Mienteme (traducción)

Capitulo 7: Cuentos y canciones de lo fácil

Jin-Chul no está molesto.

Ni siquiera es una mentira, no está molesto. Sabe que su rostro puede sugerir lo contrario, que nadie está acostumbrado a verlo expresar otra cosa que no sea apatía y que verlo apretar los dientes es, por tanto, una señal de su potencial ira, pero no es así. Realmente no está molesto, ¿cómo podría estarlo? Se maldijo cuando pensó que todo estaría bien. Él sabe cómo son los cazadores de alto rango: si no buscan problemas, los problemas les llegan. Así que no, Jin-Chul no está molesto.

Cansado, exhausto y agotado tal vez. Nada que sea raro, siempre trabaja con más café en las venas que sangre. Pero no está molesto. Incluso la perspectiva de tener que trabajar unas cuantas horas extra para completar los informes no lo molestó; en el mejor de los casos, lo hizo suspirar. Nada mas.

Así que no, Jin-Chul no está molesto.

Pero tenía miedo.

Uno de sus subordinados presente en la puerta lo llamó para decirle que Sung Jin-Woo se había unido al Equipo B como portero, así que fue a ver qué estaba pasando. Cuando sintió las emisiones de maná causadas por la mazmorra en la que había entrado su alma gemela, se asustó: nunca había sentido una mazmorra de rango A tan fuerte, apenas al borde de un rango S. Sabía que Jin-Woo era fuerte, por supuesto que lo sabía, pero aun así se asustó.

Cuando Jin-Woo usó su poder ( nigromancia , susurró su mente, como un murmullo), otra forma de miedo se apoderó de su cuerpo. Oh, no el miedo a su alma gemela, lo vio con un bigote hecho de leche y crema cuatro veces antes de eso, y nunca más pudo asustarlo. No, tenía miedo por él , tenía miedo por Jin-Woo, porque Jin-Chul sabe cómo funcionan las cosas.

Nada es gratis en este mundo y Jin-Chul tiene miedo de saber lo que su alma gemela tuvo que sacrificar por este poder.

Jin-Woo se deja guiar hasta la salida de la mazmorra, saluda a algunos mineros y no protesta cuando Jin-Chul lo conduce a su auto. Lo distingue de todos los cazadores de alto rango con los que ha tenido la oportunidad de trabajar: Jin-Woo no le impone nada, sigue su ritmo sin quejarse (pudo, y Jin-Chul no pudo hacer nada al respecto, cualquier cosa para prevenirlo).

Jin-Woo tenía la cara cerrada desde que le devolvió la vida al jefe de la mazmorra. No había dicho una palabra, e incluso sus pasos eran silenciosos. Si su torso no se agitara constantemente, Jin-Chul podría incluso creer que no estaba respirando. No se ve enojado, no se ve cansado, solo apático.

"¿Colocaste una de tus convocatorias en mi sombra?" Jin-Chul termina preguntando, para romper el silencio, porque el camino es bastante largo.

"No." Jin-Woo responde y no da más detalles.

Está jugando con las palabras. Jin-Chul sabe en el fondo que tiene un soldado en su sombra en este momento, una parte del poder de su alma gemela reside dentro de su sombra. Pero Jin-Woo no puede mentir. Piensa en la pregunta que acaba de hacer y busca posibles lagunas que Jin-Woo pueda haber encontrado.

"¿Pusiste al menos una de sus convocatorias en mi sombra?"

Los ojos de Jin-Woo se posan en él y, aunque su mirada es pesada, se divierte. Por unos segundos, Jin-Chul no tiene respuesta y termina pensando que no tendrá ninguna. Está bien, no tener una respuesta es una muy buena respuesta por sí sola. Finalmente, para su gran sorpresa, su alma gemela se digna a responderle.