Contenía mis lágrimas lo más que podía por la noticia. No podía creer lo que estaba escuchando. El cardenal del pueblo me había pedido en matrimonio hacía mucho tiempo y mis padres nunca me dijeron nada. Yo solo he sido un negocio. Un cerdo que engordan para luego llevar al matadero. Me alimentaron y me habían dado techo para luego venderme a aquel viejo asqueroso que quería tomarme por esposa.— No quiero. — solté.
— ¿Qué fue lo que dijiste?. — sus cejas levantadas me dieron a entender que se estaba enfadando pero tenía que hablar o perdería mi libertad.
— Que no estoy de acuerdo, yo no voy a ......— un fuerte golpe me hizo caer al suelo.
Sentía mi cabeza dando vueltas. De mis ojos brotaban montones de lágrimas empapando mi cara y mojando mi vestido. Aquel hombre que decía ser mi padre me había propinado una bofetada muy fuerte en el rostro provocando que mi labio sangrara un poco.
— Para ya de llorar, que no puedes ir echa un desastre. Parece que se te olvidó quien manda en esta casa.
— No tienes porque tratarla así, es tu hija. — me sorprendió escuchar a mi madre defendiéndome por primera vez.
— Esta afrenta la pagarás caro. — la tomó fuertemente del brazo haciéndole unos feos moretones en su perfecta y blanca piel.
En ese momento entró en nuestra casa un señor preguntando por mi.
— Estoy esperando por la chica que vive en este lugar. ¿Dónde está?.— recorría mi hogar con la mirada hasta que clavó sus ojos en mi.
— Aquí está señor. — mi padre me agarró de la mano y me llevó ante ese hombre.
— Mmm— comenzó a examinarme. — piel clara, cabello rubio, ojos azules, muy hermosa. Definitivamente mi señor tiene buen gusto. Me la llevaré ahora mismo.
Fui empujada por mi padre hacia ese desconocido y forzada a irme con él. Decidí no rogar,sabía que no me valdría de nada, solo quedaba aceptar mi destino. Antes de subirme al carruaje que me esperaba eché un último vistazo al que había sido mi hogar por tantos años, a pesar de todo no podía sentir más que alivio. Los recuerdos felices se esfumaron luego de la muerte de la abuela. Me iría del lugar donde había sido infeliz este último año.
Por el camino no podía evitar pensar lo que me depararía el destino. Me mantuve callada todo el trayecto. Al sentir que los caballos se detuvieron no pude evitar sentirme muy nerviosa. Me abrieron la puerta unas chicas jóvenes dándome la bienvenida.
No podía creer lo que veía. Era una casa enorme en comparación con la mía. La entrada solamente era del tamaño de un árbol. Al mirar en el interior no pude evitar soltar un !!oh!!, aquí podría perderse cualquiera fácilmente. Un amplio recibidor que mostraba unas escaleras de mármol blanco, al parecer conducían al piso de arriba. Muy bien amueblada. Todo muy bonito. Pero la felicidad se fue cuando una voz me hizo recordar lo que hacía allí.
— ¿Cómo pasaste el viaje mi amor?.
Un hombre barbudo y con una túnica ridícula me hablaba desde las escaleras aproximándose a mi.
— Muy bien Gracias. ¿Y usted es?.— aunque ya lo imaginaba debía preguntar por si acaso.
— Soy el cardenal, tú futuro marido.— hizo una reverencia y me besó la mano.
Que asco, juro que casi vomito pero tenía que aguantar, ya encontraría la forma de escaparme de allí.
—¿ Podría descansar en mi habitación ?. Estoy muy exhausta del viaje.
— Claro que si mi amor.— comenzó a tocar una campanilla que guardaba en su túnica para que llegaran las criadas.— acompañen a mi futura esposa a su habitación.
Este señor era de lo peor. ¿Futura esposa yo?, ni loca, tenía que zafarme de ahí rápidamente.
Una de las criadas me guió hacia mi habitación. Era muy bonita, de color azul celeste y tenía todas mis cosas dentro. Que rapidez.
Al fin sola. Era hora de ver lo que mi madre me había entregado. Tomé el misterioso sobre y lo abrí, el papel estaba muy arrugado, no me acordaba de el abuelo, yo era muy niña cuando él murió. La carta decía:
Querida nieta:
Si estás leyendo esto es porque me fui de tu lado y no pude verte crecer. Le dije a tu madre que te lo diera cuando cumplieras 18 años si yo no me encontraba a tu lado. Es muy importante que sepas quien eres para lo que está por venir. Cada 100 años ocurre un fenómeno en el pueblo de Cherry. Muertes y desapariciones inexplicables y solo nuestra familia puede parar ese caos. En el tiempo de mi padre sucedió y yo era un niño pero lo viví en carne propia cuando desapareció mi hermana. Tú linaje es especial mi niña de ojos azules, tú también lo serás. Tienes un gran destino que cumplir y solo tú podrás hacerlo. No puedo darte todas las respuestas que de seguro buscas porque imaginé que todo volvería a pasar en otra generación y resultaría la tuya. Tú debes acabar con el mal de raíz para evitar que todo vuelva a suceder. Eres una chica fuerte, mucho más de lo que crees. Visita mi tumba algún día que allí te esperaré. Suerte mi pequeña.
Tú abuelo
Ahora si que estaba perdida. ¿A qué se refería el abuelo con todo esto?. Yo, ¿linaje especial?. Tenía que encontrar más pistas, pero ¿dónde ?.
Saqué el collar y me dediqué a detallarlo, era un relicario, por fuera tenía un lobo en medio y una letra H, al abrirlo contenía una pequeña llave.
Una voz familiar hizo que me dirigiera hacia la puerta para escuchar.
— Así que trajiste una amante a casa. ¿Cuando pensabas decirme?.
— No es de tu incumbencia. Vuelve a tu habitación. — esa era sin duda la voz del anciano idiota.
— Si lo es, porque te recuerdo que yo vivo en esta casa, papá.
— No te debo explicaciones Alex.
¿Qué fue lo que escuché?. El cardenal tiene hijo y resulta ser el chico que escuché hablar en el bosque sobre las muertes.
Definitivamente el destino está jugando conmigo...
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Buenas buenas, como han estado??. Realmente espero que les vaya gustando esta historia y si es así comenten y regálenme estrellita por favor.
Miren que pequeño es el mundo, nuestra chica de ojos azules se va a casar con el padre del chico que escuchó hablar en el bosque 🤭. Veremos que nos depara el próximo capítulo. Hasta entonces besitos 😘. M🐾
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Little Red Riding Hood The Huntress
FanficLa historia de Caperucita Roja como nunca fue contada. Secretos de la familia saldrán a la luz mostrándonos que nada es lo que parece. La dulce Caperucita se convierte en cazadora de los lobos que tanto mal le hacen al pueblo de Cherry, un total mis...