A tus órdenes | Jujutsu Kaisen ~ Gojou Satoru

𑁍 Cap. 1 | Intercambio.

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Era una mañana tranquila, estabas terminando de arreglarte para ir al aeropuerto e iniciar tu nueva vida en una nueva escuela; la cual se encontraba en Japón. Estabas nerviosa porque no sabías que te esperaba, tal vez una vida solitaria o una muerte segura, no sabías casi nada de esa escuela; solo sabías dos cosas, ellos también tenían lo que pensabas que eran dones y había muerte segura si no te adaptas bien.

Ibas saliendo de tu departamento en camino al aeropuerto, si bien tenías tiempo de sobra y llegarías temprano; querías disfrutar tus pocas horas en ese lugar que conocías como hogar. Al llegar al aeropuerto veías demasiado gente, cosa que no era de tu agrado porque te sentías sofocada; decidiste quedarte afuera hasta que bajara la multitud que había dentro, pero observaste algo.

- ¿Qué es eso?, es una de esas criaturas extrañas. - pensabas mientras te dirigias a la criatura.

La criatura parecía un gusano raro; se veía debilitado y tratando de huir de algo o alguien.

- Sería una lastima que siguieras sufriendo, creo que es mejor que termine con el trabajo de alguien más.

Decidiste pisar a la criatura, pero cuando estabas a punto de hacerlo algo te lo impidió; era una fuerza extraña y escuchaste una voz femenina atras tuya.

- Me sorprende que alguien más vea maldiciones aquí, es bueno saber que no soy la única.

Al voltear observaste a una chica pelo negro rebasando un poco sus hombros y con una vestimenta que se parecía a tu uniforme.

- ¿Maldiciones?, así que, ¿estás cosas se llaman asi?

- Sí, ese nombre recibieron por parte de los hechiceros. Se me hace raro que puedas verlas y ni siquiera tengas idea de su simple nombre.

Mientras la chica pelinegra decía esas palabras movía hacia enfrente su mano hasta cerrar su puño, al instante de cerrarlo la criatura empezó a arder en una llama color azul hasta el punto de desvanecerse.

- ¿Qué truco es ese? - decías mientras volteabas al lugar donde estaba la maldición.

- Se llama energía maldita, ahora dime...¿cómo es que puedes verlas?

- Ni si quiera yo se el porque puedo verlas, por eso me ire de aqui para descubrirlo...aunque ahora que lo pienso, ¿cómo es que llevas un uniforme casi parecido al mio?

- El uniforme es la institución donde pertenezco, por curiosidad, ¿vas a Tokio?

- Si, ire a Tokio...¿acaso sabes a donde voy?

- Por coincidencia voy a Tokio también, si iras a la escuela de hechicería...podemos ir juntas, van a pasar por mí.

- Se me hace demasiado raro que invites a una completa desconocida a ir contigo.

- No me preocupa siendo sincera, puedo matarte en cualquier momento. Eso si, vas a tener que ponerte el uniforme para que sea más fácil identificarte.

- Esta bien, me ire a cambiar.

Al terminar de hablar te dirigiste al Sanitario para cambiarte al uniforme que te habían mandado; el cual consistía de unas botas largas color cafe, mallas negras, una falda color azul marido; casi pegando a negro que llegaba un poco debajo de la mitad de tu muslo, una camisa blanca y una tipo chaqueta que llegaba un poco arriba de tu cintura; era del mismo color que la falda, de decoración tenía 2 botones distintivos.

Al salir te encontraste a la chica pelinegra, la cual te haria compañía para ir a esperar el vuelo e irse a Tokio, empezaron a hablar un poco sobre cada una para mejorar un poco la confianza y que nadie se arranque la cabeza. Descubriste que su nombre es Aiko Fushiguro y que su hermano estudia en 1er grado y ella en 2do.

💠 | 3 horas después

Pasaron 3 horas y ya podían abordar el avión, a ambas les tocó un poco lejos; pero acordaron verse en la salida del aeropuerto para irse juntas a su destino.
Sentías una gran emoción pero a su vez unos grandes nervios, el futuro era increíblemente desconocido pero a su vez demasiado prometedor.