Dagar
Aunque no haya sido el peor día de mí vida, he de admitir que no la pasé lindo.
Bueno... algún momento que otro no fue tan malo, pero en general fue demasiado estresante.
Lo que hice fue una completa locura, aunque, bueno...
Aquí nadie está cuerdo que digamos.El trayecto de ida al castillo real, fue la media hora más estresantes de toda mí vida. El camino se hacia interminable, y con cada paso, mayores eran mis impulsos de esconderme bajo una roca y no salir en una semana.
Por lo menos no estaba entrando por la puerta principal, ni loco me asomaría por allí. Estoy seguro que moriría intentándolo. Tal vez era el hecho que estaba entrando por una puerta que solo el príncipe y yo conócemos, lo que me daba el valor para acercarme al castillo.
Lo que le iba a pedir era demasiado, incluso siendo mí mejor amigo. Estoy seguro que como mínimo me matarían, pero conociendo a su padre, se que el castigo seria algo mucho peor... y... bueno... n-no quiero eso.
Aunque las posibilidades de que el príncipe me matara, fueran nulas, la idea de cómo reaccionaría me aterraba. Y mucho.
Ya en la puerta, el pánico se intensificó por mil. Las infinitas de posibilidades de cómo podría terminar esta locura abrumaban mí cabeza, al punto de no dejarme pensar bien.
Intenté relajarme, pensar con claridad, decirme a mí mismo que todo estaría bien.«Puedo contar con él, por algo es mí mejor amigo, no tengo porqué preocuparme...» Me repetía.
Pero esos pensamientos alentadores se esfumaron cuando empezaron a abrir la puerta por adentro.
En esa milésima de segundo, mí instinto me gritó que me diera vuelta y corra lo más rápido posible, sin mirar atrás.
Y si corrí. Y me incruste la cara en una estalagmita.
— ¡Ahg! ¡¡Mi***a!! Eso dolió.
— Ehhh... Dagar, ¿qué haces?
Me volteo lentamente para ver al príncipe de los demonios viéndome con una cara de "¿wtf?".
Venticinco años, un poco más joven que yo; cabello alborotado marrón chocolate y piel clara. Unos cuernos medianos con una ramificación en el nacimiento de su cabeza. Sus alas eran grandes y amplias como un dragón.
Los ojos amatistas me miraban extrañado, y sus orejas de ciervo se internaron a la derecha.
Estaba de entre casa: buzo violeta, jeans, botas y protecciones de cuero negro.
Al segundo me di cuenta que debía estar actuado súper raro. Eso levantaría sospechas y en serio prefería tener que decirle yo a que lo descubriera por su cuenta. Tenía que actuar ya.
Intenté pensar rápido una buena excusa, pero fue imposible, así que opte por qué mí subconsciente eligiera unas buenas palabras.
— Ehhhh... estaba... ¿probando que tan resistentes son más estalagmitas...?
Frunció el ceño e hizo una mueca más grande.«Okey... Eso fue una excusa mediocre.»
— Dagar, ahora en serio; si es porque papá te dijo algo otra vez, sabes que no dejaré que te haga nada...
— Emm no... no es eso, es que, tengo un problema y...
— Dagar...— Su repentina expresión desconcertada me dejó paralizado— ¿porque a tu mochila le salieron alas?
Una pequeña cabecita colorada empezó a asomarse de mí mochila, dejando ver a un niño de alas blancas con un aro oro levitando por encima.El niño miro curioso, y a mí me dio un ataque de risa por el pánico.
— Ahahahhahahahahjajahaaa... ya mátame Nacho, por favor.
— ¿Pero qué...? Ehhhh... Ahg..., no haré eso bobo..., pero me gustaría que me explicarás que haces con un ángel.
ESTÁS LEYENDO
𝗧𝗵𝗲 𝗛𝗲𝗹𝗹 𝗮𝗻𝗱 𝗧𝗵𝗲 𝗛𝗲𝘃𝗲𝗻 || La ComunidadMC/VillanosMC
Fanfiction⚘ ━─━────༺༻────━─━ ⚘ ➣ AU «Universo alterno» de la Comunidad MC + Villanos MC/Héroes MC ˏˏˏ ➣Los ships no son relevantes en la trama ˏˏˏ ¡ 》Esta historia tuvo un cambio de cuenta y lijeras modificaciones《 ! ☆ ¡¡Disfruta, y gracias por leer!! ☆ ...