Roronoa Zoro OP One Shots

Onigashima party Zoro x T/N x Sanji

N/A
⚠️Advertencias⚠️

• +18 Spicy 🍋 menores abstenerse de leer.
•Puede contener spoilers del arco Wano

Este one shot está ambientado en la escena de Onigashima cuando la Alianza Ninja-Pirata-Mink -Samurai están disfrazados del ejército de Kaido.

Recomiendo que escuches las canciones con las que me inspiré para hacer esta historia.

Peace ✌🏻

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Llamabas mucho la atención con tu disfraz de los piratas bestia, nada que dejara a la imaginación, dos cuernos negros en la coronilla de tu cráneo, un traje de dos piezas: en la parte superior un bra de color escarlata y unas bragas hasta la cintura con dos aberturas en las ingles, adornado con un arnés negro de cuero, que se apretaba desde tu cuello, enmarcando tu busto y tu tórax, un cinturoncillo abrazando elegantemente tu cintura finalmente cayendo a los lados amarrando tus muslos. Usabas unas botas largas a la altura de tus muslos.
Por último de tus hombros caía un abrigo de piel igual al de todos los piratas bestia.

Todos el ejército de Kaido te miraban y solo podías sonreír nerviosa.

"No les sonrías, actúa ruda, sólo muéstrate inalcanzable" te aconsejó Usopp para luego desaparecer entre la multitud.

Tu mirada se ensombreció, aunque no estabas segura si eso provocó que mas miradas se fijaran en tu presencia.

Tenías que mezclarte para no llamar mucho la atención, cualquier error les podía costar la vida estando infiltrados en mando enemigo.

Las luces bajaron y cambiaron a una iluminación roja, había miles de hombres y mujeres del ejército de Kaido en el ya abarrotado salón.

La música era demasiado rítmica, contagiando sus bajos a tus caderas. Te empezaste a mover siguiendo el ritmo sensual, los demás villanos también estaban bailando y emborrachándose con sake y cerveza.

Cerraste los ojos dejándote llevar, las miradas pervertidas de algunos hombres estaba fija en ti, tu plan hizo lo opuesto a pasar desapercibida, no lo notaste, pero algunos se acercaron más a ti. Luego sentiste unas manos rodearte y manosearte, abriste los ojos de golpe, preparando tu puño para darle al pervertido que te tocaba sin tu consentimiento, sin embargo dos de tus compañeros se adelantaron noqueando al desgraciado. Lo miraron con desprecio desde sus alturas.

Miraste hacía los lados notando que Algunos enemigos habían dirigido su atención a ustedes.

"Pero no se queden ahí parados" los insitaste a que movieran sus cuerpos para no llamar la atención, Zoro tomó tu cintura y te apretó a su torso, acto seguido Sanji te jaló hacia él, se tiraron una mirada retadora, sin mas remedio empezaste a mover tus caderas acariciando el bulto ya duro de Sanji con tu trasero y pegando tus pechos al torso descubierto de Zoro tocando sus pectorales con las palmas de tus manos.
Te miraron sorprendidos pero su mirada cambió a una peligrosamente lasciva en un pestañeo.

Empezó a hacer calor, no supiste de donde sacaste esa osadía para que te encontraras entre tus dos Nakamas bailando, sin embargo funcionó ya que todos volvieron a lo que estaban.

Te dejaste llevar por la sensual música, mentirías si dijeras que no te excitaba la situación: dos grandes, bien trabajados y sexys hombres te tomaban en sus brazos mientras se meneaban juntos en un vaivén de sugerentes movimientos.

Tus manos instintivamente recorrieron los músculos duros del peliverde. Él masajeaba tu cintura. Estaban tan cerca que podías sentir como su cuerpo exhalaba calor. Por su pecho brotaban perlas de sudor, lamiste tus labios deseando posarlos sobre cada una de las gotas.

El rubio por detrás de ti, empezó a susurrarte palabras en francés al oído, poniéndote la carne de gallina, sentiste una mano serpentear de tu cadera hasta llegar a tu entrepierna, acariciándote por encima del traje tan revelador que llevabas, por suerte las luces parpadeantes los tenían bien cubiertos, nadie notaba nada, sólo ustedes tres en medio de la multitud, era tremendamente excitante.

Con su otra mano en tu cuello te pegó a su pecho, tu cabeza posaba en su cuello y tomando tu mentón giró tu cabeza para guiar tus labios a los suyos.

Jadeaste fuerte en sus labios pero sólo tus dos Nakamas tuvieron la dicha de escuchar.

Tan prohibido, peligroso, te encantaba y a ellos también. Era como estar en una fiesta en el infierno, donde a todos les importaba sólo una cosa: pecar.

De pronto los dedos delgados y seguros de Sanji se escabulleron debajo de tu traje teniendo contacto directo con tu humeda y extra sensible piel. Cielos estabas ardiendo, Zoro lamió una gota de sudor que resbalaba por tu cuello, recorriendo su lengua hasta llegar a tus labios besándolos sensualmente, tomó tus pechos con sus manos pellizcando jugetonamente tus pezones. Gemiste otra vez arrebatándole una risa burlona al espadachín. Por Dios ¿Qué nadie estaba viendo tremendo espectáculo que estaban montando? Para ti todo desapareció, solo estaban ustedes tres.

Dos dedos de sanji ingresaron a tu interior, moviéndose al ritmo de sus caderas, sentías como crecía tu excitación, era una delicia ser tocada por las manos expertas de Sanji y las gruesas de Zoro.

No podías más, estabas cerca del clímax, Zoro te tomó por el cuello y posó violentamente sus labios contra los tuyos en un beso obseno y apasionado, te corriste en los dedos de Sanji y Zoro se dió un festín con tus gemidos.

Respiraste agitada, aterrizando suavemente en tu posición, el mareo del orgasmo se desvanecía, el sonido de la música se elevaba gradualmente, te sorprendió lo encapsulada que debiste estar en ese momento.

"Mierda" dijo Zoro entre dientes y pegando su frente a la tuya agregó "Casi me corro contigo preciosa" te dedicó una sonrisa llena de lujuria.

El cocinero te giró para tenerte de frente y te besó con dulzura "¿Por qué no terminamos esto en otro lado Ma chérie?"