secret secret. - minsung

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Espero por muchos días tratando de encontrarlo en algún lugar de la prepa, pero lamentablemente el no estaba ahí.

Queriendo obtener una respuesta, se dirigió a la dirección para así ganar algo de información que le sirviera.

— Buen día, directora, ¡pero que guapa que está hoy!

— ¡Lee! Hola muchacho, ya tenía tiempo que no te veía por aquí. ¡Qué guapo estás tú!

— Gracias dire, oiga... quiero hablar con usted sobre algo

— Dígame

Minho acarició sus propios brazos preparándose para hablar.

— Resulta que... me gusta alguien. Y no se nada de ese alguien, es como si hubiese desaparecido de la faz de la tierra

— Oh dios, ¿y ese alguien es...? — Preguntó mientras buscaba en la lista de alumnos para darle la información que quería.

— Han Jisung, de 2A

Al oír ese nombre, la directora supo inmediatamente de quién se trataba.

— Um, ¿Han Jisung? él estuvo aquí en la mañana...

— ¿De verdad? ¿Y que dijo? ¿Porque no ha venido?

— El vino hoy en la mañana para darse de baja de la preparatoria, no me dio explicaciones o razones, simplemente lo hizo

Minho se quedó en shock al escuchar tal cosa, por alguna extraña razón sintió un gran nudo en la garganta. Le dolía pensar que no podría verlo otra vez para pedirle perdón... no podía quedarse así.

.

— La directora dijo que se dio de baja. ¿Que se supone que debería hacer ahora?

— ¿De baja? Eso está rarísimo, ¿tanto le afectó lo que le dijiste?

— ¡Claro que le afectó, Hyunjin, que tonto! Sabes que te quiero mucho Minho, pero te pasaste de la raya con el, lo asustaste tanto que prefirió huir

— Ya ni me lo digas. Me siento terrible. — El pelinegro se quedó pensando. — Lo único que quiero hacer es volverlo a ver y decirle que me arrepiento de todo, quiero intentarlo, quiero intentar todo con el pero hice que se fuera y todo por un chico el cual me termino ghosteando. Maldita suerte la mía en el amor.

— Eso sí. Oye Minho... ¿y qué tal si lo buscas? — Sugirió el pecoso.

— Ah sí, ¿y en dond...

Fue ahí que el pelinegro recordó la pequeña casa en la que vivía Jisung. Estaba orgulloso de haber insistido para acompañarlo. Sonrió al recordar esa vez y en el lindo beso que el rubio dejó en su mejilla.

— Sé en donde buscarlo.