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¿Que es lo más malo que podría pasar de aceptar el pedido de los héroes?. La respuesta es todo, todo lo malo que podian empeorar y no debían hacerlo, ellos  lo hicieron, lo bueno es que AFO había sido atrapado al final. Sus hermanos entraban en ligeras crisis cuánto el desastre aumentaba aun más. Dabi no era alguien que hacía algo para ayudar a los demás pero siempre estaba cerca de sus hermanos por si necesitaban algo. Después de todo había estado en cada práctica médica o policial, idea o estupidez que tuvieran, así que sabía que hacer.

Pero ahora quería comportarse como un verdadero villano y matar a su "padre" de sangre. Aunque el quemarlo le diera cierta satisfacción por dañar a este hombre imbécil, luego tendría que usar el hielo para evitar las heridas por quemaduras e ir después a revisión bajo su hermano y este ya tiene muchas cosas que dirigir.

Suspiro cansado centrándose en ayudar en todo, miro al hombre frente a el en una camilla acompañado de un joven alado que le pedía que se mantuviera calmado.El hombre en si no solo se había lastimado a si mismo al destruir un edificio si no que había quemado a ciertos de sus compañeros en el proceso. Estaba en llamada junto a Toshinori que había dejado a su madre junto a su amiga e hijo en la parte segura del edificio para que tomaran un cierto control en lo que fuera respectivamente a la academia después de ayudar por mucho tiempo en lo que podian.

El y Toshinori estaban dirigiendo a la parte médica en la parte sur de la academia bajo las estrictas reglas de Izuku mientras que el se encargaba de dirigir la parte norte y también otros hospitales a su nombre bajo llamadas para curar a los recién llegados. No se habían logrado comunicar con Tenko pero sabían que el estaba junto a la división de rescate para sacar a los heridos de entre los escombros. Llevaban dos días así y nadie había descansado en lo absoluto desde que por la noche empezó el desastre. Izuku por más prodigio de la medicina que fuera llevaba casi tres días sin dormir y estaba apuntó del colapso.

En respuesta a todo, era un maldito caos que al parecer no acabaría pronto. Porque el héroe Dynamite llegó junto a los heridos vociferando maldiciones a doquier. Pero antes de que Izuku siquiera pudiera acercarse Dabi lo hizo primero. De por sí no les agradaba ese grupito de tres que había estado cerca de su hermano y su amigo; más el hecho de que entrara a pique de maldiciones lo aborreció aun más. Enterró en su cuello un tranquilizante sorprendiendolo en el acto como al compañero pelirrojo que lo sujetaba.

— no nos interesa oírte gritar ahora, cierra la puta boca y quejate de tu dolor en silencio ya hay mucho desastre aquí no eres el unico que sufre de dolor

Siseó molesto y estaba seguro que era a causa de la falta de sueño pero definitivamente estaba siendo mucho más volátil y se da cuenta muy bien porque pronto una mano lo agarra con fuerza del brazo y lo jala para llamar su atención. Tenía su mano y ojo izquierdo en llamas, así que las apagó con rapidez viendo a Izuku que llegó a tiempo como para que no se extendieran por su cuerpo y no tuviera quemaduras.

— habitación 3, Dabi tu ve a mi oficina es hora de que duermas, te necesito tranquilo para cuando ya cambié el turno

Menciono y Dabi no pudo hacer más que hacerle caso. Así de alterado no ayudaría a nadie y menos a su hermano que lo necesitaba bien. Irónico que el más cansado le dijera eso a alguien pero; ¿Que puede hacer el si no que hacerle caso?. Aunque es gracioso cuando entra a su "oficina" la cual estos días había sido la área de ultrasonido. Extendió la cortina y se recostó boca arriba sobre una camilla haciendo un sonido extrangulado mientras pasaba las manos por su cara y respiraba hondo. Solo necesitaba un momento y se calmaría, no podría dormir mientras sabe que su hermano está ahí fuera solo lidiando con demasiada gente y muchos idiotas.

Se golpea las mejillas con fuerza para que le duela al caer en cuenta que uso su fuego al frente de muchas personas. Además, exactamente frente a uno que tenía su mismo apellido y eso era una de las cosas que siempre había evitado cuando se los cruzaba por desgracia. Digo, no es como que haya cortado cada lazo con ellos o con su madre de ahí vienen los benefactores anónimos que les dan regalos por su buen trabajo, pero fuera de eso definitivamente no puede siquiera verse hablándoles con normalidad.

¡Se supone que está muerto! Ah qué idiota fue.

Suelta un largo suspiro y se da otros golpes más en el rostro y asi espanta el sueño y se pone de pie de golpe. El dolor lo invade al hacerlo, todo su cuerpo pica por estar de pie de nuevo y siente como si el sueño tuviera huecos y se agrandaran por cada vez que este de pie aún más. Su rostro arde y duele por los golpes que se dió. Asiente satisfecho ante eso, eso le servirá para mantenerse despierto por más tiempo.

— ¡Vamos, Un poco más y se acaba!

Sorprendentemente paso veinte minutos dentro de aquel lugar. Se mete al baño para hacer sus necesidades y luego sale a lavar su cara con mucha agua fria. Después sale corriendo por los pasillos llendo directamente al frente donde deben estar su hermano y el señor Toshinori. El poco frío que le da el aire acondicionado en el hospital le provoca cosquillas en la cara ante el agua fria que se había echado antes.

Justo a tiempo llega al frente para ayudar a su hermano con unos pequeños infantes que llegan al área hospitalaria. Izuku está entrando en pánico porque están extremadamente heridos. Son los bomberos quienes los traen así que nadie se sorprende cuando el chilla antes de empezar a maldecir bastante. Tenko había llegado detras de una línea de bomberos siendo sujetado por otro grupo. Venía del mismo lugar que el niño con una varilla incrustada en su costado derecho. Uno de los edificios se había derrumbado antes de tiempo sin que Tenko pudiera usar su poder para destrozarlo así que su primer movimiento fue cubrir a los niños con su cuerpo.

Izuku toma a los niños en brazos y Dabi se encargó de llevar a Tenko con cuidado. Los llevaron hasta el final del pasillo y los sentaron en las camillas libres y empezaron a revisarlo. Lo bueno es que los niños estarían bien, claramente estaban muy heridos pero no era de gravedad y solo para el futuro serían pequeñas cicatrices lo que quedarían el resto podría ser a base de medicamentos y calmantes y podrían soportar el dolor y descansar para recuperarse.

En cambio Tenko era un casi diferente. Dabi destruyó lo poco que le quedaba de camisa y y fue limpiando los hilitos de sangre que salían de esta siendo detenidas nadamás que por la varilla que evitaba que su hermano se desangrara. Ciertamente adoraba el hecho de que habían estado en cada curso de Izuku en cuestión a medicina y eran sus fieles oyentes para cuando quería practicar. Porque si a Tenko le hubiera parecido buena idea destruir la varilla dentro de su herida tendrían que hacer un funeral pronto.

—Necesito que vayas desvaneciendo poco a poco la varilla

Señaló a su hermano para que procediera a destruir la varilla y este asintió levemente mientras tenía una mano extendida por si tenía que llegar a sujetar un pañuelo en su herida y así lo hizo, tocó la varilla y la desvaneció dejando solo pequeñas cenizas en su mano. Dabi gruño y se movió con rapidez para presionar contra la herida del frente el pañuelo para aguantar la sangre de este lado. Tenko la sujeto mientras el le ponía atención a la herida de su espalda que había sido la salida de la vara. Izuku había terminado con los niños así que había ido a socorrer a ambos.

— Mierda, duele, carajo, carajo

Siseó Tenko intentando no quejarse tanto ante el dolor. Dabi y Izuku habían limpiado y vendado su herida trasera y ahora estaban haciendo lo mismo con la del frente y Tenko no podía hacer más que golpear la camilla por el dolor. Cuando terminaron Izuku empujó su camilla por todo el pasillo con ayuda de Dabi para llevarlo a la sala de rayos x. Al díablo con los demás al peliverde solo le importaba su hermano ahora y solo quería saber si este no se había herido demás.

Ambos hermanos corren empujando la camilla por los pasillos esquivando a la gente. Tenko agradece mentalmente de que su sugerencia de pasillos anchos la hubieran escuchado. Porque ahora están esquivando a muchas personas con mucha agilidad moviendole a el en camilla. Tenko mira a Dabi que está concentrado en seguirle el paso a Izuku mientras que el peliverde tiene una mirada de extrema preocupación en su rostro mientras su mano aprieta sus heridas y Tenko puede reconocer ese sentimiento.

— Estoy bien, calma...

Puede mutisar en un susurro no quiere que su hermano reviva los recuerdos que ese día, ninguno de los tres debería tener porque hacerlo. Los tocaría a ambos pero tiene sus manos algo ocupadas aguantando su venda de igual forma. Solo suspira levemente cansado. Ojalá el final del día llegue muy pronto.

Necesitan un buen descanso.

Aoyama, ¿que haces?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora