¿Jugamos? ∆

•08•

Habían pasado aproximadamente 20 minutos, y el menor ya se estaba desesperando, ¿Por qué no llegaba?.

Hasta que el timbre de su puerta sonó.

El menor corrió hasta allí y abrió su puerta, dejando ver a un delgado cuerpo, alto, con una vestimenta sencilla, se notaba preocupado

—Hola, Tae—saluda el menor con una sonrisa inocente

—Hola Jiminnie.. Emm, ¿Para que me dijiste que viniera?—Pregunto

—Bueno, primero pasa—Haciendose a un lado para que el castaño pasará, pero el castaño se quedó parado mirando en un punto fijo—¿Taehyung?—Lo mira curioso

—¿Eh?... Oh, ok...—Taehyung paso con nerviosismo

Ya el castaño dentro, el menor cerró su puerta y fue hacia el castaño que estaba sentado en el sofá de la sala, Jimin se sentó junto a Taehyung

—Bueno...—hablo primero Jimin—¿Jugamos?—Sonrie

—¿Eh? ¿Pero que vamos a jugar?—pregunta el castaño dudoso

—Si no quieres jugar a las escondidas....—dijo el rubio—Jugaremos a otro juego, ¿te parece?—Pregunto

El Castaño lo miro confundido, ¿Por qué querría jugar con el a estas horas?... Jimin nunca le gustó a jugar nada a esta hora y mucho menos llamarlo a media noche. Jimin se estaba comportando extraño, su piel se había puesto pálida y sus pupilas muy grandes, era raro. Taehyung pareció pensarlo un poco más, hasta que acepto jugar a algo, debe ser que Jimin quiere hacer alguna pijamada y no le dijo nada a él por qué era una sorpresa, el rubio siempre le hacía sorpresas y ya el estaba acostumbrado así que curioso y algo confundido acepto.

—Ok—Acepto el Castaño—¿A qué vamos a jugar, Jims?—Pregunto el castaño confiado

—Bueno, Iré a buscarla—El rubio emocionado salió casi corriendo hacia su habitación.

Taehyung se sintió mucho más confundido "¿Buscarla?"

El castaño espero unos minutos hasta que noto a Jimin bajar las escaleras rápidamente con algo detrás suyo, como ocultando algo. El Castaño sonríe levemente por qué pensó que era algo que le iba a regalar el rubio, pero no fue así...

Cuando el rubio llego a su lado, saco lo que había detras suyo muy emocionado, y cuando puso el objeto en el punto de vista de Taehyung.... Este no lo podía creer....

La cara de Taehyung se puso blanca al ver esa cosa frente suyo, ¿Cómo es que el la tenía si el lo había metido en su armario? Su corazón latio con fuerza, tenía miedo, ¿y si Jimin era consciente de que había un demonio, por qué quería jugar con eso? ¿Acaso enloqueció?

—Jimin...—Hablo Taehyung—C-con eso no se puede jugar... ¿Lo sabes verdad? ¿Sabes lo que pasó la última vez.?—Pregunto rapidamente—¿¡ESTAS CONSCIENTE DE ESO?!—Grito desesperado

Jimin.... o.... Jungkook..... Enfureció.

Taehyung levanto su mirada hacia Jimin.

Mala idea.

Este tenía sus ojos completamentes negros,  sus venas resaltaban de un color negro intenso, sus labios no tenían color, y su piel se puso más pálida de lo normal, Taehyung al ver a Jimin así, quiso huir, pedir ayuda, gritar para que alguien lo escuchará, no sabía que era lo que pasaba, pero si era una broma pesada de Jimin lo mataría. Jimin lo miraba fijamente y Taehyung quiso levantarse y decirle a Jimin que ya era tarde, o decirle otra excusa para no jugar con esa cosa.

Pero Taehyung palideció cuando sintió un agarre muy fuerte en su brazo. Demaciado fuerte y brusco, como para que Jimin tuviera toda esa fuerza. Y hay fue en dónde el castaño cayó en la realidad cuando escucho su voz

Gruesa, seca, y fría... Jimin tenía a ese parásito dentro de él...

—Sientate.—Ordeno el demonio ya apoderándose del rubio.

Taehyung trago grueso y se sentó...

—Por favor...—susurro el castaño—Por favor, no me hagas nada...—suplico, casi al borde del llanto

—Dije que no te mataría..—Dijo Jungkook—Pero no dije que te matarían.—Con una voz tosca y seca, hizo que el castaño temblará.

El castaño tenía un temblor por todo su cuerpo, sus ojos húmedos y rojos, mordiendo su labio inferior hasta sangrar del miedo, sintiendo el sabor metálico del líquido.

—Te dije que iba a mandar a una persona que conocieras a qué te matará... ¿Verdad?—Pregunto divertido

El castaño no quiso mirarle y solo asintió lentamente, quiso levantarse otra vez y salir corriendo rápido, pero sentía un peso encima y no lo dejaba moverse

—¿Jugamos?—Pregunto emocionado como niño chiquito al castaño.

Y Taehyung no hizo más que asentir...