❕️ : esto es una adaptación, se prohíbe su copia sin el permiso de su autor/a original
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♡ ㅤ𝓹𝗋𝗈𝗅𝗈𝗀𝗎𝖾ㅤㅤ⠀⎯⎯⠀⠀⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀𝗍𝗈𝗆𝖺́𝗌ㅤ﹠ㅤ𝗀𝖾𝗋𝗆𝖺́𝗇
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Si tuviera que describir todas las emociones que siente cuando aquel muchacho le habla, con una sola palabra, elegiría repugnante.
Y es que odia por completo todo lo que el joven costarricense provoca en él, es como si un huracán desordenara todos sus pensamientos cada vez que el peli-marrón se acerca.
Germán Delgado es su nombre, asiste a la misma clase que él, se conocen desde hace tres años. Y aunque han hablado algunas veces, no han sido las suficientes como para conocerse, ya que Tomás evita estar cerca del muchacho a toda costa.
Por eso, en este preciso momento, ya terminado el periodo de clases, un Tomás pelicafé se apresura para irse lo antes posible. Ya que sabe que si se tarda mucho, Germán le dirá de tomar el bus en la misma parada. Antes no tenía problema en aceptar la propuesta, pero desde que comenzó a ver pequeños destellos alrededor del menor supo que algo estaba mal y huyó, aún así el alto no se rendía fácil, por lo que el tatuado optó por irse antes de que el otro muchacho lo pudiese interceptar.
Así que hoy, como todos los días, guardó todo en su bolso y agarró a su mejor amigo del brazo para irse de allí lo más rápido posible.
Rodrigo ya estaba acostumbrado al comportamiento de su mejor amigo, por lo que no se quejaba ni nada, solo lo seguía. Sabía que luego podría burlarse de él.
Cuando salieron del establecimiento se relajaron un poco.
—¡Tomás! —escuchó tras de sí, el joven mencionado dio un respingo—. ¡Tomás, espere!
Se giró rígidamente para encarar a la persona que lo llamaba. Y allí estaba frente a él, un agitado Germán que había corrido tras su encuentro.
Arbillaga hizo una mueca mientras sentía como los nervios lo invadían. ¡Ahora ni su plan de irse antes funcionaba, ¿acaso este chico no se rendía?! En el fondo se sentía culpable, de un día al otro simplemente comenzó a evitar al joven sin razón aparente, y no es que pudiera explicarle tampoco.
—Tomás, se olvidó un cuaderno en el salón y vine a devolvérselo. —dijo el joven con una pequeña sonrisa en su bonito rostro.
Las mejillas del mayor tomaron un color rojizo ante aquel gesto, todo bajo la mirada atenta de Carrera, quien sonreía disimuladamente.
—Gr-gracias, Germán, no tenias porqué molestarte. —dijo para luego morderse la lengua por tartamudear.
—No es molestia, me alegra ayudar. —contestó el otro mientras le extendía el mencionado cuaderno.
Tomás tomó este de sus manos y conectó su mirada con el menor, sintió como si el tiempo de repente se detuviese y destellos dorados lo rodearan. Era mágico.
—Me tengo que ir. —dijo el alto, sacando al otro chico de su trance.
—Oh, claro, nos vemos mañana.
Y dicho esto, el costarricense se fue por su lado, bajó la mirada de Tomás.
—Wow, que cursis son. —se burló el castaño con una sonrisa traviesa—. Admite que te gusta. En el fondo estoy un poco celoso… —susurró lo último.
La cara del tatuado era un poema en esté momento. El más bajo disfrutaba de los fuegos artificiales que parecían explotar en las mejillas de su mejor amigo.
—¿Qué dices? Es una estupidez. —expresó con enojo fingido, intentando disimular sus nervios ante la posibilidad de que eso sea cierto.
El dueño de los ojos esmeralda enarcó una ceja.
—Ahora ni salir del salón antes que él funciona, ¿qué voy a hacer?
—Sí no fueses tan cobarde no tendríamos que pasar por esto. —le recordó su mejor amigo con sorna.
—Cállate. —bufó molesto mientras retomaba el paso para ir a casa.
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En cuanto llegó a su casa se lanzó sobre la cama sin dejar de pensar en lo que Rodrigo le dijo, y es que este tenía razón, y odiaba que él tuviese razón.
Estaba tan, pero tan enojado que no se le ocurrió nada mejor que tomar un papel y un lápiz.
Todos esos sentimientos eran culpa de Germán.
"Tonto Germán."
Pensó Tomás. Y así es como titula la hoja: "10 razones para odiar a Germán", pues aunque estaba seguro de que existían más de diez razones, estas serían la cantidad suficiente para desahogarse.
Y mientras escribe la primera razón, sonríe satisfecho. Por fin había encontrado una forma de dejar salir todos esos sentimientos que llevaba escondiendo durante tanto tiempo.
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aquí una nueva adaptación, es cortita, pero muy bonita, así que ojalá puedan disfrutarla ^^
