Donde una kook regresa a Outer Banks y conoce a cierto grupo
ó
donde un grupo de amigos busca un tesoro perdido.
❝ 𝖺 𝖩𝖩 𝖬𝖺𝗒𝖻𝖺𝗇𝗄'𝗌 𝖿𝖺𝗇𝖿𝗂𝖼 ❞
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Obra perteneciente a @Batirayis_
Ambientada en la serie Outer Banks
Actualizaciones l...
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chapter one ｡･::･ﾟ,｡･::･ﾟ „ said "i'm fine" but it wasn't true”
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Giselle no había aprendido la lección.
Estaba ebria de nuevo.
Pero nadie la podía culpar, su padrastro le habia dicho que era una carga para todos, que su padre no la quería y, además, estaba evitando a su medio hermano y amigos desde hace casi una semana.
Sus planes para ese verano era pasarla al 100 con sus amigos y mejorar su relación con su madre, pero la vida le había dado una gran batalla que no se sentía capaz de luchar.
A pesar de tener alcohol en su sistema no se veía alegre, no poseía aquella chispa con la que la habían visto antes, el brillo de sus ojos había desaparecido y tenía su vista perdida en el horizonte del mar.
De vez en cuando soltaba unos suspiros cargados de tristeza, pero nadie la escuchaba, estaba sentada en la costa, con los pies enterrados en la arena.
Creía que aunque estuviera a media fiesta y gritara nadie la escucharía, solo verían a la chica que se escapó de casa para vivir en Mónaco, demasiado rica como para tener problemas.
No creía que alguien entendiera como se sentía, por que ni ella lo sabía.
En un momento se sentía de la mierda y al siguiente menospreciaba sus propios sentimientos diciendo que solo quería llamar la atención.
Olliver le decía aquello cuando era chica, y ahora creía que era verdad, cada vez que se sentía mal se repetía a si misma que solo estaba intentando llamar la atención y que lo que sentía no era verdad.
No le gustaba aquella sensación de vacío en su pecho, luchaba cada que aparecía, cuando sentía que aquella sensación se aproximaba se apresuraba a ocuparse con algo, alguna fiesta para embriagarse, se metía de lleno a trabajar, se ponía a surfear, pintaba, bailaba, estudiaba, lo que sea que fuera suficiente agotador como para no sentirse mal.
Tal vez por eso sabía hacer muchas cosas, porque su nula estabilidad mental la obligaba a llenar sus vacios con actividades.
No escuchaba el sonido de la fiesta en la que estaba, estaba sumergida en sus pensamientos, pensando en todo y a la vez en nada.
