Se que lo que siento por el está mal pero...
Mi corazón no deja de amarlo.. tengo una enfermedad que es imposible de curar
☕︎ 𝑀𝑎𝑙𝑒 𝑂𝑐 x 𝐻𝑜𝑤𝑙 𝐽𝑒𝑛𝑘𝑖𝑛𝑠 𝑃𝑒𝑛𝑑𝑟𝑎𝑔𝑜𝑛
𝐈𝐧𝐭𝐞𝐧𝐭𝐨 𝐡𝐚𝐜𝐞𝐫 𝐮𝐧𝐚 𝐡𝐢𝐬𝐭𝐨𝐫𝐢𝐚 𝐡𝐨𝐦𝐨𝐬𝐞...
Ese sacerdote me miraba mientras con una biblia en mano comenzaba a "maldecir" mi existencia... lamentablemente no podía prestarle atención ya que para mí fortuna, había un atardecer muy precioso ante mis ojos..era como ver a un ave ocultarse poco a poco en la sombra de las montañas dando paso a una obscuridad llena de bellas estrellas... ¿Cómo se sentirá tocar una? De niño pensaba que las estrellas eran pequeñas aunque no tanto como para caber en la palma de tu mano si no del tamaño adecuado para cargar tu cuerpo y llevarte a volar con ellas; como si fueran hechas de un cristal que se encendía como una lámpara..¿Serán de diferentes colores o todas serán blancas y amarillosas? Me gustaría vivir en una de ellas, así ya no tendría miedo a la oscuridad nunca más y también en su lomo podría ver miles de atardeceres pasar uno más hermoso que el anterior...
Aunque...sería muy solitario también.
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De pronto escuche un estruendo que me sacó de mi bella imaginación, era el sonido de la madera encendiéndose poco a poco..de nuevo mi mente volvió a la realidad.
- ¡Rezaré para que Dios te envié al infierno maldito demonio! - mencionó el padre de iglesia mientras extendía una cruz hacía Haru el cual miró bajo sus pies como poco a poco la madera se encendía -
Se sentía cálido...la madera fría poco a poco comenzaba a arder y a iluminarse haciendo que mientras pasaban los minutos el calor comenzará a sentirse más como un ardor en mis pies. El fuego comenzaba a saludarme, su color amarillento me hacía recordar al cabello de mi amo Howl, igual de hermoso que el sol...
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Narrador omnipresente
Aquel monstruo de plumas azules corrió hacía la celda solo para darse cuenta de que no había nadie allí además de las hermosas rosas que la cubrían. La bestia aún más alarmada y guiada por el olor y cenizas rompió la puerta trasera del castillo sin importarle el desastre, desplegó sus enormes alas y comenzó a volar buscando al chico.
