Cuando Se Terminó [2] |Iguro Obanai|

Capitulo 3

20 años.

–Presente.

Pov ______:

Me levante muy temprano, era feriado, lo que significaba que hoy no tenía clases y tenía que aprovechar para hacer cosas productivas.

Iguro seguía dormido, ayer había sido una larga noche para el, estaba realmente cansado y aún no procesaba lo que había sucedido.

Me levanté e hice el desayuno, no fue la gran cosa, tampoco es como si tuviera ganas, generalmente nunca desayunaba o comía en casa, lo hacía en la calle ya que no sabía cocinar, pero en esta ocasión Iguro estaba y salir a la calle con el no era opción.

Lleve el desayuno a la mesa y me senté, ya eran las diez de la mañana y Iguro aún no se levantaba.

Pasaron unos minutos y comencé a desayunar sola, cuando entonces escuché la puerta de la habitación abrirse y ví a un Iguro con los ojos hinchados por llorar demasiado, saliendo de la habitación a paso lento.

Se sentó en la mesa frotando sus ojos.

–buenos días — hable dirigiendo mi palabra hacia el, quien solo guardo silencio — desayuna porfavor.

Iguro comenzó a desayunar en silencio, se veía decaído, me fijé más en el, estaba con una pijama puesta, su polo era de manga corta y podía observar sus brazos, en estos años no me había dado cuenta, pero estaba más delgado ¿Pudo haber Sido el estrés?

–perdon si cause una molestia al quedarme otra vez — hablo Iguro rompiendo el silencio entre los dos, a lo cual lo mire extrañada.

–no fue ninguna molestia Iguro.

–yo...no tengo donde quedarme ahora y dudo mucho que Mitsuri me acepte ahí de nuevo, buscaré un departamento pronto, mientras tanto, ¿Podría quedarme aquí?

Guarde silencio un poco menos de tres segundos, ¿Estar con Iguro bajo el mismo techo unos días?

–perdon si es algo imprudente de mi parte— Iguro intento hablar pero enseguida lo interrumpí.

–no, está bien, no te preocupes, puedes quedarte el tiempo que veas necesario hasta encontrar un hogar. — respondí, aunque seguía dudosa.

Mi mejor amigo y la persona que me rompió el corazón a los 17 años, ¿Viviría bajo mi mismo techo un tiempo? No lo podía asimilar bien, todo era confuso, de un día para otro habían pasado demasiadas cosas.

–yo...te ayudaré con los gastos. — respondió Iguro agradeciendo que le dejara quedarse.

Y justo cuando estuve a punto de abrir mi boca y dar una opinión tal vez indeseada, mi teléfono vibró, me levanté de la mesa para ir a contestar.

–un momento. — hable y camine hacia mi habitación, era mi hermano Akemi.

–Akemi?

    –hola hermanita! Cómo va todo?

–pues bien, ¿A qué se debe tu llamada?

–aprovechando que es feriado
con Kana pensamos en invitarte a comer, ya sabes, para que veas a los
niños.

–oh, claro, extraño a mis sobrinos.

–perfecto, te esperamos.

Colgo la llamada, entonces me dirigí hacia la sala para retomar mi charla con Iguro.

–Todo bien? — pregunto.