Infiltrado 🐝🐺 [JOOKYUN]✔✔

Capítulo 5

Había estado nervioso la primera vez que pisó el ala, pero volver del hospital fue diez veces peor. Su estómago se estremecía, y el dolor en su costado latía con cada paso que daba. El dolor irradiaba en su pecho, haciéndole difícil respirar. Era una respuesta de lucha o huida al peligro, y su cuerpo quería que girara y saliera corriendo, pero él fue en contra de la urgencia y caminó de regreso en el ala.

Uno de ellos lo había apuñalado, pero no sabía quién. Las cabezas se levantaron de sus comidas, y un pesado silencio comenzó a sofocar la habitación. Yonggoo le lanzó un beso, Jooheon dirigió una sonrisa en su dirección, y luego Changkyun miró a Capitán, y el burbujeo en su estómago se detuvo.

Le dedicó a Changkyun una cálida sonrisa y luego hizo un círculo con el dedo delante de Kihyun para que se diera la vuelta. Kihyun se volvió y abrió mucho los ojos. Echó la silla hacia atrás, dio tres grandes zancadas por la habitación y luego rodeó a Changkyun con los brazos en un rápido abrazo.

—Me tenías preocupado. Te fuiste por siglos.

—Al menos alguien me extrañó.

—Y Capitán, preguntaba por ti todos los días.

Changkyun miró su mesa e hizo un gesto a Hyunwoo. —¿Él se sienta con nosotros ahora?

—Sí, él es bueno, lo prometo.

Changkyun se agarró el costado mientras caminaba hacia la mesa y luego se sentó al lado de Capitán. Le ofreció la mano y Changkyun la tomó de inmediato.

—Me alegro de que estés de vuelta.

—Gracias, aunque la comida del hospital sabe mejor que esta bazofia.

Capitán y Kihyun resoplaron, pero Hyunwoo inclinó la cabeza, frunció el ceño y luego continuó recogiendo sus huevos.

—¿Algo cambió? —preguntó Changkyun.

Kihyun parecía complacido consigo mismo. —Capitán me ha estado enseñando a combatir con cuchillos en el gimnasio.

—Cómo desarmar a un atacante con un cuchillo —corrigió Capitán.

—¿Qué haces cuando vienen detrás de ti en la oscuridad? —murmuró Changkyun.

—Para empezar, enciende la luz.

—La bombilla estaba rota.

—Y en el momento en que te diste cuenta, debiste haberte ido de allí.

—Sí, bueno, he aprendido de mi error —murmuró Changkyun.

Capitán tiró de la parte inferior de la camiseta de Changkyun. —Veamos entonces.

Changkyun se levantó la camiseta y mostró el parche pegado a su costado. Kihyun se inclinó sobre la mesa para ver bien y luego volvió a sentarse.

—¿Todavía te duele? —preguntó Kihyun.

—Me duele, siento el jalón cuando giro demasiado rápido. —Changkyun golpeó su hombro contra el del Capitán—. Gracias por...

—No —interrumpió Capitán—, si no hubiera tardado tanto en volver al ala, esto no habría sucedido.

—No puedes cuidarnos todo el tiempo.

—Pruébame.

Changkyun negó con la cabeza. —¿Adónde fuiste ese día?

—Fui a hablar con el gobernador. Me ha dado una celda propia en el segundo piso, al lado de la tuya en realidad. No voy a aterrorizar más a mi compañero de celda, y a regañadientes accedí a ver a un psiquiatra.