La primera de invierno - Gavi & Pedri

10. Pedri está muy bueno.

Hola bebés, espero por favor que me tengáis comprensión, no es fácil mi situación de gestionar mi pérdida y de no dejar de escribir pues mi sueño es convertirme en la escritora famosa que deseo ser. No lo dejo, sólo necesito comprensión. Igualmente, ahora estoy intentando ponerme más con ello de nuevo para conseguir mi sueño, se lo prometí a mi mamá y es lo que haré.

Así que por favor, votad, comentad y compartid la historia ❤️

También os sigo recomendando mi novela MALA FAMA y LA CHICA CON EL ALMA DE HIERRO, ambas son intensas (una más delicada, la otra es más espiritual de almas gemelas), pero os prometo que si os gusta esta, esas las vais a amar. ❤️

Y algo que quería hacer... este capitulo es especial para mí, véase por qué:

MAYA (❤️)

Mamá se pasa el día haciendo pastelitos cuando termina de trabajar. Papá ordena los cientos de libros de las estanterías siguiendo un patrón distinto cada vez. Yo me limito a seguir los movimientos de Pedri gracias a Twitter. Todos necesitamos mantenernos entretenidos para no volvernos locos en esta casa gracias a Logan.

Miro por la ventana por decimocuarta vez en una hora, el coche de la policía secreta sigue aparcado en la entrada y eso me permite volver a coger aire y tranquilizar mi ansiedad.

- Cariño, no se irán de ahí hasta que no le detengan. Ya tienen un motivo para atraparle y volver a encerrarle por un tiempo.

- Hasta que vuelvan a soltarle -reprocho.

- Cada vez tiene más historial de reincidente, eso le sumará más tiempo en prisión -añade papá.

- Aún así, saldrá. Todos lo sabemos.

- Sólo necesitamos algo más... fuerte -mamá se mantiene "positiva"-. No lo sé, algo que determine la prisión permanente revisable.

- Para eso tendría que matar a alguien, y nadie aquí quiere que tenga que llegar a ese extremo para conseguir esa condena -sentencio. Ambos quedan en silencio.

La cruda realidad.

Con veinte años, no debería estar preocupándome por mi integridad física, tampoco por la de mis padres. Tendría que preocuparme por cuál vestido me pondré en la gran fiesta de fin de año, no en rezar cada vez más seguido para que lo atrapen antes de esa fecha para que pueda asistir de forma segura.

- ¿Cuándo es el próximo partido? -pregunta papá.

- Mañana -respondo-. Creo que harán algo en el centro de la ciudad, lo pondrán en una gran pantalla.

Mamá y yo permanecemos calladas. Salimos para lo justo y siempre escoltados, pero aún así, el miedo es incesante y agotador.

- Habrá mucha gente, lo pasaremos bien. -Mamá es la primera que se atreve a pronunciarlo, yo cojo una bocanada de aire.

- Precisamente por ser tanta gente, sería peligroso. ¿Y si le hace daño a alguien inocente? -formulo.

- Nosotros también somos inocentes. -Mamá mete la bandeja en el horno y se sienta en el sofá mientras controla la hora.

Papá permanece pensativo antes de mirarnos a ambas intercaladamente y de proceder a hablar:

- La policía explicó que si estamos encerrados siempre, Logan sabrá que aquí estará vigilado y no se atreverá a actuar, no lo cogerán nunca, habrá más posibilidades de que ande vagueando por la calle tanto tiempo que acabe haciéndole daño a alguien para sacarle dinero. Si salimos, organizarán una redada y en cuanto intente acercarse a nosotros lo más mínimo, lo cogerán. Yo... estoy harto de tener miedo de mi propio hijo.