Capítulo 21

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Kook después de desahogarse con su mejor amigo ambos decidieron prepararse algo de cenar, Suga tenía mucha confianza en aquella casa que prácticamente era su segundo hogar. Los padres de Kook disfrutaron de la compañía del chico, al final Suga tenía que volver a casa para no dejar tanto tiempo a solas a su hermano menor.

• Al día siguiente •

— Me alegra que ahora estemos nuevamente juntos, no saben lo tan feliz que me hacen. —Decía Jung Hoseok al ver a sus amigas, los tres habían vuelto a sentarse juntos como antes.— Ahora que están aquí, quisieran que me aconsejen ¿Cómo puedo enamorar a una chica?

— Se sincero con ella, si ambos sienten lo mismo entonces todo saldrá bien y si no siente lo mismo que tú... Debes respetar su decisión. —Aconsejó Bomi al sonreír y beber el refresco de fresa.—

— Dale regalos caros, hazla sentir endeuda contigo y verás que no podrá rechazarte. —Jennie tenía una mentalidad diferente, logrando que Jung Hoseok se confunda en vez de encontrar una solución.—

— Hablo en serio, ustedes dos ya tienen pareja mientras yo estoy solo, no sean malas con su único amigo. —Suplicaba el joven al hacer un puchero.—

— Entonces solo sé sincero. —Las dos hablaron al mismo tiempo, por ese momento volvieron a conectarse como antes. Bomi y Jennie soltaron un suspiro, ambas añoraban aquellos tiempos en donde pasaban tanto tiempo juntas, eran felices, pero al pasar el tiempo cada una fue cambiando.—

Al llegar la salida de la universidad, Suga como siempre esperaba a su novia para llevarla a casa como de costumbre, Bomi sonrió al verlo y los dos entraron al carro en donde Jin los llevaría.

— ¿Qué te parecen estás pulseras? Espero que te guste. —Con nervios le entregué mi regalo, ella al contrario de mis espectativas no sonreía con alegría.— ¿No te gusta el diseño?

— Es lindo... —Bomi soltó un suspiro al ponerse aquellas pulseras de plata, tenía perlas incrustadas y era brillante, después decidió mirar a través de la ventana.—

— ¿Estas bien? Puedes decirme si no te gustaron, puedo obtener un reembolso... Aunque te la hayas puesto no siento que estés feliz de recibirlo, por eso pregunto para evitar problemas más adelante.

— Me gusta, son solo cosas mías no me hagas caso. —Susurró sin mirarlo y sintió como su prometido le dejó un beso en la mejilla, para finalmente llegar hasta su casa.— Nos vemos mañana. —Bomi se despidió con una sonrisa, entrando a la casa decidió quitarse las pulseras y guardarlas con mucho cariño en la caja.—

|Luego de unas horas|

Kook y Jennie llegaron hasta aquella habitación de hotel, él procuraba en todo momento estar atento a cada expresión de su pareja y después de insistirle y rogarle por mucho tiempo consiguió que se pusiera aquella venda. Ella fue guiada por su pareja, en el momento en que la venda fue quitada pudo ver el cuarto completamente decorado.

— No era necesario decorar todo el cuarto. —Soltó un suspiro al ver las rosas, las velas aromáticas e incluso unos chocolates.—

— Quería que pasemos un momento romántico, siento que nos falta demostrar el amor que sentimos... Esto es lo que siento por ti, cuánto te amo. —Kook bajó la mirada al ver como Jennie se ponía cómoda sobre la cama.—

— Pensé que habíamos venido para tener sexo y ya, solo por esta vez dejaré que hagas cosas como estas, para la próxima vez no lo hagas... Detesto todo lo romántico. —Ella buscaba su celular en su bolso, comenzó a navegar por sus redes sociales.—

— No lo volveré a hacer. —Se sentía tan ignorado, Jennie estaba más atenta a un aparato electrónico que a él.— ¿Quieres un poco de vino?

— Eres tan anticuado. —Jennie escuchó como él abría la botella de vino y en el momento de darle la copa de vino ella siguió chateando con otros tipos, al final Kook intentó hacerle cosquillas consiguiendo que ella se manche la blusa con el vino.— ¡Mira lo que hiciste! Esta blusa ya no sirve, era de mis favoritas. —Con fastidio se puso de pie y se fue al baño, dejando su celular sobre la cama.—

SMILE ON MY FACEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora