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Bien, bien, una cosa estaba clara en este día, todo estaba muy extraño, y cuando digo muy extraño lo digo muy en serio, tan en serio como que no tengo padres.

JAJAJAJAJ Esa estuvo buena.

Desde que llegó a la cafetería el chico que me estaba siguiendo antes, no ha dejado de verme, y es tan incómodo porque su mirada sobre mi se siente muy pesada.

Bien, bien. Lein, cálmate, talvez solo le pareces linda.

O te quiere secuestrar....

O talvez llame su atención.

para luego asesinarte y.....

¿O que tal y me conozca de alguna parte?

robarte los órganos.

A veces quisiera tener otra conciencia, una más pacífica que no piense en tantas cosas raras.

Solo soy realista.

Me dirigí al baño para tranquilizar mis nervios un poco. Respire hondo y cerré mis ojos, mi cabeza dolía de tantas cosas, mis ojos se sentían pesados, tenía sueño.

Salí del baño por los gritos de Sam.

- ¿Qué carajos te pasa hoy? Ni siquiera hiciste lo que te pedí....- no sé en que momento deje de escucharlo, su voz es tan irritante, demonios necesito un descanso.

Estaba tan pérdida en mis pensamientos que ni siquiera recordaba que estaba el pesado de Sam hablandome hasta que me grito, a veces parece una señora de 50 años con menopausia.

-¿¡SI ME ESTÁS ESCUCHANDO, LEIN?!- Grito en mi rostro como si estuviera a 5 metros de él.

-No Sam. No te estoy escuchando, joder ¿qué tanto quieres de mí? Tu también puedes hacer un maldito café, y oh, no, mira la hora, mi horario de trabajo acaba de terminar así que ya deja de joder.- eso ultimo lo grité en un su rostro haciendo que cerrará sus ojos.

Salí de la cafetería con mis auriculares puestos. Caminaba tranquilamente mientras se reproducía Flawess - The Neighborhood ¿ya mencione que es mi banda favorita? Porque eh, es mi banda favorita y esa canción la amo.

Mire el cielo oscuro, la luna estaba oculta entre la espesa neblina que adornaba el cielo y ocultaba las estrellas, aún así, el cielo se veía hermoso como siempre.

Llegué al conjunto de apartamentos y subí en el ascensor. Llegué al piso dónde está mi apartamento, saque las llaves de mi bolsillo, estaba a punto de abrir la puerta hasta que una voz detrás de mi me saludo.

-Lein, holaaaa- saludo Nick alargando la última letra de la palabra.- ¿Por qué llegaste tan tarde? - pregunto.

¿Por qué pregunta?

Serás idiota.

-Salgo algo tarde de mi trabajo.- respondí.

-Oh, ¿tu trabajas?- pregunto algo ¿sorprendido? ¿Por qué lo estaba?

-Si ¿por qué te sorprende?-pregunté.

-Bueno es que yo pensé que eras hija de unas personas multimillonarias que te costeaban la vida completa o talvez que eras una modelo famosa o algo así.- respondió y yo me quedé en silencio por unos dos minutos.

- ¿Por qué demonios pensaste eso? ¿Con qué argumentos?- pregunte.

-Bueno, para empezar este lugar no es nada barato, el instituto es privado, y ¡tienes un gato!-¿pero este chico es idiota o le falta algo en el cerebro?

Escritos A La LunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora