conocía muy bien los puntos débiles de ese golfito rubio tan sexy al que llamaba amigo y colega:

-Anda Ken~ Ya que te la das tanto de casanova...- Canturreó la alta rubia de bella cabellera rizada,haciendo girar el bolígrafo en su mano mientras se acomodaba un par de mechones- Te reto a hacer que Stan salga contigo en un cita suuupeer gay,al menos un día antes del inicio de las vacaciones luego de la graduación.

-¡Pfff! Eso es pan comido- El rubio fingía desinterés mientras hojeaba un libro al azar,empezando desde la página final y sujetándolo al revés.

-¿Sí? Entonces hay que ponerte a prueba. No olvidaré la última vez que te burlaste de mí y no pagaste el acuerdo de nuestro último reto,peeero...- Nuevamente,esa sonrisita que sólo solía usar cuando buscaba convencer,casi como la de una niña mimada rogando por nuevos zapatos- Seré buena contigo,te daré otra oportunidad para redimirte y ser buen amigo. También puede que,de paso,me ayudes a sacar esa piedrita molesta de mi camino.

La rubia miraba con interés al chico de chamarra naranja,el cual le negó el ofrecimiento rápidamente.

-Nah,es algo estúpido,no creo que lo valga. Además,Stan es mi amigo,y no parece del tipo "no hetero"- Volvió la mirada hacia la chica frente a él,que imitaba una especie de puchero en forma de burla- Al menos,no tanto...

La joven de rulos dorados lucía algo aludida por la respuesta del contrario,no tardó mucho hasta abalanzarse sobre el cúmulo de cuadernos,propiciando al chico un golpe directo en la cabeza. Todo esto,con la ayuda de una vieja enciclopedia de pasta dura que tenía a la mano.

-¡Anda! No seas un cobarde,a una dama no se le ve la cara,embustero y mentiroso caza putas.- Escupió la rubia mientras veía al chico tallar su cabeza con un gesto adolorido,seguro eso le dejaría al menos un pequeño chichón,y estaba orgullosa de ello.

-Gracias por tus bellos cumplidos,me haces sonrojar- Respondió el rubio mientras parpadeaba coquetamente- Pero,como ya dije,eso no está en discusión. Ni por todo el dinero del mundo sería capaz de enrrollarme así con un amigo ¡Y peor! Un amigo así de cercano. Bebe,eso sería caer muy bajo,y aunque lo dudes,también tengo valores ¿Sabes?- El rubio hablaba con exagerado dramatismo,provocando que la rubia rodara los ojos ya bastante irritada por su fingido intento de "hacerse el difícil".

Lo conocía bastante bien,sabía lo suficiente para identificar que a ese muchacho poco le importaba si era amigo,vecino o desconocido,la regla principal era "pasarla divertido". Las reglas eran iguales para ambos,pues los dos compartían el mismo pasatiempo: "La seducción y la promiscuidad" como solían llamarlo la gente de por allí.

También,poseía conocimiento sobre un secreto muy particular...
Sabía bien el interés genuino que este tenía por el azabache vomitón. Llevaba conservando el secreto desde hacía año y medio (cuando lo descubrió) gracias al clásico juego de "verdad y mentira".

No estaba dispuesta a ceder ante las negativas del joven rubio,quién bostezaba de forma descuidada con fingida inocencia.

Ya harta del teatrito ridículo,dio una nueva oferta:

-Te ofrezco 500 dólares y...-Agregó una corta pausa para añadir misterio -una caja de condones de ultra sensibilidad.

Rápidamente,el rubio se levantó de su asiento improvisado y extendió su mano a la rubia.

-Tienes mi apoyo tetona. Más te vale pagar honestamente.

Aquello fue lo último que dijo,una vez estrecharon sus manos,dieron por hecho el acuerdo. La chica no pudo evitar sonreír victoriosa ante la respuesta,para su suerte,un nuevo peón aparecía ayudándola en su objetivo.

4 Love Relation-ship [Stan Gang]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora