Él frío príncipe Min

여섯 (yeoseot)

Paso una semana y mi mamá no se recuperaba lo contrario estaba empeorando mi papá y yo estábamos ya preparando para lo peor.

Lo cual no tardó en llegar.

Era un Lunes por la mañana mi mamá nos llamó a los dos ya que quería hablar con los dos.

—Mi querido Doyun todo esté tiempo que estuve a tu lado fue increíble gracias por amarme.

—Mi niña mi preciosa Eun-Ji cuida mucho a tu padre y cuídate mucho por favor ya llegó mi momento de partir voy a unirme junto a nuestro Young Soo.

Fueron sus últimas palabras ya que luego de éso cerró sus ojos.

La despedimos como a ella le hubiera gustado rodeada de flores.

☆☆☆☆☆

Nuestra vida siguió adelante ya no éramos 4 ahora éramos 2 papá y yo.

Peró ahora yo tenía un propósito el cual era la VENGANZA.

Quería vengarme de la familia real ellos me quitaron lo más hermoso y valioso que tenia lo cual era mi hermano y mi mamá.

Todas las mañanas y tardes iba al bosque y me ponía a practicar con una espada que había echó con madera, quería hacer la mejor en la espada para matar al maldito que mato a mi hermano.

Después de haber practicado toda la tardé me bañé en el río y me dirigí a la casa.

—Hija por fin llegaste a la casa ¿otra vez estabas en el bosque?

—Si estaba practicando con la espada.

—Eun-Ji ya perdimos a tu hermano y a tu mamá no quiero perderte a ti también además ¿ Cómo vas hacer para entrar al palacio?

—Algo se me ocurrirá pero no te preocupes no lo haré como mi hermano lo hizo.

☆☆☆☆☆☆

Y para mi sorpresa así pasó.

El día de hoy estaba en el mercado del pueblo comprando cosas para la comida cuando veo que algunas personas estaban rodeadas viendo algo así que fui a ver que era y era un comunicado del castillo.

Palacio Gyeonghuigung

Estamos necesitando personas ya sea mujeres o hombres no importa la edad ya que necesitamos que trabajen en el palacio

Está era mi oportunidad.

Me dirigí a la casa y puse las compras en la cocina, busque un cuchillo para cortarme el pelo.

—¿Qué vas hacer hija?

—Voy a cortarme el pelo para entrar al castillo.

—¿Qué?

—No se si has visto que hay un comunicado del palacio donde necesitan a alguien para que trabaje.

—Si lo vi hoy en la mañana.

—Pues ésa es mi oportunidad para entrar al palacio.

—¿Peró qué pasará si no te eligen a ti ?

—Regresó aquí si no lo intentó nunca lo sabremos papá.

—Cuídate hija por favor.

—Lo haré papá.

Me dio un besó en la frente y salí de la casa directo al palacio Gyeonghuigung.