110 | Spreenter

👽; 6

El lugar se encontraba repleto de lava y el conejo gigante por fin había muerto. Todo gracias a spreen, a sus habilidades y a su forma de hacer las cosas.
Logró tomar venganza, pero... ¿Esto era suficiente?
Seguía sintiendo esas punzadas en el estómago, no se trataba de un dolor físico sino mental.

— Spreen! Estoy vivo!  — Gritó el conejo

Se dió la vuelta y encontró a su amigo salvo y sano, aunque todavía tenía el palo en la cabeza.
Se acercó y le dió un gran abrazo, de esos abrazos que jamás se olvidan.

— Todavía hay que encontrar tu memoria, nose como estas aca de nuevo, pero eso quiere decir que es porque mate al conejo o algo asi — miró a todos lados en busca de una pista

— Que tal ese cofre? Tiene una piedra brillante debajo — señaló

Su vista su puso en ese cofre, Conter podría a llegar a tener razón en que su memoria estuviera allí.
Tan rapido como pudo, sin importar los conejos y los mobs salto en busca de ese cofre.
Como es alguien de pensar, tras abrir el cofre y agarrar la memoria uso una perla de ender.
Su respiración estaba agitada pero había valido totalmente la pena.
Conter se encontraba en el aire, estaba siendo cubierto por una especie de estrellas blancas. El palo de su cabeza desapareció y cayó acostado cerca de el.
No despertaba y ya tenían que irse porque saltó una alerta de que la cueva se iba a derrumbar.
Con todas fuerzas lo alzo a upa y corrió todo lo que pudo hasta llegar a la base de el.

¿Como puede ser que todavia no despierte?

Acomodó una cama y lo acostó. Se puso a cultivar unas cuantas papas y siguió acomodando la base.
Luego de un rato escucho como alguien se movía. Miró hacia la cama y conter estaba empezando a despertarse.

— Mhhhg ¿Donde estoy? — Se refregó los ojos

— Conter despertaste estaba muy preocupado — Lo abrazo

S..spreen? — El conejo separó el abrazo — ¿Eres tú?

— Si, porq... —

Sin poder responder, sintió como sus labios estaban pegados a los de conter, el conejo lo había besado. No sabía como reaccionar, ¿Cómo puede ser que lo este besando?. Por inercia siguió con el contacto del contrario hasta separarse.

— Pensé que jamás te volvería a ver osito — Sonrió y lo abrazo

No sabía que hacer o decir, ¿Había algo que no recordaba?.

Solo se dedicó a seguir el abrazo.