Alatz ♡ Offgun ♡ [Adaptación]

Capitulo 9

-¡Gwen! -gritó Ohm: sus hijos estaban discutiendo. El timbre volvió a sonar.

-¡Que yo no fui!

Ohm bufo, y fue a abrir la puerta. Sonrió al ver a su hermanito ahí, aunque, no duró mucho cuando vio su aspecto; tenía ojeras pronunciadas y el cabello revuelto. Reprimió un gruñido de protección al ver que estaba llorando.

-¿Qué pasó? -interrogó el Alfa, frunciendo el ceño.

Ohm se hizo a un lado y el Omega entró en silencio, se quedó junto a él, observándolo cerrar la puerta.

-¿Gun? -. El Omega solo lo abrazó por la cintura y sollozó en su pecho-. ¿Qué pasa?, ¿a quién tengo que dispararle, tesoro? -. Ohm acarició la espalda de gun-. ¡gum!, responde. Yo lo resuelvo, solo dime quien...

-White

Ohm se tensó; la relación que gun y white compartían, era complicada. Ohm no podía manejar eso, Pram, necesitaba de pram.

Pat, el lobo de ohm, olfateó a white preocupado; White estaba dormido y, por más que lo el Alfa lo intentara, no despertaba.

Ohm gruñó: ¿Qué le pasaba a su tesoro? Gun era del tipo de persona que te amaba, pero no te lo decía. No lloraba enfrente de las personas, aunque estuviera destruido: decía que eso lo hacía débil, limitaba su expresión de emociones a; Sonrisas, pequeños abrazos y apodos bonitos. Entonces... ¿Qué era eso tan malo, para que su hermano llore en sus brazos?

-Duele. -sollozó el Omega. Ohm frunció su nariz: las feromonas de miedo que estaba recibiendo lo hacían querer gruñir.

-¿ohm?, ¿hueles eso?, tus Alfas están enriqueciendo. -habló nanon, llegando hasta ellos-¿gun? -. El Omega acarició su pancita de seis meses, levantó un ceja y se acercó a ellos-. ¿A quién hay que dispararle? -cuestionó sin gracia el moreno.

Nanon hizo una mueca: ohm estaba formulando «White». El moreno le hizo señas a su Alfa; quería que lo siga hasta la sala.

-Duele..., duele. -. Gum se separó del pecho de ohm, mientras caminaban hasta la otra habitación, sus ojitos estaban llenos de lágrimas. El Omega se tocó el pecho-. Aquí, ohm. Dile que pare. Haz que pare. -sollozó el castaño.

Se sentaron en el sillón, ohm revisó a gun. Tocó su pecho , tanteando la zona, pero gun nunca se alejó de su tacto. El Alfa vio lo ojos de su hermano, casi completamente amarillos.

-¿White? -interrogó el Alfa, su hermano negó con un puchero.

-Sigo siendo gun. -. Ohm frunció el ceño al verlo temblar-. No quiero que él nos controle. -hipó el Omega.

¿Cómo puede controlarlos si está dormido? Ohm, White está dormido desde antes que llegaran.

Ohm volteó a ver a nanon: recibía angustia a través del lazo. Su Omega se estaba mordiendo las uñas de una mano, la otra estaba posada en su pancita; miraba fijo a gun y su pierna se movía.

-nanon, ve con los niños. -. Nanon lo miró y negó. -Haz lo que digo, Omega. Esto no le hace mejor al cachorro. -pidió el Alfa, gun se acurrucó más a él.

-No me digas lo que tengo hacer. -le respondió nanon-El cachorro está bien. Gun, no. -. Nanon acarició su vientre y frunció el ceño.

-Omega. Solo quiero que estén bien. -. Gun gimoteó, apretando la mano de su hermano.

-No. No vas a dejarme fuera de esto, ¡es mi amigo! -se quejó.

Los cachorros de la pareja estaban asomados, sus cabezas sobresalían del marco de la puerta, observando a los adultos.