15 años antes
El príncipe Kian escapó corriendo apresuradamente de allí. Su cuerpo estaba adolorido, sangraban sus heridas por los golpes y le costaba respirar. Se adentró a un denso bosque y el miedo invadió su ser, todo era oscuro y sentía como si lo persiguieran, pero permanecía corriendo para salvar su vida. En el fondo se encontraba confundido por lo que había sucedido y una pregunta resonaba en su cabeza:
¿Por qué Ariay asesinó a mis padres? pensaba y lágrimas resbalaban por sus mejillas volviéndose gotas de sangre.
En medio del bosque chocó con un hombre y cayó al suelo. Asustado comenzó a retroceder. Este colocó la lámpara de aceite que llevaba consigo cerca de Kian y vio su rostro ensangrentado.
—Niño...¡Estás sangrando! —exclamó alterado—¿Por qué estás aquí?, ¿quién...quién te hizo esto?—preguntaba sin conseguir respuesta alguna.
De la boca del pequeño no salía ninguna palabra; solo su respiración agitada y sus ojos negros que reflejaban el terror que sentía, era lo que podía percibir el hombre.
Debo ayudarlo. Fue lo que pasó por la mente del desconocido.
—No voy a hacerte daño, lo prometo. -dijo y se hincó sobre su rodilla—Mi nombre es Jonah. Voy a llevarte a un lugar seguro.—le extendió su mano— Por favor, confía en mí.
Kian tomo su mano y Jonah lo ayudo a levantarse. Aunque no conociera a este hombre, a él le inspiraba confianza.
—Vamos muchacho, sube a mi espalda. —le dijo con una sonrisa y se agachó para que subiera.
Kian subió a su espalda y entrelazó sus manos en el cuello de Jonah. Pasado un rato de haber caminado, recostó su cabeza en el hombro de este y se quedó dormido. Está acción le causó gracia a Jonah y esbozo una sonrisa en su rostro.
Sin darse cuenta luego de la larga caminata ya era de día y habían llegado a su destino: Sapphir. Ya en la casa de Jonah, el pequeño despertó. Su esposa Danixa abrió la puerta y se encontró con su marido, esperando que trajera leña porque la llegada del invierno estaba próxima. En cambio, este bajó a un niño de su espalda.
—Pero Jonah...ese niño está herido, ¿que le pasó? —preguntó asombrada—¿Quién es este niño?
—Lo encontré en el bosque cuando buscaba leña. Ayúdame hay que curarle las heridas. —respondió.
Entraron a la casa y lo curaron pero notaron algo extraño, Kian vestía prendas que se veían costosas(aún rotas y sucias), como las de un príncipe. Jonah lo observó bien y vio en su cabeza un cilíndro de oro que en el centro tenía un cisne con las alas extendidas, que era el símbolo de Cygnus: "el Cisne en el Cielo"
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El Heredero
RomansaKian Alderige Lee escapa del Imperio Cygnus luego de que es secuestrado por el Primer Ministro, el hombre que asesinó a sus padres. Siendo solo un pequeño de 7 años, llega al reino vecino con la ayuda de un hombre humilde que se hará cargo de él com...