King Sergio- Chestappen

Este cuento se a acabado. P2

Parte 2 y final del episodio especial.

5 años después

El piojo y la pulga se van a casar
Y no se han casado por falta de maíz
Tiro lo tiro, tiro liro liro
Tiro lo tiro, tiro liro lan

Sonaba la canción por todo el castillo, Sergio decía que era un requisito escucharla antes de casarse o era de mala suerte, y aunque el no era muy supersticioso no quería arriesgarse a nada.

Max se paró frente al enorme espejo arreglándose el cabello por milésimas vez.
"¿Crees que a Sergio le gustará mi traje? ¿Qué pasa si de repente ya no quiere casarse conmigo? Dios mío ¿y si me deja frente al altar? Y si..." 

Lando puso los ojos en blanco: "Maxy, el rey te pidió que te casaras con él porque te quiere, el no se arrepentirá ahora.

"Pero, ¿y si lo hace?" Preguntó el rubio con inseguridad en su voz.

"Está bien, escucha. Sé que eres la novia hoy, pero eso no significa que tengas que actuar como tal. ¡Ay!" Grito Lando por que Max le había dado un puñetazo en el brazo.

"En lugar de lastimarme, probablemente deberías considerar apurarte o llegaremos tarde y no querrás perderte tu propia boda, ¿verdad?" el de risos le guiñó un ojo y luego presionó un ramo de flores blancas en su mano antes de sacarlo de la habitación.

La madre de Max los esperaba frente a la iglesia que se encontraba en el castillo, Lando le guiñó un ojo a su amigo antes de meterse dentro del viejo edificio.

"¿Estás bien?" Su madre le sonrió, a lo que el solo pudo asentir.

"No puedo creer que mi niñito se va a casar" murmuró Sophie, tratando de contener las lágrimas por que sabía que si ella lloraba, Max se pondría aun mas nervioso y ella estaba aquí para darle apoyo, no para empeorar la situación.

"Respira hondo cariño, todo irá bien". Dijo Sophie, con tanta convicción que Max tuvo que creerle, el rubio agarró la mano de su madre con fuerza y ​​permitió que ella lo llevara hacia a la iglesia.

La ceremonia iba a ser algo íntimo, solo familia y amigos cercanos, y después una pequeña fiesta con ellos, Sergio quería que fuera algo especial para los dos, que el menor no estuviera nervioso durante toda la misa, que se pudiera relajar y enfocarse en lo que realmente importa, ellos y su amor, esta era su manera de demostrarle a Max lo mucho que lo amaba.

Pero la verdadera celebración se iba a realizar el día siguiente, iba a ser enorme pues era una boda real, venía gente importante de todo el mundo, realeza, políticos y filósofos, y aún que Max no estaba muy emocionado por eso, sabia que era necesario, no querían empezar una guerra por que alguien se ofendiera de no ser invitado a su boda, lo acepto con gracia e iba a actuar acorde a la ocasión, era su manera de demostrarle a Sergio lo mucho que lo amaba.

Su mamá lo camino por el Altar, donde estaba su padrino que era su hermano Mick, ellos ya habían arreglado todo y el menor quería estar ahí para apoyar a su hermano, también estaba el padrino de Sergio, que era su mejor amigo Fernando y por supuesto, su futuro esposo, esperándolo.

Max sonrió ampliamente cuando Sergio se dio la vuelta, el mayor estaba rebosante de felicidad, Sergio se miraba guapísimo con su traje rojo de la realeza, sus ojos brillaban y Max no podía creer que fuera real, que se iba a casar con el rey, con su Sergio.

El Mexicano extendió su mano y la madre de Max colocó con cuidado la mano de su hijo en la de él, entregándoselo para hacerlo feliz.

Durante toda la ceremonia, Max trató de no llorar, normalmente no era tan emocional pero culpaba al estrés de la boda y realmente estaba tan increíblemente feliz, pasaría el resto de su vida con el hombre que estaba parado justo a su lado y era todo lo que siempre deseó. Sergio nunca dejó de mirarlo, tomó su mano toda la ceremonia.