❝ No me importa lo complicado que sea esto, te quiero. Me alegro de haberte conocido, espero que lo sepas ❞
Las leyendas x lectora
La leyenda de La Nahuala ✔️
La leyenda de La Llorona ✔️
La leyenda de las momias de Guanajuato ✔️
La leyenda del Chup...
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Jade se encontraba en una situación difícil, atrapada entre la espada y la pared. El comportamiento escandaloso de sus amigos estaba afectando seriamente su cordura. Esto la llevaba a preguntarse por qué no se había ido con Leo o por qué él no la había llevado consigo.
Debido a los insultos de Alebrije hacia la mujer de Don Andrés, todos se encontraban ahora frente al juez, quien tendría que determinar si serían encarcelados o puestos en libertad una vez que se demostrara su inocencia.
—Que paso aquí? —inquirió el magistrado con una voz muy fatigada, como si en realidad no deseara estar presente
—Mire, su excelentísima, se acusa a los diételos de alterar el orden público, abuso de confianza y, y, y, y vi robarse 3 mandarinas —Balbuceó uno de los guardias mientras señalaba al grupo de cazafantasmas
—Protestó señor juez —interrumpió Alebrije frunciendo el ceño —Aquí nadie se robó nada, eh. —Jade estuvo de acuerdo mientras Evaristo se aclaraba la garganta sin ninguna vergüenza
Jade y los demás dirigieron su mirada hacia Evaristo, quien sin ninguna timidez sacó tres naranjas de sus bolsillos.
—Ay, al cabo que ni quería —dijo Evaristo, despreocupado y sin mostrar ningún interés o vergüenza mientras sostenía las mandarinas —Son transgénicas
Jade se lamentaba sinceramente de haber aceptado a Evaristo en el equipo sin reflexionar. Sin embargo, sus amigos siempre le ocasionan dificultades, y ya tenía suficiente con ellos.
—Estos, estos tipejos abusaron de nuestra buena voluntad y mancharon el honor de mi princesa —Comentó el progenitor de Gloria mientras los presentes a las afueras observaban con asombro, parecía como si el grupo estuviese actuando debido a la gran cantidad de curiosos congregados frente a la prisión
—Y por que no trajo a su princesa? —Inquirió el magistrado con sorpresa, arqueando una ceja
—Aquí señor juez —Gloria levantó tímidamente la mano en medio de la multitud de personas
—Madre de Dios. Y quien fue el valiente... digo, este, perdón, quien fue el que jugó con el amor de esta princesa? —cuestionó el juez corrigiéndose a sí mismo antes de seguir insultando a Gloria por su apariencia
—El anciano —El hombre de sombrero respondió mientras, afuera, la multitud empezaba a hablar entre sí con sorpresa —Se está burlando de todo
—Orden! Orden!
—Mire, con todo respeto, hermano de luz, todo esto ha sido una confusión. Limpiemos el Aura. Voy a llevar aquí a mis brothers con el mejor brujo, el mejor vidente y gran hechicero que puede ver el pasado, interpretar el presente, acá ver el futuro, acá —Empezó a explicar Evaristo con tranquilidad, intentando también evitar una futura condena
