☆*: .。.Capitulo Tres .。.:*☆

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CAPITULO 3: Jack

Llegue a mi casa. Había tenido un día bastante agitado, pero esa chica que conocí hoy me pareció totalmente simpática. Cuando la vi en el colectivo tenía pensado en pedirle el número de teléfono o entrar en alguna charla, pero no lo conseguí. Así que me pregunto algo ella lo cual estaba nervioso. Va a parecer muy acosador de mi parte, pero la guie a ese parque para iniciar una conversación o algo. Así que me había bajado del colectivo y fui a mi casa a buscar a Max para fingir que lo había perdido. Pero como que no salió tan bien. LE MEO LA PIERNA A LA PIERNA MEADA, aunque ya me dijo su nombre, Alice. La primera impresión fue la peor de todas las primeras impresiones, pero se hizo lo que se pudo. Aunque no hay que negar que seguro le parecí atractivo, me dio su número de teléfono sin pedírselo. No se me resisten, lo sé.

No me presente. Soy Jack, Jack Henderson. Vivo con mis amigos en un departamento que compartimos. Tengo un perro que se llama Max, aunque ya lo debieron de conocer. Me gusta salir a caminar, escucho música todo el tiempo y... creo que eso es todo para una buena presentación...Ha, ya me acorde, mi cumpleaños. Sé que no es muy importante pero bueno, cumplo el veinte de agosto. Faltan dos meses, pero no falta tanto. Algunos me dicen que soy un Egocéntrico y que todas las chicas quieren con migo, pero creo que exageran.

-Jack, tienes que ir al supermercado ahora, o si no...- Ella es Susy, es la única chica que no ha gustado de mí, es muy fría con las personas, y siempre me anda acusando.

-O si no me sacas del departamento. Susy, sé que no lo harás, pero iré en unos minutos-

-Más te vale- Respondió y se fue a su habitación a leer, como siempre. La verdad no sé cómo prefiere quedarse todo el día leyendo y sin salir. Creo que por eso somos sus únicos dos amigos. Yo y Thomas.

-Thomas, ey, ey- Lo llame a mi amigo, al pelirrojo del pequeño grupo. Solíamos llamarlo el rojo tomate. Lo dejamos de hacer cuando se quemó la cara en la playa y bueno, le pusimos otro apodo cara quemada.

- Que pasa Jackie- Respondió, odiaba ese apodo.

- No me digas Jackie, cara quemada- Ambos reímos. La mayoría de las cosas no nos la tomábamos en serio.

-Bueno Jackie, ¿Qué paso?-

-Acuérdate que mañana tenemos que ir a lo de Mirko, para terminar de componer el disco.

-¿Cómo me olvidaría de eso?.- dice Thomas, cargándome.

-Nunca dije que lo olvidarías, era para que lo recuerdes- Thomas asintió y se fue también para su habitación.

Nuestro departamento no era muy grande. Tenía tres habitaciones, un baño, una cocina muy pequeña, un tipo living (tenía un sofá y una televisión), por ultimo un balcón no muy espacioso.

Todos somos mayores de edad, bueno, casi todos. Thomas ya tiene sus dieciocho, Susy también. Pero yo los estaría cumpliendo en dos meses, da igual.

Susy en realidad no vive permanente con nosotros, se queda cada dos semanas por que va a visitar a los padres, que no viven cerca de aquí.

Thomas solo se va a visitar algún que otro fin de semana a la mamá y a su hermano.

El único que estoy siempre soy yo. Mi abuelo me regalo este departamento y quise compartirlo con las personas que mas quería. Ellos me pagaban la renta, que no era mucha, y yo ese dinero lo ahorraba.

Llego la hora de cenar y pedimos unas pizzas, y a Susy una especial con piña, tiene los peores gustos del mundo, créanme, lo sé.

Tocaron el timbre a los veinte minutos de a ver ordenado. Thomas fue a buscar la pizza y en cuanto la trajo nos sentamos a comer.

-La verdad- comenzó Thomas- no puedo entender cómo te gusta esa barbaridad- Susy lo miro, siempre Thomas hacia el mismo comentario.

-Pues ¿Hay algún problema?- Respondió Susy, y sonó bastante molesta. Hoy no tuvo un buen día.

-Claro que lo hay- Dijo Thomas, a lo que Susy no le resulto gracia.

-Claro que no lo hay, Thomas, tú lavas tus calzones una vez por semana y nadie te dice nada- Intervine yo, para que no se formara una pelea.

-Oye, no nos pasemos Jackie o le cuento a Susy sobre lo del...- No termino de decir la frase y Susy sobresalto. Le encantaba el chisme.

-Sobre que- Yo mire a Thomas con una mirada fulminante.

-Sobre...he- Continuo él.

-Sobre... que, digan algo señores misteriosos- Susy nos miraba a ambos esperando alguna respuesta. Y se me ocurrió una pequeña mentira. Yo sé que Susy odia las mentiras, pero si se lo decía me iba a fastidiar todos los días.

-Sobre que... no fui al final al supermercado- Ella me miro esperando otra respuesta. Claramente era la peor de las mentiras posibles. No me creyó.

- Aja, si te vi hoy con las bolsas del supermercado, yo misma te obligue a ir- Valla, esa chica si se parecía a mi mama. – Si no quieren contarme está bien, pero decirme mentiras u ocultarme algo... no señor.-

-Tu ganas- Respondí dejando mi porción de pizza en la mesa-

-Soy todo oídos- Se tiro para atrás y apoyo su espalda en el respaldo de la silla cómodamente.

-Estuve con una chica en el parque, hablamos y me dejo su número de teléfono en una hoja de un árbol. Y además... Max le meo la pierna.- Me cruce de brazos y me puse a pensar en ese momento ¿Debería hablarle y agregarla a mis contactos?, creo que es demasiado pronto. Voy a esperar unos días para hacerme el ocupado. Pero no voy a admitir en frente de ellos que me muero de ganas por hablarle, es una chica muy interesante, bonita... Que cosas piensa mi mente por dios.

Susy me miro poco sorprendida, como si eso me pasara todos los días. Aunque debo admitir que la mayoría de chicas que me eh cruzado dicen que soy muy apuesto y... Bien, dejo mi ego por un rato.

-¿Solo era eso?, que novedad- Puso los ojos en blanco y agarro otro pedazo de pizza- ¿Tanto misterio para eso?, Jack, ya sabemos que todas las chicas están loco por ti. Eres el jodido chico perfecto- Para ser sincero, Susy en el secundario gusto de mí, nunca me lo dijo, no es de decirte las cosas, pero, lo sabía, su mirada no mentía. Pero nunca me llamo la atención hasta que hicimos un proyecto juntos. Era y es muy simpática con los que quiere, llama a los "amigos" a los que verdaderamente lo son. Físicamente tenía el pelo negro ondulado, usaba lentes, le gustaba la ropa holgada y siempre leía y seguirá leyendo. Le encanta. Puede ser media fastidiosa a veces, pero solo cuando entra en confianza. No tiene amigos, solo me tiene a mí y a Thomas. –Pero para mi eres... como decirlo- continúo.

-Como decir que- respondí ofendido.

-¿Un egocéntrico que le gusta que las chicas gusten de el sabiendo que nunca ah tenido novia por que no encuentra la indicada? – Respondió rápidamente Thomas, como lo odio.

- Exacto- Dijo Susy, como si le hubieran sacado la palabra de la punta de la lengua.

-Oigan, no soy egocéntrico- Los dos me miraron con esa cara de "Si, claro. No te lo crees ni tu" o e "seguro nos está cargando".-Bueno, solo un poquito-

-Poquito bastante querrás decir- Agrego Susy y echamos a reír.

-Bueno chicos, me voy a dormir. Ustedes también deberían- Continuo Susy- Hasta mañana "tomate quemado" y hasta mañana "jodido egocéntrico".- Nos saludó y se fue a su habitación.

- Y después nos dice molesto a nosotros- Le dije a Thomas mientras que me levantaba y empezaba a juntar la mesa.

-A veces no la puedo terminar de entender- Agrego Thomas.

-yo tampoco- Respondí.

-Bueno Jackie, me iré a dormir. Mañana va a ser un largo día- Lo salude y se fue.

Unos minutos más tarde ya me encontraba en mi habitación dormido plácidamente. 

Vida Caótica, Amor Caótico.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora