Convirtiendo a Todoroki Shoto en un malcriado

#015

*En el comedor privado con los Yaoyoruzu*

— Padre, a decir verdad... ayer por la noche tuve que hacer algunas rondas de vigilancia durante la cena y... escuche a varias personas quejarse de Tn con el señor Muller, creo que eran trabajadores del centro de investigación, ¿sabes a qué se debe?

El Yaoyoruzu mayor estaba sorprendido con la declaración de su hija y antes de responder, pensó cual podría ser la causa, por unos minutos.

— Yo también he escuchado varias quejas... Tengo entendido que son principalmente porque piensan que Tn-chan los mira por debajo del hombro, no los deja participar en la elección de proyectos y canceló muchos de los que ya estaban en marcha o los transfirió a otro equipo sin explicación alguna, además de reducir el presupuesto mensual que se asignaba a cada departamento para el mantenimiento de maquinaria e instalaciones y-

Todavía no terminaba de contar todo lo que había escuchado, pero se detuvo, al notar que las otras dos personas no lo miraban de buena manera.

— A-al menos eso fue lo que me dijeron.

Decía mientras apartaba la mirada para tomar agua.

— ¿Todo eso es realmente grave?

Pregunto la azabache a su padre.

— Tn es tan impredecible como su abuelo, es imposible saber lo que están tramando... Por otro lado, creo que el personal solo estaba acostumbrado a la forma de dirigir que tenía Raban (el ex director Muller), así que es normal para ellos resentir el cambio.

"Respondió" la pregunta de Momo.

— El director Muller es muy bueno en su trabajo, ¿por qué no le pides que ayude a Tn?, tal vez pueda darle unos consejos y cambiar la relación que tiene con los demás científicos.

— En realidad, las cosas podrían solucionarse de una manera muy sencilla, el verdadero problema es que Tn-chan quiere hacer todo sola y no acepta críticas de las personas con más experiencia... Escuche que muchos la llaman dictadora.

— ...

El mayor guardo silencio, para después soltar un leve suspiro, ya que también había escuchado ese tipo de apodos.

— Entonces, ¿por qué no intentamos hablar con el abuelo?

— Tío trato de tocar el tema antes de que Momo nee-san llegara, pero... las cosas no terminaron muy bien.

Explico Uzui, ante el silencio del Yaoyoruzu mayor.

— Al abuelo le es difícil aceptar ese tipo de palabras de tu parte, debido a los problemas que han tenido antes, pero... quizá si Uzui-kun y yo hablamos con él, pueda cambiar de opinión y hablar con mi hermana.

Momo.

— Por el momento, dejemos todo como esta y veamos cómo se sigue desarrollando la situación...

— ¿Estás seguro padre?, ¿qué pasa si todo empeora?

— No te preocupes Momo, incluso si eso pasa, ya hallaremos la forma de solucionarlo.

Trato de apaciguar la preocupación de su hija, acariciando un par de veces su cabeza.

*Habitación de Yaoyoruzu Tn*

Había pasado un largo rato desde que el doctor abandono la habitación.

Cuando se sintió mejor, Shoto le pregunto a Keiji por el itinerario que antes le habían comentado, pero el asistente de la verdadera Yaoyoruzu le dijo que no se preocupara, debido a que se había cancelado y que podría descansar tranquilamente el resto del día.

El chico en el cuerpo de la chica, pensó que la repentina cancelación de todo el cronograma había sido por su culpa y no pudo evitar sentirse mal.

'La señorita Yaoyoruzu está haciendo todo tipo de cosas a las que no está acostumbrada para cuidar mi cuerpo, pero aquí estoy yo, enfermándome del estómago cada vez que como, por culpa de mi gula...'

Pensaba, mientras veía la habitación en la que Tn trabajaba.

De repente, recordó que le habían hablado de una presentación que tendría lugar a las 6:30 de la tarde.

Miro el reloj.

"5:52"

'Aún hay tiempo.'

Keiji se había ido a comer. No sin antes, advertirle sobre no molestar a la señorita Yaoyoruzu, es por esa razón que todo ese tiempo, había estado sentado en sala de la suite sin causar problemas, pero ahora que notaba el buen tiempo, pensó en ir a buscarla.

'Me siento bien, así que no hay necesidad de cancelar todas las reuniones programadas.'

Pensaba para sí mismo, mientras se acercaba a la habitación donde la verdadera Yaoyoruzu estaba trabajando.

— Seño-

Ni siquiera había tocado la puerta, cuando repentinamente, escucho un grito, seguido del sonido de varios objetos siendo arrojados.

Su instinto de héroe actuó más rápido que su cabeza y antes de que pudiera pensarlo, ya había abierto la puerta.

— ¡Jajajajaja!, esto debe ser una jodida broma ¿¡Cómo se atreven a opinar cuando ni siquiera han puesto un pie en ninguna de las sedes del centro!?, ¿qué Muller es mejor que yo trabajando?, ¡tu estúpido amigo maquillaba todos los balances generales de todos los putos trimestres casi un año después de ser nombrado director!, ¿piensan que el abuelo y yo somos estúpidos?, ¡ellos son aún más imbéciles por opinar de temas que ni siquiera conocen!

Gritaba, maldecía y se quejaba mientras tiraba todo lo que se cruzara en su camino, sin notar que una segunda persona la estaba viendo.

— ¡Ninguno de ustedes bola de ineptos quiso hacerse cargo de la empresa familiar!, entonces ¿¡Por qué ahora que yo estoy trabajando, quieren meter sus narices en la mierda que no-!?

El berrinche se le quedo atorado en la garganta, cuando volteo para arrojar un jarrón y vio que Shoto la estaba mirando.

— ...

— ...

Se miraron mutuamente un par de minutos en silencio, hasta que el intruso hablo.

— Escuche... un grito y entre pensando que algo malo había pasado, no quise interrumpir de esta manera.

Se excuso tranquilamente, restándole importancia a lo que acababa de presenciar.

Entonces, Tn bajo el jarrón y lo puso en su lugar.

Naturalmente, la presencia de Shoto no era bien recibida en ese momento y de no haber sido por la situación actual, le habría dicho hasta su causa de muerte, pero al ver su cuerpo original, mirándola de esa manera, le hizo sentir escalofríos y rápidamente regreso en sí.

— Ya veo... ¿Keiji no ha regresado de comer?, ¿necesitas algo Shoto-san?

Pregunto levantando la tablet del suelo, para después sentarse en el sillón del pequeño estudio, ignorando los vidrios que había en el piso y la mancha de agua que había mojado una parte de la alfombra y sillón. Como si nada hubiera pasado.