Nogrod

927 84 513
                                    

— Jefe Durin, ¡jefe Durin! —resonó una voz urgente y emocionada

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

— Jefe Durin, ¡jefe Durin! —resonó una voz urgente y emocionada.

— ¿Qué sucede, Thrain? —preguntó Durin, levantando la mirada para encontrarse con el rostro agitado de su compañero.

Thrain llegó jadeante, como si hubiera estado corriendo de un lado a otro en su búsqueda. Su emoción era innegable.

— ¡El experimento fue un éxito! —exclamó Thrain, apenas recuperando el aliento.

Durin frunció el ceño, intrigado por las palabras de Thrain.

— ¿Cuál experimento, Thrain? ¿De qué estás hablando?

Thrain trató de controlar su respiración agitada antes de responder.

— ¡El experimento para conectar con el otro lado! ¡Funcionó, jefe Durin! Después de muchos intentos, finalmente hemos logrado establecer una conexión.

El corazón de Durin dio un vuelco ante la noticia. Ya había olvidado que hace un tiempo, ordenó a Tharin. Un enano que le encanta experimentar con la magia. Buscar la manera de establecer una conexión con el otro lado, la idea lo llenó de emoción y expectación.

Ambos se encontraban en el corazón de Nogrod, en el majestuoso Moriahul, el líder de los enanos, Durin, pasaba sus días observando su próspero reino con una mezcla de orgullo y tranquilidad.

Sin perder tiempo, Durin tomó una decisión.

— Thrain, ve al Distrito de Comercio Zarakâz y avisa a los demás. Diles que el experimento fue un éxito.

Thrain asintió con entusiasmo y, sin perder ni un segundo, se apresuró en dirección al Distrito de Comercio para transmitir la emocionante novedad.

— Después de tanto tiempo, volveremos a reunirnos con nuestros viejos amigos —murmuró Durin, con una mezcla de esperanza y nostalgia. — Confío en que las espadas que le enviamos a Licht les hayan servido en su lucha.

Durante un instante, Durin permitió que su mente vagara hacia su pasado. Recordó a Licht, el líder de los elfos, y a los demás elfos quienes en antaño formaron una gran amistad. Esperaba sinceramente que las espadas forjadas con esmero les hubieran brindado la ayuda que necesitaban en su lucha contra los demonios.

Antes de que pudiera perderse más en sus pensamientos, Thrain regresó, con su rostro reflejando sorpresa. Durin alzó una ceja, esperando ansiosamente lo que tenía que decir.

— Jefe... No es solo eso —Thrain parecía contener una mezcla de asombro y sorpresa en sus palabras—. Tenemos invitados

Durin dio la orden a Thorin Escudo de Roble. Un enano que vive en las gigantescas montañas cerca de uno de los poblados. Abordar al par de invitados que llegaron de improvisto, y guiarlos a Moriahul para una audiencia con su líder.

 Abordar al par de invitados que llegaron de improvisto, y guiarlos a Moriahul para una audiencia con su líder

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Espadas y AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora