____ (apellido)
Iba a acercarme a la carpa y para mi sorpresa no estaba Aidan.
Mi corazón latía fuerte ya que estaba algo nerviosa y en eso alguien me habla y doy un pequeño salto.
—Señorita ____ —hablo otra voz que no conocía.
Voltee y era un coordinador del campamento.
—Necesitamos que me acompañe con los demás. Ha ocurrido algo.
Asentí y lo seguí, seguro era un comunicado ya que quedaban 2 días antes de volver.
Cerca a la cafetería estaban todos reunidos y se veían preocupados. Busque a Aidan con la mirada y no lo encontré.
Al voltearme el estaba justo atrás de mí. Iba a hablarme pero entonces los encargados llamaron nuestra atención.
—Jóvenes sé que es tarde, pero antes de que se enteren por otras personas se los diré. Un estudiantes se ha perdido en el bosque. Y por lo que tenemos entendido hay una cueva muy profunda allá y tenemos una sospecha de que este allí. Ya hemos ido a buscar pero sin éxito alguno, así que necesitamos medidas más extremas.No hemos informado a la escuela aún porque queremos darle una solución entre nosotros. Necesitaremos ayuda en su búsqueda si alguien quisiera apoyarnos puede seguirnos.
Todos estaban hablando entre ellos y al final aceptaron la mayoría. Yo no pensaba ir ya que puede ser peligroso, pero al ver que todos aceptaron no me gustaría quedarme sola en el campamento.
Nos dieron linternas y silbatos por si pasaba algo. Nos dijeron que no vayamos muy lejos porque era obvio que no querían más estudiantes perdidos
Me tocaría ir con un grupo de chicas a buscar así que nos dirigimos hacia el bosque.
—Hola, me hablo una chica. Estamos en el mismo grupo. Me llamo Merry, un gusto.
—Ah, hola, soy ___.
—¿No es esto emocionante? Nos internaremos a un bosque lleno de aventuras. Quien sabe que encontraremos puede ser una piedra mágica, una cueva encantada, un monstruo, o un gato mágico.
—¿Un gato magico? —reí
—Sí, amo los gatos —rió conmigo.
Mire a Aidan e iba pensativo con un grupo de estudiantes que lo acompañaban.
—¿Es tu novio? —me preguntó
—¿Qué? No, es mi amigo. Solo que tengo problemas con él ahora y no que hacer. Y ahora solo lo evito.
—Debes de dejar el miedo y enfrentarlo, no lo podrás evitar para siempre —me miro.
—Lo sé, pero no sé ni que decirle.
—A ver cuentamelo todo —sonrió y decidí contarle un poco de nosotros.
Caminamos mientras hablábamos y ella me escuchaba. Ya casi llegábamos al bosque y seria momento en que cada grupo vaya por su lado.
—Sigue a tu corazón, creo de verdad lo quieres —dijo al terminar de contarle.
Llegamos al bosque y nos dieron puntos específicos para buscar.
Entendimos nuestras linternas y buscamos. El chico se llamaba Jhon.
Gritamos su nombre una y otra vez, pero sin respuesta alguna.
Sin darme cuenta me separe de mi grupo.
—¡Merry! —grite.
Escuche una rama romperse al ser pisada por algo.
Empecé a pensar si en verdad había un monstruo o un gato mágico. Aunque prefiero más al gato que al monstruo.
Me asusté y empecé a caminar hacia atrás para alejarme.
De repente choque con la espalda de alguien voltee y grite y la otra persona también gritó.
—¡Por favor no me comas!
—¿___? —hablo una voz masculina muy conocida.
—¡Aidan! —dije y sin controlarme lo abracé.
Él correspondió mi abrazo. Luego nos separamos
—Estaba preocupado por ti, me encontré a tu amiga diciendo tu nombre y gracias al cielo te encontré.
—Me asustaste, pensé que eras un gato mágico.
—¿Un gato que?
—Olvidalo reí —lo volví a abrazar.
Al separarnos ante nosotros se dejo ver una cueva grande y muy profunda. Donde se escuchaban ruidos adentro.
Aidan me tomó de la mano con sorpresa y nos acercamos un poco hacia la cueva.
—¿Jhon? —dijo él.
—Sii, ayúdame por favor, no puedo salir de aquí. Estoy atorado en un arbusto.
Nos miramos y llamamos a los demás pero al parecer nosotros ahora éramos los perdidos.
—Demonios, no puede ser —dije al no encontrar a nadie a nuestros alrededores.
—___, entrare, este chico necesita ayuda. Luego saldremos todos juntos.
Asentí y él me dio una última mirada.
Espere y espere, calcule que una hora. La voz del chico no se oía muy lejos para que se tardara tanto.
Lo pensé y decidí entrar. Encendí mi linterna y vi el arbusto, no había nadie allí. Pero habían hojas en el suelo que indicaban que el chico ya había salido.
—¿Aidan? —grite y solo oí mi eco.
—¡¡____!! Aquí, nos hemos perdió —escuche su voz por algún lado de la cueva.
—¡Sigue hablando! Creo saber por donde estás.
Empecé a correr
—Okey, ammm ____. ¿Te puedo hacer una pregunta?
—Ajá, solo no dejes de hablar.
—¿Te sentiste incómoda por lo de aquella noche? Es decir, o bueno... —se quedó callado —. Arg en serio no se que más decirte.
—Creo que ya tendremos tiempo de hablar de eso Gallagher.
—Claro, sí me encuentras.
—¿Podrías ser más positivo? —dije agitada
—Ok, no te enojes ,¿Sabes algo?
—Que cosa —dije mientras corría.
—Te quiero.
En ese momento mi corazón pálpito más y los encontré.
—Ay al fin —dije obviando lo dicho anteriormente.
Estaba muy agitada.
—¡___! Corrio a abrazarme.
—La salida está por acá —dije correspondiendo el abrazo.
Nos separamos y ayudamos al chico a sostenerse para comibar ya que el arbusto donde había estado tenía espinas y estaba algo lastimado.
Nos reunimos con los demás y nos felicitaron por haberlo encontrado.
—Gracias ___. De no haber sido por ti seguiríamos perdidos.
Sonreí y nos despedimos del chico que también muy agradecido fue a que curaran sus heridas.
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El chico de los ojos tristes (Aidan Gallagher) [PAUSADA]
RomanceAidan Gallagher el chico al que todos juzgan y molestan por tener el muy conocido virus llamado VIH si ese virus que se transmite por relaciones sexuales o entre otros medios de contagio, y se lo que estarán pensando ahora pero esta es una historia...