23 de julio de 2023
persona x:
No quiero agarrar la costumbre de escribirte la verdad, pero hoy quiero escribirte de nuevo. Quiero ahora yo entenderme.
Para empezar todo esto de forma ordenada (aunque probablemente no lo sea). No recuerdo exactamente el día, pero debió ser un día viernes dos semanas antes de nuestra primera presentación. Empezamos a hablar, me acuerdo perfectamente porque fue; tú me mostraste tu dedo todo ampollado porque no tenías uñeta, y yo te dije que por que no me pediste si tenía muchas (lo admito, te mal acostumbre). 24 de septiembre de 2022, estaba más que nerviosa, por la presentación y porque desde que te conocí en la orquesta te me hiciste lindo, y ahora me estabas hablando, sin contar que con la mas mínima interacción que tenía contigo me ilusionaba un poquito más. Comenzamos a hablar y a llevarnos bien, me acuerdo que cuando terminamos de tocar fuiste con el "M" a comprar y me compraste unas gomitas. Esa misma noche te hablé y te agradecí por las gomitas (a pesar de que no me gustan), esa noche se quedó la "N" en mi casa y mientras hablaba contigo ella veía como mis ilusiones iban creciendo más y más. Era como un pequeño reloj de arena que mientras más tiempo pasaba contigo, más arena de ilusiones iba cayendo.
Me acuerdo que unos días después nos encontramos en el estadio, estaba súper emocionada de verte, y fui todo el camino escuchando música romántica (no tienes derecho a juzgarme porque 1; tenemos la misma playlist, y 2; era una niña ilusionada) también sentí como mi corazón se rompió en dos cuando te vi en la fila con la "M" (aclaro que para ese entonces no tenía idea de que es tu mejor amiga y la manera en q la abrazabas daba para entender muchas cosas). También me acuerdo que esa vez me vestí y me prepare por q te iba a ver a ti, me puse unos shorts y mi mamá me dijo que me iba a dar frio y que llevara un buzo, pero yo de necia no le hice caso y fui así (te culpo completamente por haberme resfriado esa vez).
El día que me declare... fue difícil, más que nada porque sabía que era muy poquito tiempo el que llevábamos hablando, pero como te digo, me ilusione muy rápido, igualmente no me quejo. Esa vez me dijiste que podríamos conocernos mejor para ver cómo se daban las cosas. Luego de eso la espera para cada viernes se me hacía eterna, recuerdo que me la pasaba todo el día hablando de ti, tenía a mis amigas ya hartas, estaba todo el tiempo "quiero que sea viernes". y cuando volvía de verte, siempre me preguntaban que paso, porque con solo ver mi carita de felicidad sabían que había pasado algo.
Fueron pasando los días, las semanas, y mi cariño se hacía cada día más grande incluso transformándose en amor (quien iba a pensar que ese cariño nunca se iba a ir). Cada semana esperaba el fin de semana con la esperanza de verte. Fuimos conociéndonos mejor, agarrando confianza, y en muy poquito tiempo ya nos tratábamos de una forma que ya no era amistosa. Me gustaba molestarte en los ensayos, desafinarte el instrumento, medir nuestras manos, quitarte los anillos para después olvidarme y devolvértelos la semana siguiente. Recuerdo que cuando estabas distraído me gustaba mirarte, contar tus lunares y guardar cada detalle de tu cara en mis recuerdos. También me acuerdo de lo odioso que era el Ian, la primera vez que nos fuimos en el bus para los liceos nosotros tratando de tener un momento de solo los dos y el Ian metiéndose en todos lados para molestarnos (la verdad me sigue cayendo mal por eso xd). Aún tengo los videos de los ensayos, creo que no soy capaz de borrarlos porque es una forma de recordar los buenos momentos.
17 de noviembre de 2022... nos dimos nuestro primer beso, lo recuerdo muy bien porque también fue uno de mis días más importantes. Ese día fue muy agotador, pero a pesar de eso fue mi día favorito de ese año. En la mañana tuvimos ensayo para la presentación de la noche. Fue en uno de los recesos que yo me regrese a la sala a buscar algo y tú me seguiste, fuimos hasta arriba a jugar con la marimba, y en eso que bajaba tú me tomaste y me diste un beso. La emoción de ese momento no te la puedo describir, simplemente sabía que ya te amaba y créeme que por más feliz que estaba también tenía mucho miedo. Luego de eso llegue al liceo para irme al campeonato de inglés, y a pesar de los nervios lo único en lo que podía pensar era en ti. Gané y ese fue otro motivo más para estar feliz ese día. Cuando estábamos esperando para la presentación yo ya estaba muy cansada, me senté a un lado tuyo y recosté mi cabeza en tus piernas, me quedé dormida y después tu forma de despertarme hizo que me enamorara aún más. Simplemente fue el mejor día.
Navidad no lo quiero hacer muy largo. Me demore 1 semana haciéndote el regalo para q el mero día rompieras la caja ;( te compre unos collares con arroz grabado que tenía nuestros apodos; nup y nub) tú me regalaste un anillo que me quedaba gigante, Aun lo tengo guardad (esa vez nuevamente te robe un anillo y se me olvido regresártelo). Y así, termino el 2022
Enero... empezaron los problemas, casi no hablábamos y cuando podíamos tú me contestabas cada 20 minutos o más. Sinceramente era agotante. Había días que me dormía casi a las 5 am esperando tu mensaje y no llegaba. Hasta q un día, más precisamente el 20 de enero a las 2 de la mañana me agoté y di por finalizada nuestra relación. De ahí en adelante todo fue llorar y llorar, creo que realmente entre en un estado de depresión. No comía nada, no dormía, me la pasaba llorando toda la noche, me despertaba a las 3 de la tarde para después seguir llorando. Te extrañaba mucho, pensaba mucho en lo que no debía "¿Que hubiera sido si...?". Pasaban los días y creía que el dolor iba desapareciendo, hasta que empezaste a torturarme a la distancia. A cada minuto y en cada lugar me llegaba tu olor, ese olor que sabes que me encanta. En cada lugar y en los momentos más extraños, llegaba ese olor que me recordaba a ti.
Pasaron los meses y se volvía todo más ameno, aunque de igual modo te seguía sintiendo en todas partes. Para cuando llego marzo empezó mi miedo, volver a la orquesta, básicamente volver a verte. Sabia y tenía claro que apenas te viera todo pensamiento de que te había superado se iría por la borda. Y fue así solo q meses después ya q tuve el dichoso accidente y me fracturé el pie.
Fines de abril y se cumplió lo que no quería. Te volví a ver y como ya suponía, te vi entrar y todo ese amor volvió a salir a la luz. No quería ni siquiera mirarte, tenía miedo y duda de saber si estabas enojado o no. Después de un rato te volteaste hacia mí, me tendiste la mano y me pediste perdón. Fue un perdón sincero al que no me pude negar, pero con eso me di cuenta que comenzaba el segundo round de nuestra relación. Ese mismo día nos volvimos a seguir y volvimos a hablar, y créeme estaba aterrada, pero feliz. Volvimos a las presentaciones y tuvimos una en el teatro, yo estaba muy nerviosa, era la primera vez del año que tocaba y para empeorarlo todo había tenido solo 2 días para aprenderme la canción nueva. Ese día antes de salir estaba temblando, tú me abrazaste por la espalda antes de salir y el sentirte cerca mío me hizo sentir segura y que todo saldría bien.
Palabras más, palabras menos, el 27 de mayo me pediste pololeo y yo era la más feliz de todas. Por fin después de ocho meses se nos había logrado dar. Una semana después fue mi cumpleaños y fue la cosa más linda del mundo, me regalaste flores. Y aunque piensen que es un simple detalle, para mí fue el regalo más hermoso que me dieron en mi vida (todavía guardo las flores) y hasta ese momento, todo fue perfecto.
Pasaron unos días y yo me comencé a sentir rara. No sentía sinceros los te amo que te decía, no sentía la misma emoción cuando sabía que iba a verte, no sentía las ganas de hablarte, y cuando te miraba ya no veía ese amor. Algo había cambiado en mí y comencé a sentirme culpable. Me reprochaba el ya no sentir lo mismo después de haberlo esperado tanto tiempo. Supuse que era algo temporal y que después volvería a sentir lo mismo, pero no fue así. Empezamos a discutir más, a pelear por cada cosa, y comencé a desilusionarme. Las peleas cada día eran más recurrentes y más fuertes, y las mismas actitudes tuyas volvieron a salir. Dude mucho, y lo postergue por mucho tiempo el dar fin a nuestra relación porque tenía la esperanza de que se arreglara todo. Pero al igual que la primera vez, me agoté y te terminé por segunda vez.
Debo reconocer que no fue tan dolorosa como la primera vez, pero aun así te extraño. Llegue a dudar si de verdad fue buena decisión o simplemente tome una opción sin pensarla. Pero no es así, lo pensé durante mucho tiempo y eso no daba para más. No fue el tiempo suficiente para esperar sanar, así que tuve que ser la valiente y dar un paso al costado para que puedas sanar y aprender un poco de las nuevas y viejas experiencias.
Te quiero mucho nub, pero no estamos preparados para estar juntos y nunca lo estuvimos, pero a pesar de eso y como quedo expresado en estas palabras y estas letras, cada momento contigo lo ame y disfrute al máximo, y ese es mi mayor consuelo.
javi
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Las cartas que nunca te di
Randomdude mucho si escribir esto o no. Pero ya que, a fin de cuentas son "Las cartas que nunca te di" y merecen ser leídas.