"beloved night" | CHANYEOL, KAI.

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Llevaba el regalo de Chanyeol en una bonita bolsa. Llegué a la clase, donde el profesor daría los exámenes, sin embargo, el salón estaba cerrado todavía. Esperé unos minutos, mientras pensaba en la fiesta de Jiwon, una de las chicas más populares del instituto. Hwasa me había dicho que había invitado al chico problemático al evento, para vengarnos de él ese día.

Además, Hwasa me pidió que después de hoy, me alejara de Chanyeol. Por alguna razón, no podía hacerlo. Chanyeol y yo nos habíamos convertido en amigos, por lo que quería que nuestra amistad, durada unos días más.

—Ya lo tengo —expresé en voz alta al tener una idea clara.

Miré mi móvil durante otro rato y el profesor llegó.

—Soomi, estás aquí. Has llegado antes que yo, creí que nunca vería esto.

—No exagere, profesor Lee —él abrió la puerta y yo entré con él.

—¿Tiene las notas? —sonreí. Él asintió sonriendo también.

Buscó entre sus cosas y sacó los papeles que supuse que eran los exámenes. Entre estos tomó uno y me lo dió. Había sacado un 92%. Rápidamente, se me formó una sonrisa de felicidad en el rostro.

—Es increíble la nota que ha sacado, señorita Hwang.  Su tía estará feliz al verla.

—Muchas gracias, profesor Lee —hice una reverencia y salí.

Observé a mis amigas, Chanyeol y Christopher, viniendo hacia mí.

—¿Y? —Chungha preguntó.

Yo sólo alcé la hoja, para que puedan verlo por sí mismos. Todos se quedaron alucinando.

—¿No has hecho trampa? ¿Verdad? —Hwasa dudó.

—Estaba pensando lo mismo —Chanyeol añadió. Mi sonrisa se fue.

—No creeréis eso de mí, ¿cierto?

—No, estábamos bromeando —Hwasa se rió, y me abrazó, junta con Chungha.

Saltamos de alegría las tres, como unas niñas pequeñas.

Nos separamos. Chanyeol iba a decir algo, pero no pudo, ya que lo abracé. Él me correspondió el abrazo.

—Gracias —como Chanyeol es muy alto, tuve que levantar mi cabeza para mirarlo. Creí que él se había sentido incómodo por el abrazo, así que me aparté —. Esto es para tí —le entregué la bolsa.

—¿Qué es? —se refirió a la bolsa.

Vi mi móvil y mi Tía me estaba llamando.

—Perdón —me alejé de ellos y respondí a la videollamada —. ¡Hola Tía!

—¡Mimi! Te extraño un montón. ¿Puedo ver tu nota?

—¡No! —hice puchero—. ¡Síi! ¡Mira! —le enseñé el papel.

—¡Wow! ¡Soomi! —miré como mi Tía puso una cara alegre al ver el examen —¡Felicidades!

—Eso significa que...

—Sí, señorita. Ya no estás castigada —sonreí al escucharla.

—¡Gracias!

—Estoy muy orgullosa de ti. Has mejorado mucho

—Todo ha sido gracias a Chanyeol —ella asintió.

—Me he dado cuenta. Disfruta de tu libertad —se despidió. Yo hice el mismo gesto y corté la videollamada.

Volví con los demás, quiénes estaban conversando sobre la camiseta de Juego de Tronos.

—Aquí está Soomi —Chungha me abrazó de lado.