Capítulo 15. Solo un tiempo.

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Valentina

Me encontraba en un centro comercial.

No les había dicho pero me había contactado con Pablo. Le dije para vernos hoy y acepto.

Y aquí estaba, esperándolo.

Estaba con capucha y ropa ancha. El la pierna tenía un vendaje pero como llevaba ropa ancha, no se veía.

—¿Valentina?

Rápidamente me giré hacia donde habían hablado.

Pablo estaba frente a mi.

—Hola...

El rápidamente se acercó a mi y me inundó en sus brazos.

Echaba de menos su calor y su cálido aliento.

—Joder pensé que te había pasado algo peor.

Sonreí y lo abracé de vuelta.

—Yo pensé que me odiabas— hablé separándome del abrazo y mirándolo a los ojos, ese color marrón que tanto amaba

—Nunca te pudiera odiar—sonrió y acaricio mi mejilla—. Te quiero como no tienes idea.

Sonreí y mi cuerpo inconsciente hizo que me acercara. Lo agarré del cuello y hice que sus labios se juntaran con los míos.

El poso sus manos en mi cintura y me atrajo a su cuerpo.

—Te extrañe.

Sonrió en mi boca y siguió besándome.

Vale, lo mejor era parar.

Me separé un poco y el acaricio mi cintura.

—creo que tenemos que hablar de muchas cosas.

El asintió—. Vamos a mi departamento, aquí no es bueno hablar, nos pueden ver.

—Vale.































Estaba sentada en su cama, el al lado mío.

—Empiezo yo— dijimos a la ves

—No tu.

—No tranquila Tu primera.

Revire los ojos y asentí.

Me acomode en la cama y hablé.

—Capaz y ya sepas todo—El asintió—. vale, primero quiero pedirte perdón. Se que estuvo muy mal que robara esos documentos, se que amas al barça con todo tu corazón. Y solo quiero pedirte perdón... Actúe mal, fui una mala en enamorarte y luego traicionarte, La misio...

—¿Que dices?— me interrumpió

—Que me perdones por la misión. Eras mi objetivo y yo...

Otra vez.

—¿Objetivo? Que objetivo?

—La misión se trataba de enamorarte y luego robar los papeles, teniendo tu confianza..

La cara de Pablo cambió.

—¿Me dices que estabas conmigo por la misión?

Rápidamente negué.

—Desde el primer día supe que me iba enamorar de ti, y fue cierto—El esquivo mi mirada—. Pablo te amo, Te amo como nunca he amando.

Hubo un silencio.

—Pablo...Tu me amabas...?— pregunté

Otro silencio.

Baje la mirada y suspire.

𝑻𝒓𝒆𝒔 𝒎𝒆𝒔𝒆𝒔 - 𝒈𝒂𝒗𝒊 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora