𝐆𝐀𝐌𝐄 𝐎𝐕𝐄𝐑 | Este juego ha
terminado y no deseo continuarlo.
+18 au moderno/mafia
kny hashiras ;
boys x fem! reader
creada el 1O.O8.23.
@akira_yukimura_
p...
› personaje ; himejima gyōmei 𖥻 advertencias ; sexo sin protección (si preguntan sí, sexo duro).
▸ plot ; pequeños roces aquí y por allá, era evidente que una cosa llegaría a la otra, era tu último día ahí, así que la aprovecharías
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Un suspiro salió de tus labios, sentir las grandes manos de Gyōmei recorrer tu cuerpo te daba un escalofrío en todo el cuerpo.
Hasta que sentiste sus besos en tu cuello, fue lo último para hacer que te movieras sobre su regazo, haciendo que su erección creciera más, tragaste saliva al sentir como te había apretado el trasero, soltaste un gemido agudo.
Cambiaron de posición quedando ahora tú abajo y él arriba, tenías una vista perfecta de él, sentiste como bajaba hasta quedar entre tus piernas, viste como te retiraba tus prendas hasta dejar al descubierto tu zona íntima, dejaste salir un suspiro al sentir sus dedos juguetear con tu clítoris, también al sentir como se abrían paso en tu interior, empezando con leves movimientos, hasta ya hacer bruscos movimientos.
Arqueaste la espalda al sentir la perfecta combinación de placer, habías llegado a tu orgasmo, pero al parecer a Gyōmei no le importaba, él seguía masturbándote con sus dedos y boca, hasta que le jalaste un poco el cabello fue cuando se separó de ti, lamió sus labios acercándose peligrosamente a ti.
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Sentías tu interior doler, era claro, su tamaño era un poco más grande a comparación de los demás, sin contar con el grosor.
Pequeñas lágrimas se formaban en tus ojos, haciendo que algunas de ellas cayeran de tus ojos, Gyōmei con cuidado las limpio sin dejar de dar estocadas lentas pero profundas.
Sentías que no podías más, pero parecía ser que a él no le importaba, y de hecho sí, pero estaba un poco más ocupado en buscar en placer para ambos, dejando de lado la preocupación.
Llegó un punto en el que querías más a pesar de estar lastimando tu interior, así que se lo hiciste saber, haciendo que aumentara sus embestidas.
Jurabas que podías escuchar el sonido de la cama moviéndose y rechinando, pero lo que sin duda se podía escuchar era el sonido de sus pieles chocando, aunque, lo que más se escuchaba eran tus gemidos, los cuales eran bastantes altos y agudos, incluso podrían compararse con pequeños gritos.
La espalda de Gyōmei ya había sido marcada por tus uñas, su cuello y hombro estaban repleto de chupetones y mordidas.
Cerraste fuertemente los ojos al sentir como Gyōmei te levantaba y cambiaba de posición, haciendo que quedaras sentada sobre su miembro, esperó un poco y con la respiración agitada te dijo que siguieras, con un poco de dificultad empezaste a dar pequeños brincos.
