1- Tan novia y sin guapo

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La universidad era bastante complicada, mucho más de lo que llegó a pensar. Afortunadamente no había sufrido de algún colapso mental en todo el año que llevaba estudiando en aquel lugar. Ken Ryuguji era un estudiante ejemplar, aun cuando su pinta gritaba todo lo contrario.

Tenía los costados de su cabeza rapados y un tatuaje de dragón adornaba uno de los lados de su cabeza, su cabello era negro haciendo que sus rasgos varoniles resaltaran e hicieran que luciera tan intimidante como su atractivo lo dejara, su altura y musculatura proporcional solo le daban un plus. Llamaba la atención de la población femenina a donde quiera que fuera.

Con todos aquellos rasgos, sus amigos se preguntaban cómo es que Ken Ryuguji jamás haya tenido una novia.

— Dios, realmente necesitas una novia que te cambie la cara de amargado que tienes.

Ken rodó los ojos ante aquel comentario.

— No, gracias. No soy un desesperado — tan pronto como terminó de decir eso, llevó la taza de café a sus labios.

—No es porque crea que seas un desesperado, Draken — hizo una pausa tratando de acomodar sus ideas para expresar lo que pensaba — Es porque es triste verte tan solo.

— Yo estoy bien así — Draken se encogió de hombros restándole importancia al asunto — No deberías preocuparte por cosas así, Mitsuya, estoy perfectamente.

El nombrado hizo una mueca de desaprobación. Tomó un poco de su taza de café para calmarse y no mostrarse preocupado en exceso. Su instinto le hacía imposible no preocuparse.

— No me preocuparía si no fuera grave — su mueca preocupada se hizo más evidente — Pasas navidad, año nuevo y San Valentín solo.

Draken desvió la mirada hacia el cristal que separaba la abrigada cafetería donde se encontraban y las frías calles de Tokyo, podía apreciar los adornos de San Valentín que aún no quitaban del cristal. Tal vez Mitsuya tenía razón, estar solo todo el tiempo no era de sus pasatiempos favoritos, pero la idea de una novia tampoco le llegaba a agradar.

Se mantuvo en silencio pensando en los pro y los contra de buscar una pareja. Draken era fiel creyente de que la persona indicada llegará cuando sea el momento indicado, y es por eso que no se forzaría a buscar a una persona para complementar sus días.

— Hey — aquella voz logró que saliera de la burbuja de pensamientos en la que se había sumergido — ¿De qué hablan?

— Hola Baji — saludaron casi al unísono.

Baji sonrió mostrando sus peculiares colmillos, se tomó su tiempo para sentarse junto a Draken y pedirle a una mesera su desayuno.

— ¿Y bien? ¿De qué hablaban? — preguntó curioso, pues Draken había estado inusualmente callado cuando él había llegado.

— De que a Draken le hace falta una novia — respondió Mitsuya después de una corta batalla de miradas con su amigo solterón.

— Oh, sí. Estoy de acuerdo. Te hace falta una, hermano — asintió con su cabeza — Estoy en el punto en el que hasta pienso que eres virgen.

Draken miró de mala forma a Baji.

— No soy virgen — aclaró chasqueando la lengua — Y aún si lo fuera, no tendría nada de malo.

— No soy gay —mencionó Baji recibiendo muecas confundidas de los otros dos — Pero considero que, con lo atractivo que eres debería ser un delito si fueras virgen.

— ¿Gracias? — pronunció Ken confundido.

— No es nada hombre — Baji sonrió en grande dándole una fuerte palmada en la espalda al del tatuaje —Pero volviendo al tema, Mitsuya tiene razón, deberías conseguirte una novia.

— Lo pensaré — claramente no lo haría, prefería buscar otras alternativas.

— Por supuesto que no lo harás — soltó Mitsuya en forma de reclamo — Si pudiera, te buscaría una novia yo mismo.

— Eh, no es mala idea — respondió el pelinegro de ojos chocolate — Yo tengo una amiga, es muy linda, tal vez te agrade.

— No quiero — renegó Draken — Ya les dije que no necesito pareja.

— Necesitas alguien que haga que salgas de tu vida de ermitaño — Le llevó la contraria, totalmente convencido de su punto — Ya ni siquiera tratas de conocer gente nueva para amigar, tus habilidades sociales han desaparecido.

— Eso no es cierto — Draken los señaló con obviedad — Si así fuera, no podría hablar con ustedes.

— No seas estúpido — Baji rodó los ojos — Te conocemos desde hace años, nosotros no contamos. Estamos acostumbrados a tu rara manera de ser.

— ¿Con cuantas personas has socializado desde que salimos de la preparatoria? — Mitsuya cruzó sus brazos sobre su pecho.

Draken empezó a hacer cuentas mentales mientras Baji y Mitsuya lo observaban expectantes. Ken palideció de un momento a otro quedándose en silencio.

Baji tomó ese silencio como una respuesta negativa.

— Te conseguiré una cita con mi amiga, al menos conócela — suspiró Baji mientras movía su cabeza de un lado a otro mostrando su decepción — Emma estará encantada de conocerte.

Draken se resignó sabiendo que ni Baji ni Mitsuya desistirían de la idea de encontrarle una novia, algo que, a su parecer, era difícil, pues en toda su vida no ha sentido atracción por más de dos meses hacia una mujer. Tan solo les seguiría la corriente a sus amigos hasta que ellos mismos se rindan o hasta que lleguen a colmar su paciencia.

— Si eso no funciona, le abriré una cuenta en Tinder — declaró con seguridad el peli lila.

Ken mostró una expresión de completo horror hacia lo dicho por su amigo. Definitivamente no saldría nada bueno de una aplicación como Tinder.

— ¡Bien! lo intentaré con la amiga de Baji — se tomó lo que quedaba de café en su taza de un solo trago antes de levantarse con intenciones de dejar el lugar — Pero no se te ocurra crearme una cuenta de Tinder.

Tanto Mitsuya como Baji sonrieron satisfechos ante la respuesta positiva de Ken, aun cuando había aceptado a regañadientes.

— Bien te veremos luego, me quedaré con Baji hasta que su pedido llegue — Mitsuya hizo un ademán de despedida con su mano.

— Te pasaré los detalles de tu cita luego — Baji le mostró una sonrisa juguetona antes de imitar el gesto de Mitsuya y despedirse con la mano.

Draken tan solo asintió y salió del lugar. Su primera clase del día pronto empezaría y ya se había retrasado mucho en su conversa con aquellos dos.

No estaba convencido, sentía que no lo necesitaba. Desde pequeño había sido siempre así y no había problema alguno ¿Por qué ahora lo habría?

Amaba su perfecta soledad. ¿Verdad?

𝐋𝐀 𝐍𝐎𝐕𝐈𝐀 ━━━━━ DrakeyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora