𝐋𝐀 𝐍𝐎𝐕𝐈𝐀 ━━━━━ Drakey

3- Que bonitos ojos tiene compadre

¿Oye grandulón, estás libre para salir hoy?

Sip, ¿Dónde y a qué hora?

Pasaré por la cafetería cerca de tu universidad en 1 hora

Vale, ahí estaré

Más te vale, ne Ken-chin

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— Y ahí está de nuevo, esa sonrisa de estúpido.

Baji observó con diversión como la sonrisa que Draken tenía en el rostro, se desvaneció casi por completo cuando se dio cuenta de su presencia.

— ¿No deberías estar en clases? — preguntó Draken apagando su celular y dejándolo a un lado sobre el césped.

— Bien dicho, debería — Baji se acomodó a su lado en el césped y se recostó — Faltar una clase no me hará daño, pero ¿Sabes qué sí lo hará? el estrés.

— ¿Es tu mejor excusa? — una sonrisa de lado acompañó la expresión divertida del rostro de Ken.

— Nop, pero es la primera que me vino a la mente — Tomó un puñado de césped y lo arrancó para lanzarlo al aire — ¿Entonces? — preguntó sin mirar a su amigo.

— ¿Entonces qué? — devolvió la pregunta haciéndose el desentendido.

— Oh, vamos. Jamás me contaste cómo fue tu cita con Emma — reprochó mirándolo de reojo — Y desde ese día, no has parado de mirar tu celular y sonreír como estúpido cada que vez la pantalla. Dime, ¿Te agradó Emma? ¿Es con ella con quien hablas siempre?

— ¿Por qué no se lo preguntas a ella? — cuestionó riéndose internamente, pues él no conocía nada sobre la famosa Emma, más allá de que era la hermana menor de Manjiro.

— Porque el objetivo de la salida era que tú dejaras de ser un ermitaño y ella no sabe que la utilicé para eso — refutó moviendo sus brazos en el aire mientras hablaba — Ella piensa que eres un tipo genial, inteligente, super popular, social y divertido.

— ¿Cómo Tony Stark? — preguntó divertido, recordando la comparación que había hecho Mikey en su primera cita.

— ¿Tony Stark? — repitió Baji antes de asentir con la cabeza — Sí, algo así.

— Ella se molestaría si sabe que le mentiste — rio Draken de manera maliciosa.

— ¡No le mentí! — reflexionó un poco — O sea, no mucho. Si eres inteligente y genial. También eres bastante popular, solo que no del tipo que conoce a todo el mundo ¿sabes?

— Claro, claro. Lo capto — Draken tuvo que asentir para darle la razón. A veces pasaba por los pasillos de la universidad y era saludado por muchas personas de las cuales no tenía idea de su nombre. Claramente él devolvía el saludo por cortesía.

— ¿Y? — se reincorporó para sentarse sobre el césped — ¿Hablas con Emma?

— Tengo que irme — Draken se levantó y sacudió su ropa de manera veloz — Hablamos después.

— ¡No huyas! — gritó lanzando un puñal de césped en su dirección, a duras penas rozando al tatuado.

— No estoy huyendo — dijo agitando su mano y alejándose del pelinegro.

— Ese maldito...

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Aún faltaba 5 minutos para la hora acordada, y si algo había aprendido de Mikey, es que siempre llega al menos 10 minutos tarde.