Capítulo cuarenta y cuatro pt.2

109K 9.4K 8.6K
                                    

44 | REUNIÓN. | PARTE 2

♪Loving you will still take shots at me, found loving you was sunshine, but then it poured, and i lost so much more than my senses, 'cause loving you had consequences♪
(Amarte todavía me dará golpes, descubrí que amarte fue como la luz de sol, pero luego se derramó y perdí mucho más que solo mis sentidos. Porque amarte tuvo consecuencias) -Consequences. Camila Cabello. 

JUDITH

—Ya no puedo.

La doctora frente a mí sonríe suavemente. —¿Cuántas veces has pensado eso en tu vida?

—Muchas.

—Y te equivocaste, si pudiste, y debes estar orgullosa de ello.

—Estoy muy cansada —digo con honestidad—, ya no quiera que duela.

—Sé que el dolor da miedo, pero es importante, porque tratar de evitarlo o reprimirlo, solo implica que la herida quede abierta. ¿Y sabes qué pasa? Que pueden infectarse y ponerse peor. Tratarla, inevitablemente va a doler, pero sanarás más rápido.

—Pero yo estaba bien. Esto solo es temporal, pronto volveré a... —Me detengo porque ni siquiera estoy segura de lo que estoy diciendo. ¿Volveré a qué?

Ya no quiero volver, ni avanzar, ni absolutamente nada.

—Judith tengo un máster en psicodiagnóstico. He trabajado en esto, por años y sé que hay cosas que estás ocultando, pero está bien, porque lo crucial es que vayamos a tu tiempo, sin embargo, necesito que sepas que incluso si durarás años aquí, no sanarás si no quieres hablar.

Suelto un suspiro hondo y recargo mi cabeza contra el asiento. No digo nada más, espero que tal como las otras veces se canse y se vaya.

—Ya hablé mucho —digo tajante.

Esta ha sido nuestra rutina diaria. Viene, le cuento algo de mi vida, anota mil cosas en su libreta y se va. Pero esta vez no lo hace. Continúa exactamente en el mismo sitio.

Toma su libreta y comienza a regresar las hojas, para ir a sus apuntes de días anteriores.

—Sabes... todo lo que me dijiste de uno de tus exnovios, es el ejemplo perfecto de que los traumas a veces se reflejan a través del comportamiento.

—No tengo un trauma —susurro sin ganas, desviando nuevamente la mirada—, estaba bien. Antes de todo... eso. Antes de todos ellos. No me sentía triste ni...

—No Jude, no estabas bien, estuviste en una relación con un hombre abusivo, y por todo lo que me contaste hubo muchas señales y nunca las viste, quizás al inicio no había violencia física, pero si psicológica y también sexual, porque no importaba que en ese entonces fuera tu novio, eso no le otorgaba un derecho sobre tu cuerpo. Tu cuerpo es exclusivamente tuyo. Si tú no querías tener relaciones con él, no tenías que hacerlo. E incluso si tu cediste después y dijiste "si", sigue siendo un abuso, porque hubo manipulación de por medio.

»Decir "No", es suficiente. Se tiene que respetar y no necesitar tener un porqué o una excusa. Simplemente "no" y ya. No tienes que dar más explicaciones. No querer, es suficiente motivo, y no necesitas buscar otro.

»Ahora, te contaré algo... Cuando una persona vivió o vive agresiones a un nivel muy grande, vuelve esas agresiones su límite, ¿Sabes qué pasa cuando tu límite está exageradamente por encima de donde debería estar?

—No —respondo sintiéndome sin voz.

—Pues, sí después sufre otra agresión a menor escala, pero igual de importante, la minimiza por completo, porque no llega al límite de lo que ya vivió, y por eso incluso a veces algunas personas que pasan por situaciones de abuso responden a ellas justificándolas o incluso sintiéndose con alivio, porque "no fue para tanto". Exactamente como tú.

Perfecto Caos ✔ (En librerías)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora