Embrujadas: Nuevo Orden

Del miedo a la eternidad

Madison y Marina se encuentran en una tienda de brujería porque les va la marcha y el puterio

Madison: Venga date prisa, quiero irme cuánto antes.

Marina: Voy a necesitar suerte y necesito un amuleto, deja de quejarte.

Una pelirroja aparece para darles prisa ya que quiere cerrar la tienda

Wendy: Porfavor, ¿podéis iros? Quiero cerrar antes de las doce.

Madison: Claro, un segundo, date prisa.

Marina: ¿Te gusta este?

Madison: Si, perfecto.

Marina: Por esto es por lo que prefiero ir de compras con Marta o Martina.

Madison: Ya pues te aguantas.

Wendy: ¿Lo pongo en la cuenta de Marta?

Marina: No, esta vez lo pago yo.

Madison: ¿Y eso?

Marina: El amuleto es para la entrevista de mañana.

Madison: Ya, ¿y quieres qué pague yo?

Marina: Te lo devolveré no te preocupes.

Madison: Más te vale.

Wendy: ¿Efectivo o tarjeta?

Madison: Tarjeta.

Wendy: 25,50.

Madison: Gracias.

Suena un reloj

Wendy: ¿Habéis oído ha dado trece campanadas?

Marina: Pues no, no lo hemos oído.

Wendy: ¿Sabéis? en los viernes 13 es cuando hay más energía cósmica, quiero aprovecharlo, ya sabéis, por ser bruja.

Marina y Madison se miran entre sí

Marina: (susurrando) ¿cómo sabe que somos brujas?

Madison: (Susurrando) no creo que lo sepa.

Wendy: ¿Queréis un folleto?

Marina: Si, gracias.

Marina y Madison salen de la tienda, Wendy se dispone a cerrar, mientras de las tinieblas de la noche putona sale un ser más viejo que Marta porque ella es Tutankamón pero en mujer, entonces el viejo esmirriado llama a la puerta

Wendy: Lo siento, estoy cerrando.

El viejo sigue insistiendo

Wendy: He dicho que está cerrado

El ser más feo que has visto en tu vida atraviesa la puerta porque el poder del puterio lo hizo libre

Barbas: No para mí.

Wendy: ¿Qué eres tú?

Wendy agarra un amuleto para protegerse, algo que no funciona ya que es bastante tonta

Barbas: (le pasa la mano por delante de la cara) así que tu miedo es ser enterrada viva, por un terremoto, interesante.

De pronto la tienda se sacude y Wendy grita, pero a la tía le da un tremendo infarto que se fue al otro barrio en cero coma y se quedó con el pelo blanco, mientras Barbas se descojona porque si es

{A la mañana siguiente}

Martina está viendo un collar que le han dado sus hermanas y se lo da a Marta, hasta que Marina aparece con un traje gris para su entrevista