⋆⭒˚｡⋆ Amarnos es imposible { Robin Buckley }

Cap 1. "Meet you"

Era temprano por la mañana, mi hermano Steve me despertó para ir a la escuela y desayunar. Un inicio completamente ordinario.

- Hey, dormilona, levántate, no querrás llegar tarde a la escuela denuevo — bromeó mientras me sacudía con un poco de fuerza.

Me desperté y me levanté con una expresión de emoción y descanso, para ser un lunes por la mañana, estaba bastante enérgica.

- Hhm... — me estiré y miré a mi hermano con una sonrisa en el rostro —

- Vaya que te levantaste de buen humor — rió levemente, sacudió mi cabello despeinado y me devolvió la sonrisa.

- Sipi — dije feliz — ¡Ahora sal de mi cuarto que tengo que arreglarme! — me levanté y lo empujé hasta la puerta, cerrándola con candado y yendo a escoger mi outfit del día.

Me puse un short de mezclilla de tiro alto con un cinturón de color negro y una camiseta de tirantes con líneas horizontales de colores blancos y cafés. ¡Era un atuendo espectacular!, estaba segura de que a mi novio Billy le encantaría. Luego de ir a maquillarme un poco y arreglarme el pelo, tomé mi mochila y bajé a la cocina, donde estaba Steve esperándome con el desayuno. Mis padres se fueron a un viaje de negocios y nos dejaron aquí en casa solos, pero con la supuesta "supervisión" de mi hermanito mayor, no fue difícil convencerles de que íbamos a estar bien.

- Hasta que terminas. — dijo mientras terminaba de prepararse un café y volteó a verme — ¡Te ves muy linda, hermanita!. Aunque no sé qué tanto te haces si yo te veo igual. — bromeó y soltó una corta carcajada —

Estar con Steve me hacía sentir bien, era muy gracioso y me hacía reír mucho.

- ¡Ay!, ¡pues son cosas que me gusta hacer!, y ya, aparte, qué vas a saber tú de mi cambio al arreglarme. — lo miré haciendo un puchero combinado con una cara de enojo.

- Ya, ya, hermanita — me sacudió el pelo y tomó un sorbo de su café. — Desayuna porque se te va a enfriar la comida y se nos hace tarde para llevarte a la escuela, anda. — ordenó de manera dulce mientras señalaba mi plato de comida.

- Ok! — sonreí y empecé a desayunar.

Luego de media hora terminé de comer y miré el reloj.

- Ya termi- ¡STEVE!, YA ES TARDE, ¡VÁMONOS! — ordené mientras me levantaba de la mesa y recogía mi plato; tenía que llegar a una hora exacta a la escuela para que Billy no se molestara, la vez anterior se molestó bastante conmigo, pero luego me pidió disculpas con un ramo de flores...

- Pero si aún faltan 20 minutos... - dijo extrañado.

- Cierto. Pero tengo que llegar más temprano porque... — estaba buscando una excusa, no podía decirle a Steve que Billy me iba a hacer algo si no llegaba a la hora que me dijo; es capaz de ir a golpearlo — ¡tengo que ir a terminar un trabajo con unas amigas!

- Oh, bien. En ese caso, vámonos — se levantó, tomó las llaves del auto y nos fuimos. El camino fue silencioso y tranquilo.

En cuanto llegamos ví a Billy fumando un cigarrillo mientras se recargaba en una pared de la escuela, le sonreí sin obtener respuesta alguna de su parte. Entonces me decidí a despedirme de Steve para ir con él. Pero antes de eso, fui interrumpida por el mismo.

- Hey, Mills, ¿segura de que están tus amigas?, no quiero dejarte sola con ese tipo de allá, puede ser peligroso... — me miró con angustia y miedo —

Olvidé mencionar que Steve no sabe nada de mi relación con Billy, él mismo me ha dicho que de preferencia no ande con novios, porque el piensa que los chicos de mi edad son peligrosos, pero se equivoca. Mi Billy es muy lindo.

- Tranquilo, hermanito, quedé de verme con ellas en unas bancas más adentro, yo me bajo aquí, tú vete y haz tus cosas. ¡Adiós! — me despedí con un beso en la mejilla.

- ¡Con cuidado!, ¡te quiero! — gritó desde la distancia y una sonrisa se plantó en mi rostro al escuchar esas lindas palabras provenientes de mi hermano. Al igual que me daba mucha felicidad ver a Billy denuevo.

- Hola, preciosa~ — saludó y no tardó en dirigirse a mí tomándome de la cintura, se notaba en su mirada que estaba celoso...

- Hola, cariño! — respondí alejándome un poco de su agarre, me estaba lastimando.

- No soporto ver cómo ese idiota de tu hermano te trae a la escuela. — Comenzó a besarme bruscamente y yo sólo podía corresponder su beso.

Pasaron los minutos y sonó la campana, todos debíamos ir a nuestras clases, no tenía clases con Billy, ni con sus amigos, pero ese era el único momento en el que podía estar en paz. Sin presiones por verme perfecta. Cuando estaba a punto de entrar a mi clase, topé con una chica que venía en dirección contraria. Haciendo que todos nuestros libros salieran volando.

- ¡PERDÓNAME!, venía muy distraída la verdad... — dije mientras recogía mis libros y me cercioraba de que nadie me hubiera visto.

- Tranquila, linda. Fue un accidente, admito que yo estaba algo distraída también — respondió de una manera muy cálida y amable mientras de igual manera recogía sus libros. Aunque se le notaba algo nerviosa y se había puesto roja como tomate, no dejaba de hacerme sentir cómoda con su desconocida presencia —

Su voz me transmitió mucha paz y volteé a verla. En cuanto levanté la mirada, ví a una chica de ojos claros y lindas pecas frente a mí. Luego de unos segundos, ambas nos levantamos y nos miramos la una a la otra por 5 segundos.

- Milo Harrington — extendí la mano — "Mills" para los amigos — sonreí.

- Un gusto, Mills... — dijo bastante sonrojada y tomó mi mano — Robin Buckley, a sus órdenes, bella dama.